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domingo, 30 de octubre de 2022

DIOS NOS LLAMA A PREDICAR CON EXCELENCIA

PARA RECORDAR ... El que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6


PREDICAR CON EXCELENCIA
Proverbios 30:1–6, un pasaje que ha sido muy descuidado, pero que al mismo tiempo es notable, evoca nuestra necesidad de la Palabra de Dios:
    Palabras de Agur, hijo de Jaqué; la profecía
    que dijo el varón a Itiel.
    “Ciertamente más rudo
      soy yo que ninguno,
    ni tengo entendimiento de hombre.
      Yo ni aprendí sabiduría,
    ni conozco la ciencia del Santo.
      ¿Quién subió al cielo, y descendió?
    ¿Quién encerró los vientos en sus puños?
      ¿Quién ató las aguas en un paño?
    ¿Quién afirmó todos los términos de la tierra?
      ¿Cuál es su nombre, y el nombre de su hijo, si sabes?
      ¡Seguro que lo sabes!
    Toda palabra de Dios es limpia;
      Él es escudo a los que en él esperan.
    No añadas a sus palabras,
      para que no te reprenda, y seas hallado mentiroso”.
En este pasaje tan rico, que recompensa a la reflexión cuidadosa, Agur revela una profunda comprensión de sus límites como ser humano y el cansancio resultante (Prov 30:1) de tratar de vivir sin la Palabra de Dios. No importa lo brillantes e iluminados que podamos estar, no hemos subido al cielo ni hemos vuelto a bajar; no hemos recogido el viento ni atado las aguas en un paño; no hemos establecido los límites de la Tierra. En Eclesiastés, una metáfora común que el Predicador usa para la búsqueda autónoma y agotadora de la sabiduría es que es como “perseguir al viento” (véase, por ejemplo, Ec 2:26). El entendimiento humano y la sabiduría requieren una ayuda externa a la creación, del Santo (Pr 30:3), porque son creación, los humanos no son el Creador (Pr 30:4). Esto significa que la Palabra de Dios, que en hebreo significa literalmente “refinado” y que es, por lo tanto, pura y sin defectos (Pr 30:5), tiene un valor inestimable para la vida humana y el entendimiento en todas sus dimensiones.
En la actualidad, es difícil expresar la importancia de la Biblia como la Palabra de Dios tanto en la Iglesia como en el mundo. En medio de un resurgimiento global de la religión (no solo del cristianismo), el cansado Occidente continúa avanzando pesadamente por el camino del vacuo secularismo, como lo demuestra, por ejemplo, el nuevo ateísmo. En las profundidades de nuestro individualismo y cultura de consumo global, es un desafío para la imaginación el ver la gran necesidad que hay de la Palabra de Dios y su relevancia. En gran medida, la modernidad se basa en el deseo de marginar y eliminar a Dios de la dimensión pública de la vida, y además ha tenido éxito en su propósito, aunque no sin costo.
Dentro de los círculos más importantes de la misionología (el estudio de la misión), no llegó a consolidarse una crítica seria de la cultura occidental hasta después del Consejo Misionero Internacional en Tambaram, en 1938. Ahora, dos guerras mundiales y el holocausto hacen que sea imposible asumir que la cultura occidental es superior, fundamentalmente cristiana o incluso neutral. Los desastres y tragedias que afectaron a Occidente en el siglo XX, lo que, en algunas estimaciones, son las más brutales de la historia, afectaron a la Iglesia occidental en, al menos, dos formas principales. Por ejemplo, Walter E. Williams señaló en el año 2000 que “el siglo XX (…) será recordado por el progreso técnico sin precedentes, el avance del conocimiento y las mejoras en los estándares de vida. También será recordado como el siglo más brutal de la humanidad. Las guerras internacionales y civiles han producido un número de muertos de aproximadamente 50 millones de personas. Por más trágico que sea ese número, es pequeño en comparación con el número de personas asesinadas por su propio gobierno”. Por un lado, la estrecha asociación del cristianismo con Occidente significó que, como se evaluó y criticó a la cultura occidental, ocurriera lo mismo con el cristianismo. La cuestión de la singularidad de Jesús está en el corazón de la creencia cristiana, de ahí que muchas de las principales denominaciones abandonaran el firme compromiso de la “cuestión de la singularidad, suficiencia y finalidad de Jesucristo como el Señor y Salvador del mundo”3. Dentro de otros círculos cristianos y en la tradición evangélica, este compromiso se ha mantenido, pero con demasiada frecuencia acompañado de la pérdida de las dimensiones públicas y más amplias de la fe, que abarcan toda la creación, lo que conlleva que Jesús se afirme como salvador, pero no como salvador del mundo. Esto es lo que llamamos la “privatización de la religión”, en la cual la libertad de religión se tolera dentro de la esfera privada de nuestra vida, pero se mantiene fuera de las principales esferas públicas.                                                                                                                                                                El resultado es que, en el lado liberal del cristianismo occidental, nos quedamos con un “Evangelio” vacío que se alinea principalmente con la izquierda de nuestra cultura y es constitucionalmente incapaz de “enfrentar lo negativo y la implicación positiva de la confesión de Jesús como Señor”, es decir, permitir que el Evangelio dé forma y critique nuestra cultura occidental. Dentro del mundo evangélico, mantenemos el compromiso de que Jesús es el Señor, pero lo vemos principalmente como un salvador personal, por lo que tenemos poco que decir a un occidente que está en crisis, por no hablar del hemisferio sur.  De un modo bastante natural, y desgraciadamente, esta polarización se manifiesta en la predicación en las iglesias. En I Believe in Preaching, John Stott señala aspectos similares a los anteriormente mencionados. Señala que los liberales apuntan directamente a la vida contemporánea en su predicación. ¡Uno no siempre está seguro de dónde provienen los sermones! Recuerdo que hace algunos años participé en una reunión de teólogos prácticos de todo Reino Unido. Se nombraron a dos miembros para interpretar nuestras meditaciones de un modo general. Uno comentó que él pensó que estábamos de acuerdo en que la Biblia no debería estar sobre nosotros, sino a nuestro lado como si se tratara de un compañero de diálogo. Un profesor de hebreo y del Antiguo Testamento se atrevió a mostrar el hecho de que esta no era la opinión de todos nosotros. Claramente, si la Biblia se reduce a un compañero de diálogo, entonces no hay razón por la cual la predicación deba estar arraigada y fundamentada en las Escrituras. Si lo comparamos, los sermones evangélicos se originan en la Biblia, pero tienden a no estar dirigidos a ninguna parte en particular. Como dice Stott de la predicación evangélica:                                                                                 Si somos conservadores (…) y mantenemos la tradición histórica de la ortodoxia cristiana, vivimos en el lado bíblico del golfo. Ahí es donde nos sentimos cómodos y seguros. Creemos en la Biblia, amamos la Biblia, leemos la Biblia, estudiamos la Biblia y exponemos la Biblia. Pero, por otro lado, nuestra casa no está asentada en el mundo moderno (…). Si tuviera que dibujar un diagrama de la brecha existente entre estos dos mundos, y luego dibujar los sermones en el diagrama, tendría que dibujar una línea recta que comenzara en el mundo bíblico y luego se elevara en el aire en una trayectoria recta que nunca llegara a aterrizar en el otro lado. Porque nuestras predicaciones en raras ocasiones son terrenales. No logran construir un puente hacia el mundo moderno. Son bíblicas, pero no contemporáneas.                                                                                                                                                                                                                                        Stott caracteriza esta dicotomía entre la predicación liberal y la evangélica como una de las mayores tragedias de nuestros días:
Por un lado, tenemos a los conservadores que son bíblicos, pero no contemporáneos. Mientras que, por otro, los liberales y los radicales son contemporáneos, pero no bíblicos. Sin embargo ¿por qué hacemos esta polarización tan ingenua? Cada lado tiene razón para su preocupación, la primera de conservar la revelación de Dios, y la segunda de relacionarse de manera significativa con personas reales en el mundo real. ¿Por qué no podemos mezclarnos con las preocupaciones de los demás? ¿No es posible que los liberales aprendan de los conservadores sobre la necesidad de conservar los fundamentos históricos y bíblicos del cristianismo, y que los conservadores aprendan de los liberales la necesidad de relacionarse de un modo radical y relevante con el mundo real?
El análisis de Stott sobre la predicación evangélica ofrece una reflexión cercana sobre sus implicaciones. Los evangélicos se enorgullecen, comprensiblemente, de ser “los cristianos de la Biblia”, y es mérito suyo que tengan a la Biblia en tan alta estima. La modernidad, no solo a través de una gran cantidad de estudios bíblicos, ha apuntado una y otra vez a la fiabilidad de las Escrituras. Ya sea a través de la doctrina de la inerrancia o de la infalibilidad, en general, los evangélicos y otros cristianos ortodoxos se han mantenido firmes en la naturaleza totalmente confiable de la Biblia como las Sagradas Escrituras. En mi caso, fue durante los años en la Universidad de Oxford que me di cuenta de que había una brecha existente entre la naturaleza lógica de dichas doctrinas y la cuestión hermenéutica de cómo escuchar a Dios hablando con autoridad a través de las Escrituras. ¿Cómo escuchamos las Escrituras para que podamos predicar la Biblia con su valor al completo en el mundo de hoy?
Volviendo a la caracterización de Stott de la predicación evangélica, el área de aplicación es donde los problemas surgen con mayor claridad ya que, si el sermón no está dirigido a ningún lugar en particular, estará destinado a estrellarse. En la predicación, las posibilidades y el desafío de aplicación que se plantean se resumen en la frase “¡aterriza el avión!”. Debo esta metáfora de comparar un sermón con volar un avión tan sugerente a mi amigo, compañero y párroco, Ray David Glenn. Unos días antes del domingo, no es raro que conversemos sobre cómo aterrizar el texto sobre el que vamos a predicar en St. Georges el próximo domingo. A través de la oración, la reflexión y el arduo trabajo exegético, es posible que hayamos llegado a un entendimiento del texto, pero ¿cómo lo compartimos el domingo en nuestro contexto particular para que, a través de la predicación, escuchemos el mensaje que Dios tiene para nosotros hoy? ¿Cómo aterrizamos el avión cuyo cargamento es la palabra viva de Dios para que esté presente y, así, las congregaciones la reciban como tal?                                                                                                                                                                                                                 DESCARGAR                                                                                                                      ADQUIERALO AQUÍ.

martes, 6 de septiembre de 2016

Porque ejemplo os he dado, para que así como yo os hice, vosotros también hagáis... el que recibe al que yo envío, a mí me recibe; y el que a mí me recibe, recibe al que me envió... Yo sé a quiénes he elegido

RECUERDA Por eso, el que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6




PREPARARSE PARA SERVIR MEJOR AL MAESTRO

Cómo preparar sermones bíblicos
Mientras entablamos un diálogo con alguien, tenemos la oportunidad de verificar, sobre la marcha, si estamos comprendiendo lo que la persona nos quiere decir. Así que entonces la interrumpimos, formulamos preguntas, parafraseamos lo que nos dice y clarificamos nuestras dudas. 

El proceso es activo, dinámico y, ciertamente, complejo.

Al acercarnos a un texto, enfrentamos una realidad distinta. El texto nos llega por sí solo. Es un discurso separado de su autor y de su contexto original. Todavía más, es un discurso colocado en un nuevo contexto —el nuestro— que posiblemente es muy distinto al de su contexto original. 

El diálogo directo con el autor, incluyendo la clarificación de sus intenciones y de nuestras dudas, se hace prácticamente imposible. Así que la pregunta se impone: ¿Cómo se interpreta un texto?

I. Los tres pasos
El sistema de los tres pasos ha sido desarrollado en diálogo con teorías contemporáneas de interpretación literaria. Nuestro objetivo principal ha sido diseñar un método que, por medio de preguntas y actividades específicas, lleve al expositor de la Biblia a una interpretación válida del texto.
La interpretación de cualquier texto bíblico siempre provoca un encuentro entre el mundo donde surgió el texto y el del intérprete. Este encuentro no sólo modifica nuestra forma de ver el texto, sino que también modifica nuestra forma de vernos a nosotros mismos. Así pues, el lector que comenzó interpretando el texto termina siendo interpretado por el texto. Ese texto, alguna vez frío y distante, ha cobrado vida. Ahora nos llama, nos juzga y nos interpela.



