Mostrando entradas con la etiqueta matrimonio sobre la roca. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta matrimonio sobre la roca. Mostrar todas las entradas

viernes, 15 de junio de 2012

No es Bueno que el Hombre este Solo: Teologia del Matrimonio


biblias y miles de comentarios
 
Tipo de Archivo: PDF | Idioma: Spanish | Categoría: Capacitación Ministerial
Información
Prólogo 15
PARTE PRIMERA: "DIJO LUEGO  DIOS..." 21
Introducción: El Antiguo Testamento 23
SECCIÓN I: Matrimonio y pecado 33
1. "Espíritus engañosos" 33
2. Por qué es bueno el matrimonio 49
SECCIÓN II: El matrimonio y el pecado original 61
3. Si Adán no hubiese caido 61
4. Libido 73
5. El instinto de los creyentes 101
6. Varón y hembra 131
PARTE SEGUNDA: "NO ES BUENO QUE EL
HOMBRE ESTE SOLO" 141
Introducción: Salvación en parejas 143
SECCIÓN I: La vida ideal 149
7. Un don especial 149
8. Las inquietudes de la vida matrimonial 163
9. Abstinencia y oración 177
10. "Donde esté tu tesoro..." 187
11. "Para bien y para mal..." . 205
12. "División" 219
13. El mejor camino . 227 
SECCIÓN II: La vida típica 239
14. Como en los tiempos de Noé 239
PARTE TERCERA: "VOY A HACERLE UNA
AYUDA..." 257
SECCIÓN I: Santo matrimonio 259
Introducción: La presencia de Yahvé 259
15. La naturaleza del matrimonio 263
SECCIÓN II: La función de Dios 275
Introducción: El deseo de Yahvé 275
16. La promesa sagrada 281
17. El don del matrimonio 289
18. El Pronubus 303
19. Hechos el uno para el otro 311
SECCIÓN III: Sus perspectivas 323
20. Caminos y viajeros 323
21 . Un camino hacia Dios 341
Conclusiones 351
Abreviaturas 357
Bibliografía  359

LA primera insinuación de respuesta a nuestra pregunta sobre la influencia que se ejercen mutuamente marido y mujer se encuentra en el relato del matrimonio más an-tiguo de la Biblia.
Dijo luego Yahvé Dios: "No es bueno que el hombre esté solo. Voy a hacerle una ayuda adecuada..." Entonces Yahvé Dios hizo caer un profundo sueño sobre el hombre, el cual se durmió. Y le quitó una de las costillas, rellenando el vacio con carne. De la cos-tilla que Yahvé Dios había tomado del hombre formó una mujer y la llevó ante el hombre. Entonces éste exclamó:
"¡Esta vez si que es hueso de mis huesos
y carne de mi carne!
Esta será llamada varona,
porque de varón ha sido tomada."
Por eso deja el hombre a su padre y a su madre
y se une a su mujer, y se hacen una sola carne' . 
Como quiera que Dios usó al ser humano autor de este pasaje como su medio para comunicarse con nosotros, ¿qué es lo que trata de decir este autor humano?Antes de que podamos contestar es preciso recordar algo. Un hombre se dedica a crear porque desea com-partir una experiencia que ha obtenido de la vida y su significado. Y concibe un tipo de notas musicales, una combinación de colores, una cierta disposición de las pa-labras, porque este es el mejor medio que conoce para hacer que otros vean y sientan lo que él ha visto y sentido.
Así, cuando un autor, esta vez inspirado por Dios de un modo especial, declara:
Los montes brincaron lo mismo que carneros,
las colinas como corderinos. importa saber si lo que leemos es un relato presencial o un poema lírico. El libro en el cual ocurre nuestro pasaje sobre el ma-trimonio recibió su forma presente una vez que los judíos regresaron de Babilonia, y extrae la poesía y la prosa de tres antiguas colecciones, fundiéndolas en un tipo único.
Esta narración sobre el primer hombre y la primera mujer proviene de la colección "Yahvist", denominada así por la palabra que ordinariamente usan para Dios sus cantos y sagas. Aunque la colección en sí fue reunida —y tal vez escrita— en la vecindad de Jerusalén, en tiempos de Sa-lomón, sus fragmentos separados habían estado circulan-do en la forma oral durante generaciones. La tierra y el modo de vida que describen sugieren los días en que los judíos se estaban convirtiendo en un pueblo unido.
Ninguna otra tradición del Cercano Oriente deriva la raza humana de una sola pareja'. Y ninguna obra antigua, que se conozca hoy, contiene esta explicación sobre el modoen que la mujer vino a ser. Parece probable que, cuando el autor bíblico la recibió, poseyera un climax que él ha suprimido para hacer que fluya suavemente al siguiente episodio: el pecado del hombre y la mujer. Por tanto, el tratamiento es original, aunque ciertos detalles de acción y de ambiente se encuentren también en los mitos babi-lónicos. Lo que esto sugiere no debe infundirnos temor.
Nosotros explicamos el mundo que vemos —las nubes, el hielo de los ríos, la primavera, y la oscuridad— mediante leyes o fórmulas matemáticas. Estas, a su vez, nos hacen filosofar acerca de una causa esencial, que al menos debe ser tan personal como nosotros mismos. Supuesto que nuestras fórmulas y filosofías sean ciertas hasta donde ellas llegan, las verdades que abordan carecen de forma y de color. Por alguna razón son independientes del tiem-po. Dadas ciertas condiciones, e = me2 es válido ayer, hoy y siempre. Los pueblos del cercano Oriente sabían también que existe algo detrás del mundo que palpamos y vemos, algo exactamente tan real, algo que explica su existencia y movimiento. Pero su modo de percibir esta realidad trascendente era diferente al nuestro. Nosotros deducimos su presencia por lógica; ellos simplemente la veían actuar en el mundo4 . Pero darse cuenta de su pre-sencia no era lo mismo que poder describirla y, al igual que nosotros, tenían que recurrir a los símbolos. Su idea de la realidad trascendente no se expresó en fórmulas o combinaciones de términos científicos, sino por las relaciones entre personas. Explicaban el mundo de for-mas, colores y épocas, por medio de relatos cuyos argumentos y personajes eran independientes del tiempo
DOWNLOAD HERE>>>


