viernes, 1 de noviembre de 2013

Gramática para el estudio de Mateo griego: Ayuda Ministerial

Por eso, el que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6


 
Tipo de Archivo: PDF | Tamaño: MBytes | Idioma: Spanish | Categoría: Capacitación Ministerial
Mateo
Mateo 1
2     T167 El artículo τόν se usa para determinar el caso de los nombres propios que se hallan en los vv. 2 y sigs. (se usa con nombres propios indeclinables, pero sin el significado usual).
6     R501 Τῆς τοῦ Οὐρίου se usa como un genitivo de relación, que se refiere a la esposa de Urías.
11     R501 Βαβυλῶνος se usa como un genitivo de complemento directo: a Babilonia (que conduce a —T212).
17     R576 No hay nada que no sea griego en la construcción: ἀπὸ Ἀβραάμ ἕως Δανίδ (la preposición ἀπό tiene aquí un significado de tiempo; significa: de, o desde).
18     R1184 Δέ puede introducir un nuevo tema y no expresar una idea adversativa: Ahora, el nacimiento de Jesucristo.
     T78 Πρὶν ἤ con el infinitivo significa: antes que se juntaran.
     T176 Se puede omitir el artículo con el término de una preposición y el término sigue siendo definido. En este caso se refiere al Espíritu Santo (comp. Luc. 1:15 y M113).
19     R1128 Los participios ὤν y θέλων tienen un sentido causal: porque era justo y no quería.
20     R418 El verbo aparece entre el sustantivo y el adjetivo en ἐκ πνεύματος ἐστιν ἁγίου, para dar unidad a la cláusula.
     TGr19 Puesto que πνεύματός ἐστιν ἁγίου no tiene artículo, no se refiere a la tercera Persona de la Trinidad, sino a un poder santo e indefinible de Dios [Editor. Note que esto ocurre en una frase prepositiva en la cual el término sigue siendo definido; comp. 1:18 y el comentario sobre Luc. 1:15 y 35.]
     T77 En este versículo esperamos la prohibición en presente: deja de temer, en vez del aoristo: no temas nunca (μὴ φοβηθῇς significa: no te abstengas por temor —BD336 [sec. 3]).
     T151 Τὸ ἐν αὐτῇ γεννηθέν significa: el hijo de ella que no ha nacido.
21     R575 En la preposición ἀπό que aparece aquí está presente la idea de, o lejos de.
     R679 El pronombre αὐτός es enfático: porque El mismo salvará.
     R874 El futuro tiene sentido volitivo καλέσεις llamarás.
22     R534 Ὑπό se usa para referirse al agente directo y διά para referirse al agente intermedio: lo que el Señor ha hablado por medio del profeta.
     R1428 El participio λέγοντος sencillamente significa: cuando dice.
     B222 El escritor del primer Evangelio nunca usa ἵνα para expresar resultado real o imaginado; y el hecho de que él empleó ὃπως (que nunca es consecutivo) de manera intercambiable con ἵνα (la cláusula que indica propósito divino —R998) indica, de un modo especialmente claro, que por medio de esta frase intenta por lo menos expresar propósito.
     M15 En la frase τοῦτοπληρωθῇ, el tiempo perfecto denota que el evento está registrado en la tradición cristiana permanente. Este tipo de interpretación consideró la narrativa del A.T. como contemporánea.
23     M17 Ἐστίν puede considerarse como un verbo independiente, con un participio explicativo (y no perifrástico). [Editor. Esta cláusula puede traducirse: que significa: Dios con nosotros.]
Mateo 2
1     R408 Ἀνατολῶν se usa como un plural idiomático; significa: oriente (las direcciones generalmente se dan en plural —T26).
2     R1062 El infinitivo tiene la idea de propósito: vinimos a adorar.
     TGr26 La pregunta aquí debe traducirse: ¿Dónde está el recién nacido rey de los judíos? Los magos no preguntaron: ¿Dónde está el que ha nacido para ser rey de los judíos?
     T172 El sustantivo singular ἀνατολῇ con artículo aparentemente no se refiere a un punto cardinal, sino que significa: en su aparición, en los vv. 2 y 9.
     T189 Note la posición del pronombre αὐτοῦ (enfático: su estrella).
3     B439 El participio ἀκούσας tiene un sentido causal: porque el rey Herodes oyó esto.
4     R795 En los Evangelios, ὁ Χριστός usualmente es un adjetivo verbal que significa: el Ungido, el Mesías.
     M7 Γεννᾶται se usa como un presente futurista: ¿ha de nacer?
     TGr27 Sorprendentemente, el verbo ἐπυνθάνετο está en tiempo imperfecto, lo cual significa que difícilmente esperaba Herodes que su demanda fuera cumplida. Las demandas tentativas se describen con frecuencia en el tiempo imperfecto. El rey Herodes sospechaba que podría haber algún complot contra él, especialmente de los que estaban más cerca de su trono, y su sospecha sale a relucir en el informe de Mateo: ¿Dónde? Pero espero que ustedes no me lo dirán.
5     R1109 Aunque el participio ἡγούμενος no tiene artículo, aquí se usa como un sustantivo (príncipe —T151).
6     T48 Uno no debe introducir demasiado sentido consecutivo en el pronombre ὅστις (probablemente sea más exacto traducirlo mediante el pronombre relativo quien que mediante que).
7     R530 Λάθρᾳ se usa como un dativo de manera: secretamente.
8     R860 El participio de aoristo πέμψας se refiere a una acción que es simultánea con la del verbo principal (πέμψας εἶπεν significa: enviados con las palabras —T156).