Habiendo dicho esto, pasemos a ver con más detalle cada uno de los tres pasos. 

A. El punto de contacto
El punto de contacto es el espacio donde nuestra experiencia personal se liga íntimamente al texto bíblico; es el punto donde el texto nos toca personalmente. El punto de contacto es un momento devocional donde el estudio de las Escrituras se entrelaza con la alabanza, la adoración y el testimonio. Si fuésemos a explicarlo por medio de un diagrama, el punto de contacto sería el espacio donde “C” se traslapa con “B”, la esfera de experiencia del intérprete y “A” el texto bíblico [vea diagrama 1].

Establecer el punto de contacto con el texto del cual uno se propone predicar es sumamente importante. Esto se debe a varias razones:

• Muchos de nosotros hemos oído un sinnúmero de sermones y estudios bíblicos. Por ello, cuando nos acercamos a un pasaje bíblico conocido, es posible que ya traigamos al estudio varias presuposiciones. Estas son ideas ya formadas de antemano sobre el contenido, el mensaje y el reclamo teológico del texto. Así que la metodología que proponemos reconoce que todos tenemos presuposiciones sobre las Escrituras y que al establecer el punto de contacto no las abandonamos. Sencillamente, desde el principio, dejamos en claro cuáles son esas ideas previas y esto nos permite hacer un estudio más honesto del texto.

• Establecer el punto de contacto nos permite tener momentos de devoción personal con el texto bíblico antes de pasar al análisis crítico del pasaje. La lectura del pasaje en voz alta nos permite escuchar las distintas «voces» del texto, que son distinguibles a través de la entonación y el sentimiento con los que nos acercamos a la Escritura.

• Recordar nuestras experiencias con el texto nos ayuda a recopilar ilustraciones para el sermón. Esas ilustraciones nos facilitan movernos de lo particular a lo general en el sermón.

• Como parte del ejercicio del punto de contacto debemos anotar las preguntas y las observaciones que surgen al leer el texto. Estas anotaciones nos irán indicando lo que debemos buscar en la concordancia, los diccionarios bíblicos y los comentarios.

• En varias ocasiones, el momento de devoción que tenemos con el texto nos dará el tono dominante del sermón. Por ejemplo, nos dirá si el tono de un sermón sobre la parábola del hijo pródigo (Lc. 15:11-31) será sobre la alegría del padre, el dolor del hijo menor o la indignación del hijo mayor.

• Finalmente, al establecer el punto de contacto, anotamos los diversos temas que nos sugiere el texto. De estas ideas, podemos obtener temas para uno o más sermones.

El punto de contacto puede establecerse de distintas maneras. Puede ser que baste un solo rato de meditación. Otra alternativa es usar el modelo de la «margarita» [vea el diagrama #2]. Éste consiste en escribir el texto en el centro de un papel, rodeando el pasaje con nuestros comentarios e impresiones sobre el pasaje. Sin embargo, creo que la metodología más efectiva es la de contestar una serie de preguntas guías que provean sentido de dirección en nuestro encuentro con el texto.

A continuación voy a proponer nuestro sistema para establecer el punto de contacto. Sugiero, a quienes se interesen en emplear este método, a que le den un poco de tiempo en tanto se familiarizan con él. Más adelante, cada uno podrá modificarlo, añadiendo preguntas y actividades que respondan a su propia perspectiva teológica y personalidad.

1. Separe de 30 a 45 minutos para tener su encuentro con el texto.
2. Comience con unos momentos de oración. Trate de mantener un ambiente de meditación a lo largo de este encuentro.
3. Lea el pasaje bíblico varias veces. Léalo, por lo menos, en dos versiones distintas de la Biblia, y tome nota de las diferencias significativas que hay entre ellas.
4. Lea el texto en voz alta, con buena entonación y con sentimiento. Para esto use la versión de la Biblia que sea más conocida para usted.
5. Conteste lo siguiente:
a) ¿Qué preguntas surgen de su lectura del texto?
b) ¿Qué sentimientos experimenta al leer el texto?
c) ¿Qué recuerdos le trae este texto?
d) Imagine que está en el mundo que propone el texto: ¿Qué ve? ¿Qué oye? ¿Qué huele? ¿Qué saborea? ¿Qué toca? En resumen, ¿qué siente al estar en el mundo que propone el texto?
e) ¿Qué cambios han ocurrido en su forma de entender el texto?
f) ¿Qué temas e ideas le sugiere el texto?
B. La explicación

La explicación es el momento donde el intérprete toma una cierta distancia del texto. Ésta es una distancia crítica, es decir, su propósito es dar espacio para un análisis cuidadoso del texto. La explicación es el momento donde recurrimos a fuentes secundarias —concordancias, diccionarios bíblicos, comentarios— que nos ayuden a estudiar el texto a profundidad. Si fuésemos a explicarla por medio de un diagrama, éste sería el momento donde se establece distancia (C) entre la esfera de experiencia del intérprete (B) y el texto bíblico (A) [vea el diagrama #3].

Si la explicación es el momento de estudiar el texto a profundidad, entonces debemos tomar en cuenta varios elementos:
• Desde este punto puede comenzar a utilizar fuentes secundarias. Se recomienda el uso de la concordancia, de un diccionario bíblico y de una Biblia en edición de estudio. En cuanto a comentarios se refiere, recomendamos la lectura de, por lo menos, dos comentarios sobre el pasaje bíblico que se está estudiando. De ser posible, se debe consultar un comentario crítico que trate el pasaje verso por verso en unión a un comentario hermenéutico que explore la relevancia del mensaje del texto para nuestros tiempos. Pero esto no limita a que quien estudia el texto pueda consultar más comentarios. Sin embargo, afirmamos que dos es un número razonable dada la presión de tiempo que pesa sobre los predicadores en nuestras iglesias.

• Un paso importante en el estudio del texto es determinar el contexto social e histórico del pasaje. Esta información puede encontrarse en libros dedicados especialmente al estudio del contexto histórico y cultural de los textos bíblicos. Recomendamos que por lo menos adquiera uno de estos libros y lo lea, haciendo las anotaciones pertinentes. Así, al buscar por el contexto del pasaje bíblico sólo tendrá que repasar el material. Otras fuentes donde se puede encontrar información sobre el contexto histórico son los diccionarios bíblicos, la introducción a los comentarios y los libros introductorios tanto al Antiguo como al Nuevo Testamento. De hecho, aquellas personas que han tomado cursos introductorios a la Biblia, ya sea en institutos o en seminarios, no deben tener mayores problemas para contestar estas preguntas.

• El estudio del género, la forma y la estructura literaria de los pasajes bíblicos puede ser uno de los mejores aliados del predicador. Podemos dirigir nuestro estudio sobre esto por medio de las siguientes preguntas guías:

– ¿Cuál era la condición social de la comunidad a la que se dirigió originalmente? En lo posible, identifique el contexto histórico, social, político y religioso del texto.

– ¿Cuál es el género literario del texto? ¿Cuál es su forma? ¿Qué elementos la caracterizan? ¿Qué función tiene esta forma?

– ¿Cuáles son las características literarias de este texto?

– ¿Qué palabras difíciles de entender contiene el texto? ¿Cuáles son los conceptos teológicos claves del pasaje? ¿Qué significado tienen?

– ¿Qué respuestas ha encontrado a sus preguntas sobre el texto? ¿Qué elementos importantes para la interpretación del pasaje ha encontrado usted en su investigación?

– En pocas palabras, ¿qué dice el pasaje bíblico? Resuma el mensaje central del pasaje. Exprese sencilla y claramente los temas e ideas de este texto para su audiencia original.

C. La interpretación

La «interpretación» es el momento donde logramos un entendimiento más profundo del texto. En cierto sentido, es el momento donde cosechamos el fruto de nuestro análisis y estudio. La interpretación es una re-lectura informada del texto. Es una segunda lectura que toma como punto de partida las conclusiones obtenidas mediante el estudio cuidadoso del texto que llevamos a cabo en la explicación. Por lo tanto, esta segunda lectura debe ser más completa, más profunda, más aguda, más crítica y más válida que la primera. 

Si fuésemos a explicarla por medio de un diagrama, la interpretación sería el espacio donde “B”, la esfera de experiencia del intérprete, se re-encuentra con “A”, el texto bíblico, y así se obtiene una comprensión, “C”, más profunda del texto [vea el diagrama #4].

En este punto debemos señalar que hay una diferencia entre la explicación y la comprensión. El hecho de que uno pueda explicar un texto no quiere decir que lo comprenda. La explicación es posible cuando uno maneja en detalle el contexto, la forma y el contenido del texto. Sin embargo, la comprensión no ocurre hasta que escuchamos el reclamo del texto para nosotros hoy. Esto se verá más claro en el siguiente ejemplo.

Diagrama 4

Es posible estudiar críticamente la parábola del buen samaritano (Lc. 10:29-37), viendo lo peligroso del camino a Jericó, las razones cúlticas y rituales por las cuales el sacerdote y el levita no se detuvieron a darle la mano al herido, y la enemistad que separaba a los judíos de los samaritanos. Conociendo estos elementos, podremos explicar el contenido de la parábola. Ahora bien, sólo comprenderemos el texto cuando escuchemos su reclamo teológico para nosotros hoy. Sólo comprenderemos el texto cuando la frase «Ve y haz tú lo mismo» (v. 37) nos llame a ser misericordiosos con aquellas personas necesitadas en nuestro entorno.

La interpretación es el momento crucial del estudio bíblico. Al momento de interpretar el texto debemos considerar los siguientes elementos:

• Existe toda una serie de paralelos entre el mundo que describe la Biblia y el nuestro. En la vida hay constantes que se repiten, elementos que todo ser humano debe enfrentar. Tomemos, por ejemplo, el tema del poder. La Biblia, en especial el Antiguo Testamento, discute a fondo el problema del poder. En varias narrativas bíblicas la discusión gira en torno a la pregunta: ¿Quién tiene el poder último en el mundo? La respuesta bíblica es que Dios está en control, que Dios tiene el poder. Quizás hoy nadie se pregunte si Moloc, Marduk, Baal o alguna otra divinidad antigua tiene el poder último sobre la humanidad; sin embargo, el problema del poder sigue vigente. Hoy podemos ¡y debemos! preguntar quién tiene el poder último sobre el destino humano. Debemos preguntar cuáles son las nuevas deidades que reclaman nuestra adoración y nuestra lealtad. Debemos preguntar cuáles son las nuevas potencias que matan y destruyen al pobre, que matan y destruyen al pueblo de Dios. Al hacer esto estaremos usando la hermenéutica de la analogía, es decir, estaremos haciendo una comparación entre nuestro mundo y el mundo bíblico para determinar la relevancia del mensaje del texto para nosotros hoy.

• La forma del texto nos puede dar pautas o hacer sugerencias a seguir a la hora de diseñar la forma de nuestro sermón.

• Del mismo modo, la función o el propósito del pasaje bíblico nos puede sugerir un propósito específico para nuestro sermón.

• El mensaje del texto se vuelve más claro cuando nos identificamos con alguno de los personajes del texto. Si el texto es narrativo, podemos identificarnos con alguno de los personajes; si es discursivo, con la persona que escribe o que recibe la enseñanza. En todo este proceso la regla a seguir es muy sencilla: Nunca debemos identificarnos con el héroe de la historia. La razón para esto es sencilla. Si nos identificamos con el héroe —es decir, con Dios, Cristo, o con el creyente fiel— corremos el peligro de caer en el triunfalismo. Si nos identificamos con los demás personajes, el mensaje del texto será más contundente. Por ejemplo, si predicamos la parábola del buen samaritano diciendo que la iglesia representa al samaritano misericordioso, no hay desafío para la audiencia. Si, por el contrario, nos identificamos con los religiosos que siguieron de largo, el llamado de la parábola a ser compasivos y misericordiosos será evidente.

