... El que tiene este cargo, ha de ser irreprensible, debe ser apto para enseñar; no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6
PREPARAMOS NUESTRO ESTUDIO PARA ENSEÑAR EN LA CONGREGACIÓN
JEREMÍAS 19:1-13
19:1 Así dijo YHVH: Ve y compra una vasija de barro de alfarero, y lleva contigo de los ancianos del pueblo y de los ancianos de los sacerdotes,
2 y sal al valle de Ben-Hinom, que está a la entrada de la puerta del alfarero, y proclama allí las palabras que Yo te diré.
3 Di: ¡Oh reyes de Judá, y vosotros, habitantes de Jerusalem, oíd el oráculo de YHVH! Así dice YHVH Sebaot, Dios de Israel: He aquí Yo traigo un mal sobre este lugar, tal así, que a todo el que lo oiga le retiñirán los oídos.
4 Porque me han abandonado y han enajenado este lugar, quemando allí incienso a otros dioses que ellos no conocieron, ni sus padres, ni los reyes de Judá, y han llenado este lugar de sangre de inocentes.
5 Y han edificado los lugares altos a Baal, para quemar con fuego a sus propios hijos como holocaustos a Baal; cosa que Yo no ordené ni dije, ni me pasó por el pensamiento.
6 Por tanto he aquí vienen días, dice YHVH, en que no se le llamará más a este lugar Tofet, ni Valle de Ben-Hinom, sino Valle de la Matanza.
7 Y haré nulo el consejo de Judá y de Jerusalem en este lugar, y los haré caer a espada ante sus enemigos, y en mano de quienes buscan su vida, y daré sus cadáveres como pasto a las aves del cielo y a las bestias de la tierra.
8 Convertiré esta ciudad en objeto de asombro y de silbido: todo el que pase por ella se asombrará y silvará a causa de todas sus plagas.
9 Haré que se coman la carne de sus propios hijos y la carne de sus propias hijas, y cada uno comerá la carne de su compañero, en el asedio y la aflicción con que los afligirán sus enemigos y los que buscan su vida.
10 Luego quebrarás la vasija ante los ojos de los hombres que vayan contigo,
11 y les dirás: Así dice YHVH Sebaot: De este modo quebraré a este pueblo y a esta ciudad, como se quiebra una vasija de alfarero, que no puede recomponerse más; y enterrarán en Tofet hasta no haber lugar.
12 Así haré con este lugar, dice YHVH, y con sus habitantes, hasta que esta ciudad sea como Tofet.
13 También las casas de Jerusalem y las casas de los reyes de Judá, que están contaminadas, serán como este lugar de Tofet: todas las casas sobre cuyos terrados queman incienso a todo el ejército de los cielos y vierten libaciones a otros dioses.
NUESTRO AUTO ESTUDIO PARA ENSEÑAR EN LA CONGREGACIÓN
1Crónicas 17
Palabra Clave: FIDELIDAD
1 Cuando David ya habitaba en su casa, sucedió que David dijo al profeta Natán: He aquí yo habito en casa de cedro, pero el Arca del Pacto de YHVH está entre cortinas. 2 Y Natán respondió a David: ¡Haz todo lo que está en tu corazón, porque Ha-’Elohim está contigo! 3 Pero esa misma noche vino palabra de Dios a Natán, diciendo: 4 Ve y di a David mi siervo: Así dice YHVH: Tú no me edificarás Casa en que habite. 5 Porque no he habitado en casa alguna desde el día en que hice subir a los hijos de Israel hasta hoy, sino que estuve de tienda en tienda, y en tabernáculo. 6 Por dondequiera que anduve con todo Israel, ¿acaso he hablado palabra con alguno de los jueces de Israel, a quien haya mandado apacentar a mi pueblo, para decirles: ¿Por qué no me edificáis una Casa de cedro? 7 Por tanto, ahora dirás a mi siervo David: Así dice YHVH Sebaot: Yo te tomé del redil, de seguir tras el rebaño, para que fueras caudillo sobre mi pueblo Israel, 8 y he estado contigo en todo cuanto has andado, y he cortado de tu presencia a todos tus enemigos, y te haré un nombre como el nombre de los grandes de la tierra. 9 Asimismo he dispuesto un lugar para mi pueblo Israel, y lo he plantado para que habite en él, y no sea más removido, ni los hijos de iniquidad continuen oprimiéndolo como al principio, 10 como desde los días en que puse jueces sobre mi pueblo Israel, y someteré a todos tus enemigos; además, te hago saber que YHVH te edificará casa. 11 Y cuando tus días sean cumplidos para ir con tus padres, levantaré descendencia después de ti a uno de entre tus hijos y afirmaré su reino. 12 Él me edificará Casa, y Yo confirmaré su trono eternamente. 13 Yo le seré por padre y él me será por hijo, y no apartaré de él mi misericordia, como la aparté de aquél que estaba antes de ti, 14 sino que lo confirmaré en mi Casa y en mi reino eternamente, y su trono permanecerá eternamente. 15 Conforme a todas estas palabras, y según toda esta visión, así habló Natán a David. 16 Entonces fue el rey David, y se sentó delante de YHVH, y dijo: ¡Oh YHVH ’Elohim! ¿Quién soy yo y qué es mi casa, para que me lleves tan lejos? 17 Y aun esto fue poco ante tus ojos, oh ’Elohim, pues también has hablado de la casa de tu siervo para un lejano porvenir, y me has considerado según la medida de un hombre excelso, oh YHVH ’Elohim. 18 ¿Y qué más puede decirte David en cuanto a la gloria con la que has honrado a tu siervo, si Tú conoces a tu siervo? 19 Que por amor a tu siervo, oh YHVH, y según tu corazón, has hecho toda esta gran obra, para dar a conocer todas tus grandezas. 20 ¡Oh YHVH!, no hay nadie como Tú, ni hay ’Elohim fuera de Ti, conforme a todo lo que hemos oído con nuestros oídos. 21 ¿Y quién como tu pueblo Israel, nación única en la tierra a la que Ha-’Elohim redimió como pueblo suyo, para manifestar tu Nombre mediante hazañas grandes y terribles, expulsando naciones de delante de tu pueblo, al que rescataste de Egipto? 22 Pues hiciste a tu pueblo Israel pueblo tuyo para siempre, y Tú, oh YHVH, has llegado a ser su Dios. 23 Ahora pues, oh YHVH, confirma para siempre la palabra que has hablado acerca de tu siervo y de su casa, y haz como has dicho. 24 Y sea confirmado y engrandecido tu Nombre para siempre, a fin de que se diga: ¡YHVH Sebaot, Dios de Israel, es ’Elohim para Israel! Y sea la casa de tu siervo David establecida delante de tu presencia. 25 Porque tú, Dios mío, has revelado al oído de tu siervo que le edificarás una casa; por eso tu siervo ha hallado valor para orar ante Ti. 26 Ahora pues, YHVH, ¡Tú eres Ha-’Elohim!, y has prometido a tu siervo este bien. 27 Dígnate pues bendecir la casa de tu siervo, para que permanezca perpetuamente delante de Ti, porque Tú, oh YHVH, la has bendecido, y será bendita para siempre.