sábado, 14 de mayo de 2011

Matrimonio Sobre la Roca: Lección Nº 2- Posesión y Pureza


 
Curso Ministerial - Matrimonio Sobre la Roca: Lección Nº 2- Posesión y  Pureza
Tipo de Archivo: WinRAR.Zip | Tamaño: 48MBytes | Idioma: Spanish |Categoría: Consejería Pastoral
Información 

Mat 7:24-27 Cualquiera, pues, que  oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina.
Con estas palabras, Jesús nos habla claramente sobre la importancia no sólo de oír sino de practicar los principios que rigen la vida matrimonial, con el fin de crear una base sólida que permanezca firme frente a las tormentas que soplan contra el matrimonio.
Construir una relación de pareja estable no se logra de un día para otro, ni surge por casualidad. En realidad comienza cuando decidimos hacer del bienestar del matrimonio una de nuestras más altas prioridades.
Algunas encuestas han revelado que aquellos matrimonios duraderos, sanos y llenos de vida tienen las siguientes tres características en común. 
Primero, la relación matrimonial está muy por encima de todo en sus actividades diarias.
Segundo, ambos esposos se comprometen a continuar creciendo y a cambiar juntos. 
Tercero, la pareja se esfuerza por mantenerse en unidad.
La Biblia nos brinda una analogía muy valiosa al respecto: la relación de Jesús con una Iglesia Gloriosa como modelo perfecto del matrimonio fundado sobre la Roca que es Cristo; las Bodas del Cordero con su novia, la Iglesia sin mancha ni arruga, que será el evento culminante en la historia de la humanidad. El sólo hecho de pensar en este gran magno evento debería llevarnos a meditar en la condición actual de nuestra vida matrimonial.
Los acontecimientos que están ocurriendo en el mundo, nos hablan claramente de que Jesús viene pronto por su esposa la Iglesia. La invitación está hecha, el día de la Boda se acerca. No sabemos cuando Jesús vendrá y cuándo será la gran Cena de las Bodas del Cordero. Lo que sí sabemos es que es inminente y que tenemos la responsabilidad de estar preparados para ese momento. Eso implica revisar nuestra vida, lo cual incluye nuestro matrimonio, razón por la cual es oportuno meditar en cuál es la condición actual de nuestra relación de pareja.
La Biblia nos ayuda a dar respuesta a tal planteamiento:
Efesios 5:22-34 Las esposas deben estar sujetas a sus esposos como al Señor. Porque el esposo es cabeza de la esposa, como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo; y él es también su Salvador.
El apóstol Pablo nos habla aquí sobre el orden de Dios para el matrimonio. Y establece diferentes roles, lo que no se relaciona con el valor del hombre y de la mujer, en lo que no hay diferencia sino equilibrio, sino que es un asunto de orden, de autoridad, de responsabilidad y de dirección.
Efesios 5:24 Así que, como la iglesia está sujeta (del griego jupotásso; subordinada, sometida, bajo autoridad) a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo.
Pablo establece así el principio fundamental de la sumisión, un mandato que no tiene excepciones, sino que es aplicable a toda esposa cristiana. Un principio que hace viable y funcional la relación de pareja. La sumisión no es algo que el esposo demanda o exige, sino una actitud que la esposa cristiana ofrece de forma voluntaria y amorosa, entendiendo que es el hombre a quien Dios ha puesto por cabeza sobre ella.
Ahora veamos la medida del amor genuino y verdadero.