• En todo este proceso no debemos perder de vista el propósito de la predicación cristiana: llamarnos a vivir en comunión con Dios y, por lo tanto, en comunión con los demás. Así pues, a la hora de interpretar el texto debemos considerar sus implicaciones prácticas. Es decir, debemos preguntar qué nos llama a hacer el texto aquí y ahora, tanto al nivel personal como al nivel de iglesia. Así nuestra predicación será pastoral y contextual.

• Finalmente, alcanzaremos la meta de todos nuestros esfuerzos: identificar el mensaje del texto para nosotros hoy. En este punto debemos recordar que la palabra evangelio viene del vocablo griego que significa «buena noticia». Por lo tanto, la proclamación del evangelio debe transmitir siempre una buena noticia al oyente. La predicación cristiana es verdadera si transmite la buena noticia de que por medio de la obra redentora de Jesucristo podemos pasar de la esclavitud a las fuerzas de la muerte a la libertad para servirle al Dios de la Vida. La predicación que carece de buena noticia, por definición, no es predicación cristiana.

Podemos usar las siguientes preguntas guías para interpretar el texto:

• ¿Cómo se compara el contexto socio-histórico del texto con el nuestro? ¿Qué elementos de conflicto presenta el pasaje? ¿Qué elementos salvíficos? ¿Hay en nuestro mundo elementos parecidos a éstos? Haga una comparación entre nuestro mundo contemporáneo y el mundo que propone el texto.

• ¿La forma o la estructura literaria del texto le sugiere una estructura específica para su sermón?

• ¿La función del texto le sugiere un propósito específico para su sermón?

• ¿Con qué personaje debemos identificarnos para escuchar el mensaje de este texto en forma apropiada?

• ¿Qué pautas le sugiere este texto para la práctica de la fe y para la acción pastoral?

• ¿Cuál es el mensaje del texto para nosotros hoy? ¿Cuáles son las «buenas nuevas» del pasaje?

II. Estudio de Juan 21:15-18

A manera de ejemplo, a continuación presentaré algunas notas exegéticas sobre Jn. 21:15-18, siguiendo el método de los tres pasos. Estas notas me guiaron a producir el sermón de práctica Itinerario, uno de los apéndices de este libro.
A. El punto de contacto

Comienzo leyendo el texto en varias versiones. Éstas son: la Reina-Valera, Revisión 1960 (VRV); La Biblia de Jerusalén (BJ), edición de estudio; Dios Habla Hoy, la Biblia Versión Popular (VP), edición de estudio y la New Revised Standard Version (NRSV). La discrepancia principal en la traducción del texto salta a la vista. Mientras la VRV usa el verbo amar en todas las preguntas y respuestas, las traducciones modernas en español alternan entre los verbos amar y querer. 

La NRSV  usa sólo el verbo to love, ya que el inglés no tiene otros verbos para referirse a este sentimiento. Otro punto de controversia es el nombre de Simón. ¿Es «hijo de Jonás» o de Juan? Una vez más, las traducciones modernas se apartan de la VRV, la única que llama al discípulo pescador «hijo de Jonás». Después de un rato de lectura y meditación, procedo a contestar las preguntas.

• ¿Qué preguntas surgen de mi lectura del texto?
El texto sugiere varias preguntas. ¿Cuál es la traducción correcta del texto? ¿Por qué Jesús cuestiona tan insistentemente a Pedro? ¿Por qué repite la pregunta tres veces? ¿Por qué Pedro se entristece la tercera vez que se le hace la pregunta?

• ¿Qué sentimientos experimento al leer el texto?
El texto provoca sentimientos agridulces. Por un lado, me regocija el encuentro con el Señor resucitado. Por otro, me entristece y me avergüenza el encuentro con el Señor al cual tanto Pedro como yo hemos negado.

• ¿Qué recuerdos me trae a la memoria este texto?
Recuerdo los viajes por las Islas Vírgenes en el bote de mi padre, navegando desde la isla de Santa Cruz al Islote del Bucanero. Recuerdo el paseo en bote por el mar de Galilea. Recuerdo los momentos en que he tenido que volver al Señor, humillado después de haber cometido una falta contra mi prójimo y contra Dios.

• Imagino que estoy en el mundo que propone el texto: ¿Qué veo? ¿Qué oigo? ¿Qué huelo? ¿Qué saboreo? ¿Qué toco? En resumen, ¿qué siento al estar en el mundo que propone el texto?

Veo las riberas del mar de Galilea, cerca de Capernaúm. Los montes galileos están a la izquierda. A la derecha, veo a la distancia las alturas del Golán. Recuerdo el amanecer en la ciudad de Tiberiades y veo el sol comenzando a radiar, brillando contra el mar en calma. Escucho el ruido del agua contra el malecón; mi mano firme en un costado del bote. Recuerdo el sabor del pescado. A la distancia, me parece ver la silueta majestuosa de Jesús.

• ¿Que cambios han ocurrido en mi forma de entender el texto?
De alguna manera el texto ha cobrado vida. Ya no es la historia de Pedro; ahora es mi historia.

• ¿Qué temas e ideas me sugiere el texto?
Pienso en la importancia del discipulado que nos lleva a seguir a Jesús. Es posible perder de vista al maestro, volviendo a las viejas redes del pasado. El texto me lleva a pensar en la importancia de aceptar el perdón de Dios. Me lleva a pensar en el gran amor de Dios.

De alguna manera, este texto se ha convertido para mí en un resumen del mensaje del evangelio. Jesús acepta y restaura al discípulo caído. Aun cuando Pedro lo había negado, Jesús va a su encuentro y lo comisiona.

B. Explicación

• En lo posible, identifico el contexto histórico, social, político y religioso del texto. ¿Cuál era la condición social de la comunidad a la que se dirigió originalmente?
El Evangelio de Juan presupone la separación entre la comunidad cristiana primitiva y el judaísmo fariseo (Juan 9:34b-38). Por lo tanto, debió ser escrito entre los años 90 y 100. El Evangelio evoca un contexto palestino donde encontramos puntos de contacto con varias sectas judías. 

Primero, los discípulos iniciales de Jesús vienen del movimiento bautista (Juan 1:35-37). Segundo, Juan le da gran importancia a los habitantes de Samaria (Juan 4:4, 20-24). Tercero, presenta ideas comunes a lo que describen los documentos de la comunidad de Qumrán (como el dualismo entre la luz y las tinieblas, vea Juan 3:19-21 y 8:12).

• ¿Cuál es el género literario del texto? ¿Cuál es su forma? ¿Qué elementos la caracterizan? ¿Qué función tiene esta forma?
Este pasaje se aparta de la forma tradicional de las manifestaciones de Jesús después de su resurrección. Más que un relato sobre la resurrección, sigue la forma de un contrato legal donde se repite tres veces, ante testigos, las condiciones del contrato. La función del texto es, pues, afirmar el llamamiento o la vocación de Pedro.

• ¿Cuáles son las características literarias de este texto?
Como indiqué anteriormente, el texto se caracteriza por la triple apelación de Jesús a Pedro.

• ¿Qué palabras difíciles de entender contiene el texto? ¿Cuáles son los conceptos teológicos claves del pasaje? ¿Qué significado tienen?
El concepto teológico central de este pasaje bíblico es el amor. La razón para la discrepancia en la traducción es que Jesús usa el verbo agapáo en las primeras dos preguntas. En las demás ocasiones, tanto Jesús como Pedro emplean el verbo filéo. Hay un gran debate entre los expertos sobre los matices de estas formas del amor. Me inclino a pensar que la primera forma verbal se refiere a un amor más profundo y comprometido que la segunda. En este sentido, las traducciones modernas al español reflejan el verdadero sentido del texto. En las primeras preguntas, Jesús exige un nivel de compromiso que Pedro no puede alcanzar. En la tercera, Jesús llega al nivel de Pedro, le acepta y le comisiona.

• ¿Qué respuestas he encontrado a mis preguntas sobre el texto? ¿Qué elementos importantes para la interpretación del pasaje he encontrado en mi investigación?
La traducción correcta es la moderna. Creo que Pedro se conmueve al comprender el amor de Jesús, un amor que le acepta y le restaura al lugar que había perdido en la comunidad cristiana primitiva.

• Resumo el mensaje central del pasaje. Expreso sencilla y claramente los temas e ideas de este texto para su audiencia original.

Para la audiencia del Evangelio de Juan, este texto legitimó el ministerio de Pedro. El mismo aseguraba que, a pesar de haber negado a Jesús, Pedro continuaba siendo uno de los líderes importantes de la iglesia primitiva. Para nosotros, este texto es un resumen claro del mensaje del evangelio: Dios acepta, restaura y comisiona a los creyentes.

C. Interpretación

• Hago una comparación entre nuestro mundo contemporáneo y el mundo que propone el texto. ¿Cómo compara el contexto socio-histórico del texto con el nuestro? ¿Qué elementos de conflicto presenta el pasaje? ¿Qué elementos salvíficos? ¿Hay en nuestro mundo elementos parecidos a éstos?

A la base de este texto hay un «sub-texto». Es decir, hay otro relato al cual se hace referencia: la negación de Pedro (Juan 18:15-18 y 25-27). Creo que Juan 21:15-18 responde a las dudas que surgieron en la comunidad cristiana primitiva sobre el liderazgo de Pedro.

Podemos comparar la falta de compromiso de Pedro con la nuestra. En algún momento, todos «negamos» a Jesús y en todas las congregaciones podemos encontrar luchas de poder. Creo que el texto nos exhorta tanto al compromiso personal como a la misericordia con las personas que puedan encontrar tropiezos en su desarrollo cristiano.

• ¿Acaso la forma o la estructura literaria del texto me sugiere una estructura específica para mi sermón?
Voy a presentar el sermón en forma narrativa.

• ¿Acaso la función del texto me sugiere un propósito específico para mi sermón?
Voy a usar el texto para llamar al discipulado cristiano.

• Para escuchar el mensaje de este texto en forma apropiada, ¿con qué personaje debemos identificarnos?
Debemos identificarnos con Pedro, el discípulo caído y restaurado.

• ¿Qué pautas me sugiere este texto para la práctica de la fe y para la acción pastoral?
El texto nos llama a un compromiso serio con Cristo, a la misma vez que nos exhorta a mostrar misericordia, aceptación y comprensión.

• ¿Cuál es el mensaje del texto para nosotros hoy? ¿Cuáles son las «buenas nuevas» del pasaje?
La experiencia de conocer a Cristo pierde su sentido si no conduce a la práctica del discipulado cristiano.

III. Conclusión

El método de los tres pasos intenta ayudar a estudiar el texto bíblico de manera eficiente y efectiva a quienes predican. Le exhortamos a que, después de usarlo por lo menos un par de veces, lo modifique hasta que pueda desarrollar su propio método de estudio e interpretación de la Biblia.

Tareas sugeridas

1. Tenga un tiempo de reflexión y de oración, usando las preguntas sugeridas en el Punto de contacto.

2. Estudie un texto bíblico usando el método de Los tres pasos.
Lecturas sugeridas

Bek de Goede, Jan. «La Biblia y la predicación» en Comunicación y proclamación del evangelio para el siglo XXI, editado por Marjorie T. y James W. Carty. México: Casa Unida de Publicaciones, 1984, pp. 13-23.

Cortés Fuentes, David. «Exégesis bíblica y predicación» en Púlpito cristiano y justicia social, editado por Daniel Rodríguez Díaz y Rodolfo Espinosa. México: Editorial El Faro, 1994, pp. 101-112.

Jiménez, Pablo A., editor. Lumbrera a nuestro camino. Miami: Editorial Caribe, 1994.

Jiménez, Pablo A. «Cómo preparar sermones bíblicos» en El Evangelio 53:4 (Octubre-Diciembre 1998): pp. 28-29.

——. «Cómo preparar un sermón con la Biblia de Estudio» en La Biblia en las Américas 49:#214 (#5, 1994): pp. 11-12.