Efesios 5:25 Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amo a la iglesia, y se entrego a sí mismo por ella.
Aunque la autoridad del esposo ya ha quedado establecida, la atención se centra aquí en la responsabilidad suprema del esposo para con su esposa: amarla con el mismo amor sin reservas, sin egoísmo y sacrificado que Cristo tiene por su Iglesia.
Amad es tomada del griego ágape, que se usa para describir el amor de Dios por su Hijo, por la humanidad y por todo aquel que ha creído en Jesús como el hijo de Dios. El amor ágape, solo se conoce por las acciones que produce. Y tuvo su más perfecta y máxima expresión entre los hombres en la persona de Jesús, quien se entregó por nosotros al morir en una cruz.
Efesios 5:26 para santificarla, (del griego jagiázo; consagrar, apartar para Dios) habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra.
El esposo ha de amar a la esposa como Cristo ama a la Iglesia, con un amor purificador, que surge cuando ambos se afianzan en la Palabra de Dios. La Palabra produce un efecto de limpieza en quienes se exponen a ella con un corazón sincero, así que consideremos ahora: ¿Cuándo fue la última vez que abrió usted la Biblia para compartir una Palabra que fue de bendición para su pareja como un bálsamo purificador?
Efesios 5:27-28 a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha. Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.
Ama a la esposa como a su mismo cuerpo es una de las descripciones más profundas y gráficas de la unidad que caracteriza al matrimonio cristiano fundado sobre la Roca que es Cristo. Un marido cristiano cuida a su esposa con la misma devoción natural con la que se cuida a sí mismo. Lamentablemente hoy es tal la exaltación de la sensualidad, que hay maridos que llegan a amar más su propio cuerpo que a su esposa.
Por su parte la esposa cristiana, como la Iglesia para el Señor, ha de ser y estar hermosa para el esposo, es el ama del hogar que edifica con sabiduría, cuenta con los atributos del carácter que el novio desearía: es amorosa, es fiel, es toda una dama.
El novio, Jesús mismo, desea nuestro amor genuinamente. Que la expresión de nuestros sentimientos y emociones sean solo para Él y para nadie más. Él desea ver en nosotros un compromiso fiel y verdadero, caracterizado por la sujeción. Jesús, el novio, desea que la novia, su Iglesia, lo ame además de una manera apasionada por lo que Él es y no sólo por lo que ha hecho por ella. En nuestra relación de pareja hemos de hacer lo mismo: amarnos por lo que somos y no por lo que hacemos el uno por el otro.
Cantares 1:2 ¡Oh, si él me besara con besos de su boca!
Analicemos algunos de los problemas que los matrimonios enfrentan hoy en día.
  • Estar en otro país implica que quizá alguno de los dos o los dos, extrañan a familiares, amigos y esto crea conflictos que se deben resolver.
  • Vivir juntos físicamente pero separados emocionalmente. Permanecer lejos uno del otro aún viviendo bajo el mismo techo.
  • Estar tan desconectados entre sí que llegan a experimentar la sensación de soledad.
  • Vivir aislados, incomunicados, deprimidos, sin entusiasmo por lograr la supervivencia de la relación matrimonial.
Ante estas y otras realidades que viven algunos matrimonios es conveniente que como parejas hagamos un inventario de nuestro matrimonio. Al hacer un inventario de nuestro matrimonio, podemos descubrir y escribir juntos los valores que aún existen en la relación y de los cuales podemos echar mano para reavivarla. Y entonces hagamos un compromiso de trabajar juntos. Ciertamente podemos escuchar o leer un tema que intenta enriquecer nuestra relación de pareja, pero sin el trabajo en equipo será imposible llegar a la meta de la unidad.