——. «¿Qué es la predicación bíblica?» en El Educador Cristiano 1, Tercera época (Febrero 1990): 4-7.
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martes, 30 de junio de 2015

Él nos libró del dominio de la oscuridad y nos trasladó al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención, el perdón de pecados

Por eso, el que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6



 
 
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Cómo bosquejar el sermón temático-doctrinal


Cómo bosquejar el sermón textual

Cómo bosquejar el Sermón Textual


Tres técnicas útiles para desarrollar bosquejos homiléticos



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Introducción

El sermón textual es aquel que presenta un aspecto del mensaje de un texto bíblico corto, en fidelidad a su contenido, forma y función. Decimos “corto”, porque la atención al detalle que requiere este tipo de sermón nos obliga a examinar sólo uno o dos versículos de las Sagradas Escrituras a la vez.
Aunque no todos los textos bíblicos se prestan para el sermón textual, hay infinidad de versículos que bien pueden servir como punto de partida para nuestras reflexiones. Entre los muchos textos “clásicos” que podemos señalar, destacamos pasajes bíblicos tales como Mateo 28.18 al 20, Juan 3.16 y Romanos 5.1.

Tres modelos para bosquejar el sermón textual 

En esta ocasión, sugiero tres modelos básicos para bosquejar sermones textuales. En particular, les presento tres técnicas homiléticas:Bosquejos basados en palabras clave

  • Bosquejos basados en las frases principales del texto
  • Bosquejos basados en las ideas fundamentales del pasaje bíblico
Tomemos Romanos 5.1 para ilustrar estas técnicas. Ese hermoso pasaje bíblico dice de la siguiente manera, en la versión Reina-Valera Revisión del 1960: “Justificados, pues, por la fe tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.”

1. Bosquejos basados en palabras clave

Si analizamos el texto, podemos identificar varios conceptos importantes, tales como:

  • Justificar
  • Fe
  • Paz
  • Dios
  • Jesucristo.
Es necesario, pues, buscar en un buen diccionario bíblico el significado de estas palabras tan importantes. Si posible, se debe identificar el vocablo hebreo o griego que está en la base de nuestra traducción. En este caso, como el Nuevo Testamento fue escrito en griego, encontramos que el verbo “justificar” es la traducción de “diakaióo”; “fe” la de “pístis”; y “paz” la de “eiréne”.
Claro está, las divisiones centrales o “puntos” del pasaje bíblico deben enunciarse en oraciones completas, no en palabras sueltas o frases carentes de verbos. Por lo tanto, es importante desarrollar puntos que, basados en estos conceptos, transmitan ideas completas. Por ejemplo:

    1. Justificar significa ser declarado por Dios como una persona “justa”, es decir, que está en una relación correcta tanto con el Señor como con la comunidad.
    2. Fe significa desarrollar una relación de fidelidad a y de confianza en Dios.
    3. Paz, en el sentido griego de la palabra “eiréne”, marca el fin de un conflicto y el comienzo de una relación sana con el Señor.

Bosquejos basados en las frases principales del texto

Un análisis gramatical nos lleva a considerar los verbos principales, los secundarios y los implícitos, así como las cláusulas independientes y dependientes del texto. Esto nos permite identificar las frases clave del texto. Por ejemplo:

  • Justificados, pues, por la fe
  • Tenemos paz para con Dios
  • Por medio de nuestro Cristo Jesús
Aunque esto facilita la tarea de bosquejar el pasaje, es necesario recordar que los puntos o divisiones principales del sermón deben ser enunciados en oraciones completas, con sujeto, verbo y predicado. Por ejemplo:

    1. Dios justifica a la humanidad por medio de la fe.
    2. La gracia de Dios elimina los conflictos que separan a la humanidad de su Señor.
    3. La obra de Cristo ha hecho posible la justificación de la humanidad.

Bosquejos basados en las ideas fundamentales del pasaje

La tercera alternativa presupone el análisis semántico—es decir, de las palabras y conceptos del texto—y el gramatical. Aunque diferentes personas tendrán diversas maneras de interpretar las ideas teológicas centrales del texto, a continuación presento un posible bosquejo basado en Romanos 5.1:

    1. La justificación por la fe es el medio de la salvación.
    2. La paz con Dios es uno de los beneficios principales de la salvación.
    3. Cristo Jesús es el agente de la salvación.

Conclusión

Como podemos ver, estas técnicas pueden ser muy útiles a la hora de bosquejar un sermón textual. Esperamos, pues, que estas sugerencias sean de bendición para usted y para su ministerio homilético.
 Los sermones textuales se encuentran contenidos entre los expositivos.

Apéndice

A manera de apéndice, comparto unas notas homiléticas textuales basadas en Hebreos 11.1, esperando que las mismas también puedan motivarles a redactar bosquejos para sermones textuales:

La fe

Texto: Hebreos 11:1
Tema: La fe es fidelidad, confianza y compromiso con Dios.
Área: Formación espiritual
Propósito: Exhortar a la iglesia a ampliar su definición del concepto “fe”.
Diseño: Textual-Expositivo
Introducción: La Iglesia usa la palabra “fe” en dos maneras distintas, pero complementarias. Por un lado, la “fe” es el acto de creer en Dios. Por otro lado, se refiere al contenido de nuestra religión.
Puntos a desarrollar:

  1. La fe es “confianza”. Tener fe significa confiar en Dios. La fe implica una relación de amor a y de confianza en Dios, quien nos ama. Esa confianza nos permite conocer el carácter y la naturaleza de Dios. Más importante aún, la fe nos permite amar a Dios y vivir en el mundo que ha creado para nosotros.
  2. Hebreos 11:1 define la fe como esperanza y como convicción. Tener fe implica estar convencido o convencida de la existencia y la veracidad de las realidades espirituales. La fe es fidelidad, confianza y compromiso con Dios.
  3. Tener fe en Dios implica serle fiel a Dios. Quien deposita su confianza en Dios, descubre que Dios es fiel a quienes le aman. Debemos, pues, responder con fidelidad a la fidelidad divina.
Conclusión: En resumen, la fe es confianza y fidelidad. Empero, la fe también es compromiso. Tener fe, implica estar comprometido con una causa. Quien tiene fe en algo, invierte su vida en eso. Por eso, quien tiene fe en el Señor, invierte su vida en el servicio a Dios, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.






Cómo usar la Versión Popular (Edición de estudio) en la predicación
Teoria Homiletica
Como usar la

Versión Popular (Edición de Estudio)

en la predicación


Bosquejo:

I. Introducción
II. Análisis del texto
III. Del texto al sermón
IV. Conclusión



I. Introducción

¿Qué recursos se necesitan para preparar un sermón? Además de la Biblia, se necesita tener una pequeña biblioteca que incluya diccionarios, concordancias y comentarios bíblicos. Ahora bien, las Sociedades Bíblicas Unidas han publicado una nueva Biblia de estudio que provee mucha de la información que antes se encontraba sólo en los recursos arriba mencionados. A continuación demostraremos cómo podemos los recursos de la Versión Popular Edición de Estudio (VPEE) para preparar un sermón sobre Hechos 27, el capítulo que narra el viaje del Apóstol Pablo a Roma.

II. Análisis del texto

La VPEE provee una breve introducción a cada libro de las Sagradas Escrituras. Esta discute asuntos pertinentes para el estudio del texto. En nuestro caso, la introducción al libro de los Hechos de los Apóstoles indica el lugar que ocupa este escrito en el Nuevo Testamento, explica su título, presenta tanto su tema central como sus temas secundarios y discute su estructura literaria.

La lectura de la introducción ayuda a ubicar el pasaje y provee una de las ideas fundamentales del sermón. Por un lado, Hechos --que es la continuación del Evangelio según San Lucas-- narra como el Evangelio llegó desde Jerusalén hasta Roma, la capital del imperio. Así que la narración del viaje de Pablo es muy importante, pues introduce la culminación del escrito. Por otro lado, la introducción identifica como uno de los temas secundarios el que ningún poder humano puede impedir el avance del Evangelio. Esta será una de las ideas centrales de nuestro sermón.

Leída la introducción, pasamos a leer Hechos 27 en la Reina Valera Revisada (RVR) y en la VPEE. Al compararlas, encontramos que la traducción de la RVR es un tanto difícil de entender. Por ejemplo, usa palabras arcaicas tales como "sotavento" (v. 7) y "esquife" (v. 16); frases oscuras como que la navegación era peligrosa "por haber pasado el ayuno" (v. 9); y medidas antiguas como "quince brazas" (v. 28).

La traducción de la VPEE es mucho más clara. En vez de "sotavento" dice que navegaban "con el viento en contra" (v. 7); en lugar de "esquife", usa "bote salvavidas" (v. 16). Tanto la traducción como la nota al calce aclaran el v. 9. La navegación se hacía peligrosa porque se acercaba el invierno, pues había pasado el Día del perdón en el cual los judíos ayunaban. Ese día se celebra a fines de septiembre o a principios de octubre. Además, la VREE indica las medidas en metros.

De hecho, el texto bíblico va de la mano con las notas al pie de página. En este caso, la VPEE provee 19 notas que explican diversos aspectos del capítulo 27. Algunas explican la ubicación geográfica de los lugares mencionados en el texto, tales como Adramito y La Sirte. Otras notas proveen referencias que permiten aprender más de ciertos personajes --como Aristarco (v. 2)-- y de las costumbres de la época (v. 42). Las demás explican detalles que de otra manera habría que aclarar leyendo un atlas, un diccionario, o un comentario bíblico.

La lectura del texto bíblico y de las notas al pie de página nos dan suficiente información para hacer un breve bosquejo de Hechos 27. En este bosquejo preliminar, identificaremos los distintos episodios del texto, el itinerario del viaje, los versículos más importantes, el punto culminante y el desenlace de la historia.

Podemos confirmar si hemos comprendido bien el pasaje consultando los excelentes mapas que distinguen a la VPEE. A diferencia de otras Biblias que sólo tienen mapas en el apéndice final, la VPEE también coloca mapas cerca de los pasajes a los cuales hacen referencia. En este caso, encontramos un mapa que ilustra el viaje a Roma justo al lado del capítulo 27. Así, la trayectoria de la travesía queda clara.

Es posible redondear nuestro sermón leyendo las referencias a la vida de Pablo en el índice temático que se encuentra al final de la VPEE. Estas referencias podrán ser utilizadas a través del sermón para explicar el lugar que ocupa este episodio en la historia del Apóstol. En los apéndices de la VPEE también encontraremos otras ayudas tales como mapas, tablas cronológicas y tablas de pesos y medidas.

III. Del texto al sermón

La interesante historia de Hechos 27 nos invita a diseñar un sermón narrativo que podemos titular En medio de la tempestad. El tema será que Dios está con nosotros aun en medio de la tormenta, ya que nada puede detener el avance del Evangelio. Comenzaremos el sermón indicando que Pablo sufría siendo inocente. En esta sección haremos alusión a episodios pertinentes de la vida del Apóstol y explicaremos por qué era llevado a Roma en cadenas (vv. 1-8). En el desarrollo del sermón narraremos la historia, explicando que el naufragio ocurrió porque los militares romanos insistieron en navegar aún cuando Pablo les había advertido que Dios había revelado que todos morirían (vv. 9-12).

Hoy día encontramos situaciones similares; hay personas que sufren siendo inocentes, otras provocan su propio sufrimiento. El relato continúa explicando cómo el barco quedó al garete (vv. 13-20). Ahora bien, cuando la tripulación había perdido toda esperanza, Dios mostró su misericordia revelando por medio de Pablo que a pesar del naufragio, ni una sola persona perdería la vida (vv. 21-26). El mensaje no puede ser más claro, Dios viene en nuestro auxilio aún cuando estamos perdidos en medio de la tempestad (véase los vv. 27-44).

IV. Conclusión

Sin lugar a dudas, uso de la VPEE ha facilitado la comprensión del texto y ha acortado el proceso de preparación sermonaria. Claro está, sería prudente culminar nuestro estudio consultando un buen comentario bíblico sobre el libro de Hechos, tal como el que escribiera Justo L. González. No obstante, quien emplee regularmente la Versión Popular Edición de Estudio encontrará en ella un magnífico recurso para la predicación.



Sílabo modelo y recursos para un curso “online” de homilética básica 
:: Teoria Homiletica
Curso básico de homilética
Curso en línea & Sílabo modelo

Principios de predicación
Silabo
Descripción del curso
El curso estudia cómo crear, diseñar y predicar sermones, usando lecturas, conferencias ejercicios prácticos, trabajo en grupos pequeños y grabaciones de sermones de práctica en vídeo.
Objetivos operacionales
La meta del curso es capacitar al estudiantado para que pueda alcanzar su pleno potencial en el púlpito cristiano. Al final del curso, el estudiantado podrá:
1. Explicar el lugar central de la predicación en la vida de la Iglesia.
2. Interpretar textos bíblicos para la predicación.
3. Diseñar sermones expositivos, narrativos y temáticos.
4. Predicar de manera efectiva.
Materiales Requeridos:
Lecturas suplementarias
Escoja uno de los libros enumerados a continuación para su informe de libro:
Arrastía, Cecilio. Teoría y práctica de la predicación. Miami: Caribe, 1978.
Broadus, John. Tratado sobre la predicación. El Paso: Casa Bautista de Publicaciones, 1925.
Costas, Orlando E. Comunicación por medio de la predicación. San José: Caribe, 1973.
Crane, James D. El sermón eficaz. El Paso: Casa Bautista de Publicaciones, 1961.
_____. Manual para predicadores laicos. El Paso: Casa Bautista de Publicaciones, 1966.
Ham-Stanard, Carlos Emilio. El trípode homilético: Una guía para predicadores laicos. Quito: CLAI, 2000.
Jiménez, Pablo A. La predicación en el siglo XXI: Actualidad, contexto, cultura, justicia social, liberación, postmodernidad. Barcelona: Editorial CLIE, 2010.
Jiménez, Pablo A. & Justo L. González. Manual de homilética hispana: Teoría y práctica desde la diáspora. Barcelona: Editorial CLIE, 2006.
Mergal, Angel M. El arte cristiano de la predicación. El Paso, CUPSA, 1951.
Mottesi, Osvaldo. Predicación y misión: Una perspectiva pastoral. Miami: Logoi, 1989.
Rodríguez, Rafael A. Homilética simplificada. San Juan: Katallage, 1983.
Rostagno, Bruno. La fe nace por el oír: Guía para la predicación. Buenos Aires: La Aurora, 1989.
Vila, Samuel. Homilética. Terrassa (Barcelona): CLIE, 1978
Zenses, Christophe. Siervo de la palabra: Manual de predicación. Manual EDUCAB. Buenos Aires: ISEDET, 1997.
Requisitos
Para aprobar el curso será necesario cumplir con los siguientes requisitos:
1. Asistir a clases regularmente.
2. Tomar un examen preliminar sobre los primeros cuatro capítulos de Principios de Predicación.
3. Escribir un informe sobre uno de los libros enumerados en la lista de Lecturas suplementarias. El informe debe ser escrito a máquina, de entre cuatro a cinco páginas de largo. Debe entregar su informe al comienzo de la sexta sesión de estudios. El informe debe contestar las siguientes preguntas:
  • ¿Cuál es la idea central del libro?
  • ¿Cuál es el propósito del libro?
  • ¿Qué metodologías propone, avanza o explica?
  • ¿Cómo define el concepto “predicación”?
  • ¿Cómo explica la tarea de la persona que predica?
  • ¿Qué pensadores han influenciado a la persona que escribió el libro?
  • ¿Cuáles son sus perspectivas teológicas básicas? ¿Cuáles son sus tendencias ideológicas, políticas y pastorales? ¿Cuál es su perspectiva denominacional?
  • ¿Cuál es su opinión sobre el libro? ¿Qué aprendió? ¿Cómo influirá en su estilo de predicar?
4. Escribir un bosquejo sermonario y predicar un sermón de práctica en clase (véase calendario).
5. Tomar un examen final.
6. Evaluar el curso.
Metodología
El curso se desarrollará de la siguiente manera:
1. Durante las sesiones plenarias el profesor ofrecerá conferencias y ejercicios en grupo sobre el tema del día.
2. Las conferencias serán asistidas por presentaciones computarizadas y por hojas sueltas. Además, usaremos vídeos educativos en clase.
3. Cada persona participará en un grupo pequeño durante la duración de la clase. Los ejercicios en los grupos pequeños estarán orientados a cada estudiante en forma individual.
4. Todos los sermones de práctica serán grabados en vídeo. Cada estudiante tendrá la oportunidad de ver su vídeo en compañía del profesor, si así lo desea.
Criterios de evaluación
Aparte de los cinco trabajos escritos, los y las estudiantes recibirán una nota por asistencia y participación en clase. Dado que el valor de cada tarea será 100 puntos, será posible acumular hasta 600 puntos en clase. Las notas de otorgarán de acuerdo a la siguiente tabla:
Nota
Porcentaje
Puntos Requeridos
A
100-90 %
400-360
B
89-80 %
359-320
C
79-70 %
319-280
D
69-60 %
279-240
F
59-0 %
239-0
Calendario
Primera sesión
1. Apertura
2. Lectura y discusión del sílabo
3. Conferencia: Vocabulario básico (Video)
4. Grupos pequeños: Examen diagnóstico (Documento en Adobe PDF)
5. Lecturas requeridas:
a. El vocabulario básico de la predicación (Texto)
Segunda sesión


2. Grupos pequeños: Punto de contacto (Documento en Adobe PDF)
3. Lecturas requeridas: Principios, capítulo 1, 2 y 3
Tercera sesión
2. Grupos pequeños: Los Tres Pasos (Documento en Adobe PDF)
3. Lecturas requeridas:
a. Principios, capítulo 4
b. Artículo: Los Tres Pasos (Texto)
c. Artículo: ¿Qué es la predicación bíblica? verlo más abajo (Texto)
Cuarta sesión

1. Conferencia: Los rudimentos de la predicación (5 Vídeos)
:: Teoría Homilética

Los rudimentos del sermón
Introducción


Título

Texto

Tema


Área
Propósito
2. Grupos pequeños: Ejercicios sobre la presentación del sermón
3. Lecturas requeridas: Principios, capítulo 5

Quinta sesión

1. Lectura dirigida: Diseño básico del sermón
2. Conferencia: Cómo bosquejar un sermón (Vídeo)

3. Conferencia: La entrega del sermón (Vídeo)
3. Grupos pequeños: Lectura interpretativa de un manuscrito
4. Lecturas requeridas:
a. Principios, capítulos 6 y 11
b. Tercera parte del Vídeo “Principios de predicación”

Sexta sesión: ** Entrega del informe de libro**

1. Conferencia: El sermón expositivo (Vídeo)

2. Grupos pequeños: Sermones de práctica

3. Lecturas requeridas: Principios, capítulo 7 y apéndice A

Séptima sesión

1. Conferencia: El sermón narrativo (Vídeo)

2. Grupos pequeños: Sermones de práctica
3. Lecturas requeridas: Principios, capítulo 8 y apéndice B

Octava sesión

1. Conferencia: El sermón doctrinal (Vídeo)

2. Grupos pequeños: Sermones de práctica
3. Lecturas requeridas: Principios, capítulo 9 y apéndice C

Novena sesión

1. Conferencia: El sermón de ocasiones especiales (Vídeo)

2. Grupos pequeños: Sermones de práctica
3. Lecturas requeridas: Principios, capítulo 10 y apéndice D

Décima sesión: Sermones de práctica

Undécima sesión: Sermones de práctica

Doceava sesión

1. Auto-evaluación

2. Evaluación del curso



Dónde nace un sermón (en formato PDF)

El sermón de ocasión (en formato PDF) 

El sermón narrativo (en formato PDF)


Los tres pasos
Bosquejo:




1. Introducción

En los últimos años nuestra América Latina se ha visto invadida por programas religiosos en la radio y en la televisión. La religión electrónica se ha vuelto parte integral de la experiencia cristiana evangélica latinoamericana.

Sin embargo, el fenómeno de la Iglesia electrónica sólo está comenzando a estudiarse en nuestro medio. Sólo recientemente se ha empezado a caminar en la investigación del tema. Uno de los primeros pasos en esta investigación lo constituye el libro La Iglesia electrónica y su impacto en América Latina de Hugo Assmann .

Las reflexiones que presentamos a continuación nacieron con motivo de la presentación del libro de Hugo Assmann en el Seminario Bíblico Latinoamericano. Las mismas se dividen en dos partes. En la primera presentamos una breve reseña crítica del libro. En la segunda, presentamos algunas ideas germinales sobre la relación entre la religión electrónica y la predicación protestante. En todo esto, nuestro esfuerzo no es otro que el de aportar algunos elementos para el avance de la discusión del tema.

2. La Iglesia electrónica: una reseña critica

Nuestros comentarios sobre el libro se estructurarán a base de una serie de preguntas guías que, regularmente, usamos en nuestras clases en el Seminario. Las mismas exploran la tesis y el objetivo del material; la metodología empleada por el autor; sus presuposiciones teológicas, filosóficas y hermenéuticas; su reacción a posturas diferentes; los logros del escrito y una evaluación crítica del mismo.

2.1. Tesis y objetivo

La tesis de Hugo Assmann en su libro es la siguiente: Para comprender el fenómeno de la religión electrónica debemos ver su función socio-política e ideológica. Es necesario verla en su globalidad como parte del avance de las sectas y como parte de los diversos fetichismos que se utilizan para legitimar el sistema imperante. En fin, hay que verla como parte del proceso global que hoy vive América Latina.

El objetivo de Hugo Assmann es sacarnos de la mera denuncia personalista de los tele o radio evangelistas, llevándonos a ver el problema en su amplio marco social.

Es interesante notar que el libro no se desgasta en ataques personalistas sino que analiza el problema sin descartar la religión electrónica. Esta última ha sido, hasta cierto punto, la posición protestante en los últimos años. Sin embargo, el libro nos llama a transformar la religión electrónica. Debemos notar que el libro no es tímido en apuntar la manipulación del pobre que llevan a cabo estos medios. Sin embargo, Hugo Assmann reconoce que la Iglesia Electrónica tiene algunas funciones positivas. Esta le ofrece al oyente sueños de vida, por eso apela en especial a los pobres y a los marginados. A pesar de su carácter ultra-terreno e individualista, la religión electrónica cumple cierta función consoladora en medio de la situación en que vivimos.

2.2. Metodología

Assmann combina el análisis socio-político con la presentación resumida -- y a veces anecdótica- de algunos movimientos que componen la Iglesia electrónica. Como buen teólogo latinoamericano, Assmann parte del análisis de la realidad para esbozar teorías e hipótesis sobre el problema. En este sentido, los primeros tres capítulos están dedicados básicamente a ese análisis de la realidad tanto en EE.UU. como en América Latina -- sobre todo en Brasil, tomando en cuenta estudios que se han hecho recientemente, en particular el del CELEP . Los últimos dos capítulos presentan pistas y pautas para la reflexión.
Cabe notar que el libro se define a sí mismo como un estudio preliminar, invitando así “a la continuación del diálogo y de la reflexión.”

2.3. Presuposiciones

Los supuestos del libro son claros. Hugo Assmann trabaja dentro del marco de la teología latinoamericana de la liberación. Cabe decirlo claramente: El libro no es neutral. Dentro de la mejor tradición latinoamericana, el autor presenta claramente sus supuestos teológicos, filosóficos y hermenéuticos.

2.4. Reacción ante posturas diferentes

Sin embargo, esto no quiere decir que el libro está cerrado a otras posiciones o análisis sobre el tema. En varios momentos se emplean materiales bibliográficos de personas con posturas diferentes. Hugo Assmann los emplea con gran provecho, señalando con honestidad sus reservas con respecto a la posición ideológica de los demás autores.

2.5. Logros

En general, el libro logra ampliamente su objetivo. La evidencia sobre el uso ideológico de la religión electrónica por la nueva derecha de los EE.UU. es contundente. Una y otra vez vemos retratadas en el libro las prácticas manipuladoras de las transnacionales de la religión.
Sin embargo, el libro nos ayuda a salir de la mera denuncia personalista. No son Robertson, Falwell o Swaggart el problema; el problema viene a ser la nueva ofensiva ideológica. Estos personajes son sólo instrumentos de esta ofensiva. La solución no está en hacer caer a estos individuos sino en transformar el sistema.

Además, el libro logra su objetivo de hacemos respetar la religiosidad del pueblo. Es fácil tomar una actitud pedante y menospreciar a las ancianitas que envían sus ofrendas esperando un pañuelo o una rosa ungida. Estos elementos que para nosotros no son más que fetiches, para la ancianita son sueños de vida: de un esposo recuperado del alcoholismo; de un hijo fuera de la drogadicción; de un matrimonio feliz para su hija; de una vida mejor; en fin, son sueños de oraciones contestadas.