Los siguientes consejos pueden ayudarle a hacer de su matrimonio no sólo una emocionante aventura para conocerse más íntimamente como pareja, sino a reconocer que el matrimonio fue una de las mejores ideas de Dios para nosotros.
Las buenas intenciones no cambian nada y además no son suficientes. Sólo se logran resultados cuando decidimos genuinamente hacer de nuestro matrimonio una de nuestras principales prioridades. Tomen un tiempo y oren juntos. Hagan un compromiso delante de Dios de invertir, como ocurre con todas las cosas que valen la pena, tiempo, dinero y todo su esfuerzo. Así podrán enriquecer su matrimonio.
TRES CONSEJOS BÁSICOS PARA ESTABLECER SU MATRIMONIO SOBRE LA ROCA.
1) Dispónganse y comprométanse al diálogo.
Diálogo se define como la charla entre dos o más personas que expresan sus ideas, sentimientos y emociones. Mientras uno habla, el otro escucha con atención.
Prov 10:19 En las muchas palabras no falta pecado; Mas el que refrena sus labios es prudente.
Prov 12:18 Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada; Mas la lengua de los sabios es medicina.
Procuren desarrollar la habilidad de escucharse el uno al otro y no se enfoquen en pensar cómo responderán cuando el otro termine de hablar. Para dialogar sobre problemas del hogar o de los hijos hay que permanecer en paz, evitando usar el tema para atacarse mutuamente.
Ahora tomen un tiempo y juntos hagan el compromiso de dialogar.
2) Examinen la condición actual de su matrimonio.
Pro 27:23 Sé diligente en conocer el estado de tus ovejas, Y mira con cuidado por tus rebaños.
Tal vez se sientan solos y aislados. Es posible estar casado y aún sentirse solo, tener una cercanía física pero una lejanía emocional, ocupados ambos en lo superficial y dejando de lado lo importante que es hablar de ustedes mismos.
Ahora hagan sus propias anotaciones y examinen cuál es la condición de su matrimonio.
3) Piensen y trabajen juntos, poniendo manos a la obra.
Pro 22:29 ¿Has visto hombre solícito en su trabajo? Delante de los reyes estará; No estará delante de los de baja condición.
Pro 6:6 Ve a la hormiga, oh perezoso, Mira sus caminos, y sé sabio.
A través del diálogo, descubran características positivas que desearían ver en su matrimonio y establezcan metas alcanzables y realistas, haciendo juntos el firme propósito de alcanzarlas, según sea el caso, en una semana, un mes, un año. Avancen hacia cada una de ellas, un paso a la vez. Cada que alcancen una meta, anímense mutuamente a seguir adelante.
Como sugerencia final, hagan un plan de ayuda mutua que incluya desde los quehaceres del hogar hasta el cuidado de los hijos, distribuyan adecuadamente su tiempo de tal forma que al final del día puedan tomar un tiempo de calidad como pareja. Este plan se hace más necesario cuando los dos trabajan.
Y una aclaración: Quizás las cosas no sucederán como se planearon, habrá ocasiones en que estarán demasiado cansados para conversar, pero sigan adelante y procuren por lo menos una vez a la semana pasar un tiempo sólo para ustedes, para una cita romántica, para una conversación fuera de casa o para un descanso en pareja.
DOWNLOAD HERE>>>
https://story.ad/site/file_download/smartpublicity1467919561neTNIrOs.html