2.6. Evaluación crítica

A nivel positivo, afirmamos:

a. La importancia de la investigación.
b. El tratamiento del tema en su contexto socio-político.
c. La sospecha ideológica del libro.
d. El llamado a soluciones integrales.
e. El respeto por la religiosidad del pueblo.

Algunos elementos que necesitan más trabajo son:

a. El carácter tentativo de la investigación.
b. La necesidad de algún excurso donde se defina mejor el fundamentalismo, sus características y su relación con la nueva derecha norteamericana.
c. Un análisis más profundo de la relevancia que tiene en especial la radio en la piedad, la educación, la predicación y el cuidado pastoral de la audiencia.
d. Y, su restricción más importante, la ausencia de un estudio como éste de aquellos programas que más influyen en el pueblo evangélico hispano parlante.

En resumen, lo que quiero decir es que el libro despierta el deseo de saber más sobre el problema. El libro nos desafía a continuar investigando.

3. Religión electrónica y predicación protestante

En esta sección, trataremos brevemente el tema de la relación entre la Iglesia electrónica y la predicación protestante. A continuación veremos tres niveles del problema: el práctico, el comunicativo y el teológico.

3.1. Nivel práctico

Es necesario reconocer que las Iglesias "Históricas” protestantes acostumbran "abandonar”, es decir, no trabajar, áreas completas de la teología y la práctica pastoral. Estas son, entonces, trabajadas por los movimientos fundamentalistas. Ejemplo de esto son la escatología y la pneumatología. Estas áreas habían sido trabajadas casi exclusivamente por los grupos fundamentalistas hasta que en los últimos años la teología latinoamericana de la liberación ha comenzado a desarrollar el tema del Reino y la espiritualidad. El uso de los medios de comunicación masiva, es una de estas áreas que ha sido dejada a los grupos fundamentalistas.

Otra verdad que debemos reconocer es que no son los seminarios ni las casas editoras quienes capacitan el liderazgo evangélico de América Latina. En las últimas décadas, la religión electrónica ha provisto los contenidos y los modelos para la predicación del pueblo evangélico latinoamericano. Nuestra gente aprende a predicar con la radio; nuestra gente aprende qué decir con la radio. Desde que terminó aquella primera etapa de Evangelismo a Fondo no hay modelos autóctonos que sean conocidos en toda la región. En las ultimas décadas, los modelos han sido Graham y Swaggart .

3.2. Nivel comunicativo

Existen algunos principios comunicativos que nos ayudan a entender mejor el impacto de la religión electrónica.

Estos son:

a. La audiencia es más influida por la forma que por el contenido de un mensaje; la gente es más influida por lo dramático que por lo lógico. Así un predicador dinámico se comunica mejor que uno inseguro.

b. La audiencia tiende a creer lo que oye por radio y televisión; la gente tiende a creer a quien escucha por estos medios. Esto se debe a que estos medios transmiten las noticias, las cuales se consideran regularmente fidedignas.

En este sentido no es sorprendente que un “importante predicador electrónico" tenga más credibilidad que un pastor local.

3.3. Nivel teológico

Este es el nivel más importante para comprender el éxito de la predicación tele-radial. Permítanme jugar el papel de abogado del diablo. Voy a hablar en blanco y negro-- aunque la realidad es gris-- señalando algunos elementos teológicos que hacen tan llamativa la religión electrónica

3.3.1. La teología fundamentalista

La teología fundamentalista es clara y simple. El tema de la Biblia es Jesucristo, aún del Antiguo Testamento. La predicación es la exposición de las escrituras y, por lo tanto, de Jesucristo.

Su lógica es clara. Hay sólo dos caminos: el cielo o el infierno. La función del sermón es sencilla: presentar el desafío del evangelio.

Su énfasis individualista apela a las necesidades inmediatas del oyente. Y. a veces, produce cambios radicales en la gente.

El estilo de predicación es narrativo, episódico e inductivo. Utilizan imágenes, ilustraciones e historias. No se parte de un bosquejo o de una idea central, sino que se "descubre a Cristo en el texto en la dinámica de la exposición.”

3.3.2. La teología protestante

La Iglesia protestante ha sostenido varias teologías, muchas contradictorias entre sí, durante el siglo XX.

Predicamos la iniciativa divina con Barth, el existencialismo con Bultmann y Tillich, el compromiso con Bonhoeffer, el liberalismo con Fosdick, la muerte de Dios con Robinson, a Dios en la historia con Von Rad, la esperanza en la historia con Moltmann y Pannenberg, y ahora hemos descubierto la dimensión liberadora.

Con Bultmann desmitologizamos el mensaje. Las imágenes bíblicas eran "criaturales"; eran la corteza que envolvía el Kerigma. Había que descartarlas. ¡Lo importante es el contenido, no la forma! Cayendo, así, en una especie de maniqueísmo estético.

En las últimas décadas recuperamos el carácter narrativo y literario de la Biblia. Rechazamos la idea de que la revelación es proposicional.

Descubrimos que el mensaje bíblico es más bien narrativo e inductivo. Esto nos ha llevado a la teología inductiva por excelencia: la teología latinoamericana de la liberación. Ahora partimos de la realidad; la teoría es un segundo paso.

Sin embargo, mantenemos un estilo homilético contrario a nuestra teología. Seguimos usando el sistema homilético del racionalismo inglés. Lo hemos aprendido con Spurgeon, Broadus, Crane, Stott ... y también Costas. Esta predicación proposicional, racionalista y monológica contradice nuestra teología inductiva y comunitaria. En consecuencia, algunos han pensado que el problema está en la disciplina: la predicación no es efectiva. Pero la Iglesia electrónica nos sigue probando la efectividad de la predicación. El problema no está en la disciplina; está en nosotros.

4. Conclusiones

Tanto el libro como la situación de nuestras Iglesias nos presentan varios desafíos. De estos, quisiera indicar tres que, a mi entender, presentan una agenda de trabajo para el liderazgo teológico y pastoral en América Latina.

En primer lugar, se presenta el desafío de la investigación. Es necesario continuar la misma, haciendo estudios tanto analíticos como técnicos.

Segundo, se presenta el desafío pastoral. Es necesario desarrollar un acompañamiento pastora! que cultive la confianza y la credibilidad .

Finalmente, se presenta el desafío de la comunicación del mensaje. Es necesario encontrar formas mas efectivas para la comunicación del evangelio, usando eficazmente tanto los métodos tradicionales --- por ejemplo la predicación- como los medios de comunicación masiva. La Iglesia electrónica no nos llama a imitar sus métodos, sino que nos desafía a ser mejores comunicadores.

5. Notas bibliográficas

1. El 23 de septiembre de 1987 se realizó una mesa redonda sobre el libro "La Iglesia electrónica y su impacto en América Latina". En la mesa, de izquierda a derecha el Dr. Guillermo Cook, el Dr. Hugo Assmann, el Dr. Carmelo Álvarez y el Rev. Pablo A. Jiménez.

2. Hugo Assmann, La Iglesia electrónica y su impacto en América Latina (San José: DEI,1987).

3. Adolfo Ruiz y Dennis Smith, "Impacto de la programación religiosa difundida por los medios electrónicos en la población cristiana activa de América Central", Pastoralia 18 (Julio 1987): 129-161.

4. Hugo Assmann, op. cit., página 13.

5. Aunque no todos tienen plena conciencia de su papel en la lucha ideológica, algunos expresan abiertamente sus proyectos políticos. Véanse, por ejemplo, las declaraciones de Falwell y Robertson en las revistas Time del 2 de noviembre de 1985 y del 17 de febrero de 1986, respectivamente.

6. Esto ha sido señalado anteriormente. Véase, por ejemplo, el artículo de Cecilio Arrastía, "Billy Graham y sus imitadores", Pastoralia 9 (Diciembre 1982): 36-39.

7. Lo siguiente está tomado de Myron R. Chartier, Preaching as Communication: An Interpersonal Perspective (Nashville: Abingdon, 1981), páginas 51-59, passim.

8. Sobre la teología fundamentalista de la predicación véase el capítulo llamado "Fundamentalism: The Evangelists" (págs. 64-79), en Roben M. Duke, The Sermon as God's Word: Theologies for Preaching (Nashville: Abingdon, 1980).

9. Este llamado ha sido expresado en el “Comunicado de la consulta de obispos de América Latina y el Caribe a nuestras Iglesias", Pasos 10, DEI (1987): 16-20.




Predicadores, profetas y sacerdotes (Segunda versión, en formato PDF)


Religión electrónica y predicación protestante
:: Teoria Homiletica
Religión electrónica y predicación protestante

Bosquejo:

1. Introducción
En los últimos años nuestra América Latina se ha visto invadida por programas religiosos en la radio y en la televisión. La religión electrónica se ha vuelto parte integral de la experiencia cristiana evangélica latinoamericana.
Sin embargo, el fenómeno de la Iglesia electrónica sólo está comenzando a estudiarse en nuestro medio. Sólo recientemente se ha empezado a caminar en la investigación del tema. Uno de los primeros pasos en esta investigación lo constituye el libro La Iglesia electrónica y su impacto en América Latina de Hugo Assmann .
Las reflexiones que presentamos a continuación nacieron con motivo de la presentación del libro de Hugo Assmann en el Seminario Bíblico Latinoamericano. Las mismas se dividen en dos partes. En la primera presentamos una breve reseña crítica del libro. En la segunda, presentamos algunas ideas germinales sobre la relación entre la religión electrónica y la predicación protestante. En todo esto, nuestro esfuerzo no es otro que el de aportar algunos elementos para el avance de la discusión del tema.
2. La Iglesia electrónica: una reseña critica
Nuestros comentarios sobre el libro se estructurarán a base de una serie de preguntas guías que, regularmente, usamos en nuestras clases en el Seminario. Las mismas exploran la tesis y el objetivo del material; la metodología empleada por el autor; sus presuposiciones teológicas, filosóficas y hermenéuticas; su reacción a posturas diferentes; los logros del escrito y una evaluación crítica del mismo.
2.1. Tesis y objetivo
La tesis de Hugo Assmann en su libro es la siguiente: Para comprender el fenómeno de la religión electrónica debemos ver su función socio-política e ideológica. Es necesario verla en su globalidad como parte del avance de las sectas y como parte de los diversos fetichismos que se utilizan para legitimar el sistema imperante. En fin, hay que verla como parte del proceso global que hoy vive América Latina.
El objetivo de Hugo Assmann es sacarnos de la mera denuncia personalista de los tele o radio evangelistas, llevándonos a ver el problema en su amplio marco social.
Es interesante notar que el libro no se desgasta en ataques personalistas sino que analiza el problema sin descartar la religión electrónica. Esta última ha sido, hasta cierto punto, la posición protestante en los últimos años. Sin embargo, el libro nos llama a transformar la religión electrónica. Debemos notar que el libro no es tímido en apuntar la manipulación del pobre que llevan a cabo estos medios. Sin embargo, Hugo Assmann reconoce que la Iglesia Electrónica tiene algunas funciones positivas. Esta le ofrece al oyente sueños de vida, por eso apela en especial a los pobres y a los marginados. A pesar de su carácter ultra-terreno e individualista, la religión electrónica cumple cierta función consoladora en medio de la situación en que vivimos.
2.2. Metodología
Assmann combina el análisis socio-político con la presentación resumida -- y a veces anecdótica- de algunos movimientos que componen la Iglesia electrónica. Como buen teólogo latinoamericano, Assmann parte del análisis de la realidad para esbozar teorías e hipótesis sobre el problema. En este sentido, los primeros tres capítulos están dedicados básicamente a ese análisis de la realidad tanto en EE.UU. como en América Latina -- sobre todo en Brasil, tomando en cuenta estudios que se han hecho recientemente, en particular el del CELEP . Los últimos dos capítulos presentan pistas y pautas para la reflexión.
Cabe notar que el libro se define a sí mismo como un estudio preliminar, invitando así “a la continuación del diálogo y de la reflexión.”
2.3. Presuposiciones
Los supuestos del libro son claros. Hugo Assmann trabaja dentro del marco de la teología latinoamericana de la liberación. Cabe decirlo claramente: El libro no es neutral. Dentro de la mejor tradición latinoamericana, el autor presenta claramente sus supuestos teológicos, filosóficos y hermenéuticos.
2.4. Reacción ante posturas diferentes
Sin embargo, esto no quiere decir que el libro está cerrado a otras posiciones o análisis sobre el tema. En varios momentos se emplean materiales bibliográficos de personas con posturas diferentes. Hugo Assmann los emplea con gran provecho, señalando con honestidad sus reservas con respecto a la posición ideológica de los demás autores.
2.5. Logros
En general, el libro logra ampliamente su objetivo. La evidencia sobre el uso ideológico de la religión electrónica por la nueva derecha de los EE.UU. es contundente. Una y otra vez vemos retratadas en el libro las prácticas manipuladoras de las transnacionales de la religión.
Sin embargo, el libro nos ayuda a salir de la mera denuncia personalista. No son Robertson, Falwell o Swaggart el problema; el problema viene a ser la nueva ofensiva ideológica. Estos personajes son sólo instrumentos de esta ofensiva. La solución no está en hacer caer a estos individuos sino en transformar el sistema.
Además, el libro logra su objetivo de hacemos respetar la religiosidad del pueblo. Es fácil tomar una actitud pedante y menospreciar a las ancianitas que envían sus ofrendas esperando un pañuelo o una rosa ungida. Estos elementos que para nosotros no son más que fetiches, para la ancianita son sueños de vida: de un esposo recuperado del alcoholismo; de un hijo fuera de la drogadicción; de un matrimonio feliz para su hija; de una vida mejor; en fin, son sueños de oraciones contestadas.
2.6. Evaluación crítica
A nivel positivo, afirmamos:
a. La importancia de la investigación.
b. El tratamiento del tema en su contexto socio-político.
c. La sospecha ideológica del libro.
d. El llamado a soluciones integrales.
e. El respeto por la religiosidad del pueblo.
Algunos elementos que necesitan más trabajo son:
a. El carácter tentativo de la investigación.
b. La necesidad de algún excurso donde se defina mejor el fundamentalismo, sus características y su relación con la nueva derecha norteamericana.
c. Un análisis más profundo de la relevancia que tiene en especial la radio en la piedad, la educación, la predicación y el cuidado pastoral de la audiencia.
d. Y, su restricción más importante, la ausencia de un estudio como éste de aquellos programas que más influyen en el pueblo evangélico hispano parlante.
En resumen, lo que quiero decir es que el libro despierta el deseo de saber más sobre el problema. El libro nos desafía a continuar investigando.
3. Religión electrónica y predicación protestante
En esta sección, trataremos brevemente el tema de la relación entre la Iglesia electrónica y la predicación protestante. A continuación veremos tres niveles del problema: el práctico, el comunicativo y el teológico.
3.1. Nivel práctico
Es necesario reconocer que las Iglesias "Históricas” protestantes acostumbran "abandonar”, es decir, no trabajar, áreas completas de la teología y la práctica pastoral. Estas son, entonces, trabajadas por los movimientos fundamentalistas. Ejemplo de esto son la escatología y la pneumatología. Estas áreas habían sido trabajadas casi exclusivamente por los grupos fundamentalistas hasta que en los últimos años la teología latinoamericana de la liberación ha comenzado a desarrollar el tema del Reino y la espiritualidad. El uso de los medios de comunicación masiva, es una de estas áreas que ha sido dejada a los grupos fundamentalistas.
Otra verdad que debemos reconocer es que no son los seminarios ni las casas editoras quienes capacitan el liderazgo evangélico de América Latina. En las últimas décadas, la religión electrónica ha provisto los contenidos y los modelos para la predicación del pueblo evangélico latinoamericano. Nuestra gente aprende a predicar con la radio; nuestra gente aprende qué decir con la radio. Desde que terminó aquella primera etapa de Evangelismo a Fondo no hay modelos autóctonos que sean conocidos en toda la región. En las ultimas décadas, los modelos han sido Graham y Swaggart .
3.2. Nivel comunicativo
Existen algunos principios comunicativos que nos ayudan a entender mejor el impacto de la religión electrónica.
Estos son:
a. La audiencia es más influida por la forma que por el contenido de un mensaje; la gente es más influida por lo dramático que por lo lógico. Así un predicador dinámico se comunica mejor que uno inseguro.
b. La audiencia tiende a creer lo que oye por radio y televisión; la gente tiende a creer a quien escucha por estos medios. Esto se debe a que estos medios transmiten las noticias, las cuales se consideran regularmente fidedignas.
En este sentido no es sorprendente que un “importante predicador electrónico" tenga más credibilidad que un pastor local.
3.3. Nivel teológico
Este es el nivel más importante para comprender el éxito de la predicación tele-radial. Permítanme jugar el papel de abogado del diablo. Voy a hablar en blanco y negro-- aunque la realidad es gris-- señalando algunos elementos teológicos que hacen tan llamativa la religión electrónica
3.3.1. La teología fundamentalista
La teología fundamentalista es clara y simple. El tema de la Biblia es Jesucristo, aún del Antiguo Testamento. La predicación es la exposición de las escrituras y, por lo tanto, de Jesucristo.
Su lógica es clara. Hay sólo dos caminos: el cielo o el infierno. La función del sermón es sencilla: presentar el desafío del evangelio.
Su énfasis individualista apela a las necesidades inmediatas del oyente. Y. a veces, produce cambios radicales en la gente.
El estilo de predicación es narrativo, episódico e inductivo. Utilizan imágenes, ilustraciones e historias. No se parte de un bosquejo o de una idea central, sino que se "descubre a Cristo en el texto en la dinámica de la exposición.”
3.3.2. La teología protestante
La Iglesia protestante ha sostenido varias teologías, muchas contradictorias entre sí, durante el siglo XX.
Predicamos la iniciativa divina con Barth, el existencialismo con Bultmann y Tillich, el compromiso con Bonhoeffer, el liberalismo con Fosdick, la muerte de Dios con Robinson, a Dios en la historia con Von Rad, la esperanza en la historia con Moltmann y Pannenberg, y ahora hemos descubierto la dimensión liberadora.
Con Bultmann desmitologizamos el mensaje. Las imágenes bíblicas eran "criaturales"; eran la corteza que envolvía el Kerigma. Había que descartarlas. ¡Lo importante es el contenido, no la forma! Cayendo, así, en una especie de maniqueísmo estético.
En las últimas décadas recuperamos el carácter narrativo y literario de la Biblia. Rechazamos la idea de que la revelación es proposicional.
Descubrimos que el mensaje bíblico es más bien narrativo e inductivo. Esto nos ha llevado a la teología inductiva por excelencia: la teología latinoamericana de la liberación. Ahora partimos de la realidad; la teoría es un segundo paso.
Sin embargo, mantenemos un estilo homilético contrario a nuestra teología. Seguimos usando el sistema homilético del racionalismo inglés. Lo hemos aprendido con Spurgeon, Broadus, Crane, Stott ... y también Costas. Esta predicación proposicional, racionalista y monológica contradice nuestra teología inductiva y comunitaria. En consecuencia, algunos han pensado que el problema está en la disciplina: la predicación no es efectiva. Pero la Iglesia electrónica nos sigue probando la efectividad de la predicación. El problema no está en la disciplina; está en nosotros.
4. Conclusiones
Tanto el libro como la situación de nuestras Iglesias nos presentan varios desafíos. De estos, quisiera indicar tres que, a mi entender, presentan una agenda de trabajo para el liderazgo teológico y pastoral en América Latina.
En primer lugar, se presenta el desafío de la investigación. Es necesario continuar la misma, haciendo estudios tanto analíticos como técnicos.
Segundo, se presenta el desafío pastoral. Es necesario desarrollar un acompañamiento pastora! que cultive la confianza y la credibilidad .
Finalmente, se presenta el desafío de la comunicación del mensaje. Es necesario encontrar formas mas efectivas para la comunicación del evangelio, usando eficazmente tanto los métodos tradicionales --- por ejemplo la predicación- como los medios de comunicación masiva. La Iglesia electrónica no nos llama a imitar sus métodos, sino que nos desafía a ser mejores comunicadores.
5. Notas bibliográficas
1. El 23 de septiembre de 1987 se realizó una mesa redonda sobre el libro "La Iglesia electrónica y su impacto en América Latina". En la mesa, de izquierda a derecha el Dr. Guillermo Cook, el Dr. Hugo Assmann, el Dr. Carmelo Álvarez y el Rev. Pablo A. Jiménez.
2. Hugo Assmann, La Iglesia electrónica y su impacto en América Latina (San José: DEI,1987).
3. Adolfo Ruiz y Dennis Smith, "Impacto de la programación religiosa difundida por los medios electrónicos en la población cristiana activa de América Central", Pastoralia 18 (Julio 1987): 129-161.
4. Hugo Assmann, op. cit., página 13.
5. Aunque no todos tienen plena conciencia de su papel en la lucha ideológica, algunos expresan abiertamente sus proyectos políticos. Véanse, por ejemplo, las declaraciones de Falwell y Robertson en las revistas Time del 2 de noviembre de 1985 y del 17 de febrero de 1986, respectivamente.
6. Esto ha sido señalado anteriormente. Véase, por ejemplo, el artículo de Cecilio Arrastía, "Billy Graham y sus imitadores", Pastoralia 9 (Diciembre 1982): 36-39.
7. Lo siguiente está tomado de Myron R. Chartier, Preaching as Communication: An Interpersonal Perspective (Nashville: Abingdon, 1981), páginas 51-59, passim.
8. Sobre la teología fundamentalista de la predicación véase el capítulo llamado "Fundamentalism: The Evangelists" (págs. 64-79), en Roben M. Duke, The Sermon as God's Word: Theologies for Preaching (Nashville: Abingdon, 1980).
9. Este llamado ha sido expresado en el “Comunicado de la consulta de obispos de América Latina y el Caribe a nuestras Iglesias", Pasos 10, DEI (1987): 16-20.





¿Qué es la predicación bíblica?
:: Teoria Homiletica
¿Qué es la predicación bíblica?

Bosquejo

¿Qué es la predicación bíblica? ¿Cómo definirla? ¿Cuáles son los criterios que determinan cuán bíblico es un sermón? En este artículo, trataré el tema de la predicación bíblica. En primer lugar, presentaré una definición general del concepto. Entonces, en segundo lugar, pasaré a discutir con más detalle los elementos que le dan carácter bíblico a la predicación.
I. Definición
De primera intención, la frase "predicación bíblica" parece redundante. La predicación cristiana es, ante todo, la presentación del evangelio en fidelidad a las escrituras. De este modo, podemos concluir que todo sermón debe ser "bíblico", en mayor o menor grado.
Sin embargo, a través de la historia los estudiosos de la homilética han identificado dos estilos básicos de predicación: la bíblica y la temática.
A. La predicación bíblica
La predicación bíblica es aquella que toma como punto de partida para el sermón una porción de las escrituras. El propósito de este tipo de predicación es interpretar el mensaje del texto para los oyentes de hoy. Tradicionalmente, se han identificado tres tipos de sermones bíblicos:
1. El sermón textual: Este tipo de sermón comenta frase por frase uno o dos versículos de la Biblia. De este modo, obtiene del texto tanto su tema como las divisiones de su desarrollo . Un ejemplo de este tipo de sermón sería una presentación de tres puntos basada en Juan 3:16.
a. El motivo de la Salvación: "De tal manera amó Dios al mundo..."
b. El mediador de la Salvación: "...que ha dado a su hijo unigénito..."
c. El propósito de la Salvación: "...para que todo aquel que en él cree no se pierda mas tenga vida eterna."
2. El sermón expositivo: Este sermón es el que, fundamentado en una unidad de la Biblia, presenta un aspecto del mensaje del texto. La extensión del pasaje bíblico no es lo importante en este caso; lo importante es que el sermón presente algunos de los muchos temas relevantes que sugiere el texto . Por ejemplo, la parábola del Buen Samaritano (Lc. 10:25-37) sugiere una larga lista de temas: el significado de ser prójimo, la responsabilidad social de la iglesia, el peligro del legalismo religioso, el amor de Dios por el marginado, etc. Un sermón expositivo sobre esta parábola presentaría sólo uno de estos temas, dejando los demás para futuros sermones.
3. El sermón narrativo: En este tipo de sermón el predicador cuenta una historia bíblica . Al hacerlo, la historia cobra vida ante nuestros ojos y el mensaje del texto se vuelve evidente. En realidad, es un estilo de predicación muy sencillo. Se presta, en particular, para sermones evangelísticos y para predicarle a los niños. Tomemos, por ejemplo, el relato de la curación del leproso en Marcos 1:40-45. Un buen sermón narrativo de propósito evangelístico nos hará comprender tanto el sufrimiento del leproso como el amor de Jesús. Al oír la historia nos involucramos en la misma y de pronto comprendemos que el leproso nos representa. Nosotros estamos tan necesitados como él. Sólo Jesús puede tocarnos, dejarnos limpios y restaurarnos a una vida plena.
B. La predicación temática
La predicación temática parte de un asunto de interés general, una doctrina o un episodio de la historia de la Iglesia . Entonces, hace una reflexión sobre el tema a la luz del mensaje de la Biblia y del pensamiento cristiano. El propósito de este tipo de predicación es, principalmente, didáctico; busca que la congregación aprenda más sobre el tema, tome conciencia de la importancia del mismo y actúe a base del conocimiento adquirido. Podemos identificar dos (2) variantes básicas del sermón temático:
1. El sermón doctrinal: Este tipo de sermón presenta algún aspecto importante de una doctrina de la fe cristiana. Es decir, presenta un punto importante de la fe tal como la necesidad de salvación, las consecuencias del pecado o los frutos del Espíritu Santo. Como indicamos anteriormente, su propósito es, básicamente, didáctico.
2. El sermón sobre problemas sociales: El sermón sobre problemas sociales presenta una reflexión bíblica y teológica sobre un tema de actualidad que afecta a la comunidad de la cual formamos parte. Algunos temas relevantes en nuestro contexto serían el discrimen racial, la violencia doméstica o el militarismo. El enfoque básico de este tipo de sermón es teológico puesto que la Biblia dice muy poco sobre nuestros problemas actuales. Es decir, nuestra sociedad confronta problemas tales como el aborto y la contaminación ambiental que la Biblia no trata directamente. Este tipo de sermón entra en el área de la ética cristiana y, por lo tanto, su propósito oscila entre la didáctica y el desafío a la acción.
II. Criterios
Anteriormente, indicamos que la predicación bíblica es aquella que toma como punto de partida un pasaje de la escritura. Sin embargo, esto no es más que el primer paso. Para ser verdaderamente bíblico, un sermón debe tener ciertas características adicionales.
La predicación bíblica ocurre cuando el contenido, la función y la forma del texto moldean el contenido, la función y la forma del sermón . En otras palabras, la predicación es bíblica cuando el sermón está diseñado en forma coherente con el pasaje bíblico que le sirve de base .
A continuación comentaremos brevemente los elementos que hacen "bíblica" la predicación.
A. Contenido
Un sermón es bíblico cuando su contenido corresponde al contenido del texto que le sirve de base. En otras palabras, un sermón ofrece una interpretación válida del texto.
Para poder interpretar adecuadamente el contenido de un pasaje bíblico es necesario prestarle atención a tres elementos importantes:
1. El contexto social e histórico: ¿En qué época fue escrito el texto? ¿Qué comunidad lo produjo? ¿A qué comunidad o persona en específico fue dirigido? ¿Cuál era la situación social e histórica de estas comunidades religiosas?
2. El mensaje: ¿Qué dice el texto? ¿Cuál es su argumento? ¿Cuáles son las ideas y los conceptos teológicos claves del pasaje? ¿Cómo podemos interpretar esta porción en forma valida? ¿Cuál es el mensaje del texto para nosotros hoy?
3. El estilo literario: ¿Es un texto narrativo, poético o discursivo? ¿Qué imágenes literarias usan? ¿Qué elementos del texto deben interpretarse en manera figurada?
Cuando no se presta la atención debida a estos elementos, surgen interpretaciones erradas. ¡Así hay quienes toman literalmente un texto poético del Antiguo testamento, Ec. 9:8, y andan siempre vestidos de blanco.
B. Función
Un sermón es bíblico cuando su función corresponde a la función del texto que le sirve de base. Es decir, un sermón bíblico logra en el oyente un efecto similar al que logra el texto.
Los pasajes bíblicos han sido escritos con diversos propósitos. Un texto puede consolar, exhortar, desafiar, edificar, llamar a la fe, etc. El predicador bíblico debe aprender a discernir el propósito del texto y tratar que el texto tenga un propósito similar.
Por ejemplo, el libro de Apocalipsis fue escrito para consolar a los cristianos que sufrían la opresión del Imperio Romano . El propósito del texto es alentar a la audiencia, llamándolos al compromiso con el Dios amoroso y liberador que se ha revelado en Jesucristo. Un sermón sobre Apocalipsis debe tener, pues, el propósito de alentar y consolar a la Iglesia. Un sermón basado en Apocalipsis que provoque miedo en los oyentes traiciona la función del texto.
C. Forma
Un sermón es bíblico cuando su forma corresponde a la forma del texto que le sirve de base. De otro modo, un sermón bíblico toma en cuenta la estructura del texto.
La estructura de un texto bíblico es muy importante. Ya que es imposible separar la estructura del mensaje del texto, por regla general la forma aclara el contenido.
Si leemos las parábolas notaremos que casi todas tienen un final sorpresivo: El esposo llega cuando menos lo esperan (Mt. 25:10); El samaritano se compadece del judío herido (Lc. 10:33-35); y el publicano es justificado (Lc. 18:14). Todo esto habla de la sorpresa que causa la revelación de Dios en Cristo. En otras palabras, en el Reino de Dios todo es novedoso. Aquí vemos claramente como la forma y el contenido van de la mano.
Del mismo modo, un sermón sobre una parábola que tenga un final sorpresivo será más claro e impactante que un sermón con un final tradicional.
III. Conclusión
En resumen, la predicación es verdaderamente bíblica cuando el sermón es un reflejo fiel del contenido, la función y la forma del texto que le sirve de base. La tarea, pues, del predicador es dejar que Dios hable a través de la exposición del mensaje bíblico. Sólo entonces los oyentes tendremos la oportunidad de encontrarnos con el Señor de la vida en la proclamación de la Palabra de Dios.



Vocabulario básico de predicación
:: Teoria Homiletica
Vocabulario básico de predicación
A continuación definimos varios conceptos relacionados al estudio y la práctica de la predicación cristiana. El objetivo de este glosario es facilitar la lectura y la comprensión de libros, ensayos, artículos, y otros materiales de estudio sobre el tema.
Año Cristiano
Cuando hablamos del año cristiano, nos referimos a la secuencia de eventos y días especiales que la iglesia observa durante el año. Conocido también como el calendario litúrgico o eclesial, el año cristiano surge de los ciclos de lecturas bíblicas, temporadas, y festivales del Judaísmo del tiempo de Jesús.
Bosquejo o notas de sermón
El bosquejo o las notas homiléticas son nombres que se usan para referirse a los materiales que el predicador o la predicadora ha de llevar al pulpito. Un bosquejo puede ser tan corto como una lista de palabras clave o tan extenso como un manuscrito.
Entrega del sermon
Véase Presentación del sermón.
Exégesis
El término “exégesis” es el nombre que se le da al proceso por medio del cual una persona estudia, explica o interpreta un documento. Aunque este término se usa en otras disciplinas (como el estudio de las leyes), se refiere particularmente al estudio de la Biblia. La palabra “exégesis” proviene de dos palabras griegas que, combinadas, quieren decir “sacar de”.
Hermenéutica
La hermenéutica es la teoría de la interpretación de textos y documentos. La hermenéutica bíblica es, pues, la teoría de la interpretación de las Sagradas Escrituras. Estudia todo el proceso interpretativo, desde la determinación del sentido original del texto (exégesis) hasta la exposición de su mensaje por medio de la enseñanza o la predicación.
Homilética
La homilética es la disciplina que estudia la teoría y la práctica de la predicación cristiana. Abarca todos los aspectos relacionados a la predicación, desde la preparación hasta la presentación del sermón. Estudia estos elementos a la luz de la historia y la teología de la predicación.
Homilía
La palabra homilía se usa de dos maneras distintas en el campo de la predicación. Algunos libros la usan como sinónimo de la palabra “sermón”. Otros la usan para referirse a un sermón corto (de 5 a 10 minutos) que explica una porción bíblica versículo por versículo.
Ilustraciones
Una ilustración es un recurso literario que clarifica una idea. Por lo regular, se refiere a una historia o una anécdota que apoya o desarrolla una idea. También incluye el uso de símiles, metáforas, analogías, alegorías, ejemplos, poemas, y testimonios, entre otros recursos.
Kerigma
Palabra derivada del una forma del verbo griego “kerysso,” que significa “proclamar” o “anunciar”. El kerygma es el contenido de la predicación.
En la teología bíblica es un término técnico que se refiere al mensaje central de la fe cristiana. Sin embargo, en muchos libros se usa como sinónimo de términos tales “proclamación” y “evangelio”.
Leccionario
Un leccionario es un documento que contiene una lista de lecturas bíblicas para ser usadas en el culto y la predicación cristiana. Los leccionarios combinan lecturas del Antiguo y del Nuevo Testamento, leyendo distintos documentos bíblicos de forma continua o semi-continua.
Manuscrito del sermón
El manuscrito es un documento que contiene el texto completo del sermón que ha de ser predicado. Quienes usan manuscritos, tienden a leer sus sermones a la congregación.
Dado que el sermón es un evento, no debemos usar la palabra “sermón” para referirnos al manuscrito.
Notas del sermón
Véase Bosquejo del sermón.
Predicación Cristiana
La predicación es la proclamación del evangelio de Jesucristo. El propósito u objetivo de la predicación es interpretar la vida a la luz de la fe cristiana. Por lo regular, la predicación se lleva a cabo dentro del contexto de un servicio de adoración.
Predicación Expositiva
La predicación expositiva presenta parte del mensaje de una porción bíblica, presentando su mensaje para la mundo de hoy. La porción bíblica puede ser tan breve como un versículo tan extenso como un libro de la Biblia
Predicación Narrativa
La predicación narrativa abarca tres disciplinas relacionadas: el sermón narrativo, la interpretación de textos narrativos, y la presentación de ideas teológicas en forma narrativa. Un sermón narrativo organiza sus ideas siguiendo la estructura de un cuento corto. Un sermón narrativo puede basarse tanto en textos bíblicos como en historias seculares.
Predicación Temática o Doctrinal
El sermón temático o doctrinal presenta un análisis cristiano de un tema,explicando las implicaciones del mismo para la sociedad actual. El tema a considerar puede ser tanto una doctrina cristiana (salvación, pecado, santidad, etc.) como un asunto actual (aborto, pena de muerte, etc.) Presentación del Sermón. Un sermón no cobra vida hasta que se presenta ante una congregación. Hasta ese momento, no es más que una idea o una serie de anotaciones en un papel. La presentación (también llamada “entrega”) del sermón incluye tanto aspectos verbales como no-verbales.
Proclamación
El término “proclamación” es uno de los términos que se usa para hablar del anuncio del evangelio de Jesucristo. La proclamación puede ser tanto verbal como no-verbal. La predicación es una forma verbal de proclamación cristiana.
Sermón
Un sermón es un discurso que expone o proclama el mensaje del evangelio. El sermón es un evento; ocurre cuando alguien presenta el mensaje cristiano ante una audiencia en el contexto de la adoración cristiana. Los sermones se pueden clasificar por por su propósito, diseño, o fuente.
Temporadas del Año Cristiano
El primer cambio que hizo la iglesia fue establecer el Domingo como el día de culto. El calendario está organizado alrededor de los distintos domingos de cada año. Los días más importantes son el de navidad y el resurrección. Ambos son precedidas de temporadas de preparación (adviento y cuaresma) y seguidas por temporadas de celebración (epifanía y pentecostés).
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