9     T279 Ἐπάνω tiene aquí un uso adverbial: delante de.
10     B439 El participio ἴδοντες tiene aquí un sentido causal: porque vieron la estrella, se regocijaron.
     M32 Ἐχάρησαν χαρὰν μεγάλην σφόδρα significa: se regocijaron con gozo muy grande.
11     M68 El participio con la siguiente frase prepositiva, ἐλθόντες εἰς τὴν οἰκίαν, sencillamente significa: entrando en la casa.
13     R1088 Τοῦ con el infinitivo ἀπολέσαι se usa para expresar propósito (los ejemplos de ésto aparecen principalmente en Mateo, Lucas y Hechos).
     BD321 Φαίνεται se usa como un presente histórico: un ángel apareció.
14     T235 El genitivo νυκτός significa: durante la noche.
15     R636 Ὑπό se usa para referirse al agente directo, y δία, para referirse al agente intermedio (comp. 1:22).
     R1428 Λέγοντες sencillamente significa: cuando dijo.
     B222 La cláusula introducida por ἵνα expresa propósito (comp. 1:22).
16     R834 Ἐθυμώθη se usa como aoristo de ingreso: llegó a airarse.
20     R392 El plural τεθνήκασιν esconde a propósito la identidad de la persona a quien se refiere (Herodes el grande; este es el plural de generalización —BD141).
     B127 El participio de presente οἱ ζητοῦντες se usa como un imperfecto para denotar una acción continuada que antecede a la del verbo principal (comp. M206; los que estaban buscando, han muerto).
     T75 El presente de imperativo πορεύου aparece aquí, donde uno esperaría el aoristo: vete.
22     R574 Ἀντί tiene la idea de sucesión, como un hijo sucede al padre en el trono.
23     TGr27 La declaración: sería llamado un nazareno, no es de hecho parte de ninguna profecía; aun puede ser una glosa de algún escriba o un comentario del evangelista (preferiblemente esto último).
     T7 El plural τῶν προθητῶν sencillamente se refiere a Oseas.
Mateo 3
2     R895 El perfecto del verbo ἤγγικεν se refiere a un acto que es duradero-definido, con una mirada retrospectiva: está cerca.
4     T41 En αὐτὸς δὲ ὁ Ἰωάννης, el pronombre está seguido por un sustantivo que lo resume: Juan mismo (enfático —BD277[3]).
7     R213 Γεννήματα tiene el sentido de criaturas vivientes.
     R602 La preposición ἐπί expresa propósito: para el bautismo.
     R848 El verbo ὑπέδειξεν puede traducirse: ha advertido.
     T66 Los imperfectos (vv. 4 y sigs.) contribuyen a formar un cuadro vivo en el fondo del cual Juan pronuncia sus reprensiones (aoristo).
9     R834 Δόξητε se usa como un aoristo de ingreso (comp. Luc. 3:8): no comiencen a pensar.
     BD392(1a) El infinitivo λέγειν es complementario del verbo principal: no se formen la idea de decir.
10     R881 El verbo en presente κεῖται tiene un sentido perfectivo: el hacha está puesta a la raíz del árbol (es decir; ha sido colocada allí; comp. T62).
     M107 Πᾶν οὖν δένδρον μὴ ποιοῦν probablemente signifique: todo árbol que no (participio atributivo), y no: todo árbol cuando (πᾶν δένδρον significa: cualquier árbol —T199)
11     R520 La frase prepositiva ἐν ὕδατι se usa como un locativo: en agua.
     R679 El pronombre αὐτός aquí es enfático; se refiere a ὁ ἐρχόμενος.
     T266 Parece que εἰς tiene un sentido causal en este versículo: por causa del arrepentimiento.
12     R533 Πυρὶ ἀσβέστῳ puede usarse como un locativo o instrumental (probablemente con referencia al juicio que tendrá lugar en la venida del Mesías y por causa de ella [comp. v. 11]).
     R575 El sustantivo compuesto ἀποθήκη significa: un depósito donde se guardan algunas cosas.
     R581 Aquí el verbo compuesto διακαθαριεῖ tiene un sentido perfecto: él limpiará por completo.
13     T141 Τοῦ con el infinitivo denota la idea de propósito: para ser bautizado.
14     R234 En la frase πρός με, el pronombre es enfático (comp. T39).
     R885 En el verbo διεκώλυεν el tiempo imperfecto se refiere a una acción que comenzó, pero se interrumpió (comp. B23: deseó impedir —T65).
     T334 En este versículo, καί tiene el sentido de sin embargo, donde esperamos καὶ μήν, ο καίτοι.
     H302 En el verbo compuesto que aparece aquí, διά tiene una idea perfectiva; en realidad Juan iba a detenerlo por completo.
16     T25 Οἱ οὐρανοί en los vv. 16 y sigs. es un uso excepcional del plural; generalmente se usa el singular para indicar el sentido material del cielo.
17     R372 El adjetivo verbal ἀγαπητός tiene la idea de perfección: amado.
     M7 El verbo aoristo εὐδόκησα significa: yo apruebo (es decir, estoy complacido con; se refiere a una reacción inmediata; comp. 2 Ped. 1:17).
Mateo 4
1     R990 El infinitivo simple πειρασθῆναι tiene la idea de propósito: para ser tentado.
2     R1112 El participio de aoristo νηστεύσας denota la razón por la cual tenía el hambre que se expresa por el verbo principal: porque ayunó.
3     R871 Las frases υἱὸς τοῦ θεοῦ y ὁ υἱὸς τοῦ θεοῦ (Juan 1:49) no significan lo mismo. Υἱός no tiene artículo aquí porque es indefinido (υἱός no tiene artículo en los vv. 3 y 6 porque precede al verbo —T183). [Editor. Generalmente cuando un predicado nominal precede al verbo, no tiene artículo, aunque sea definido, como parece que ocurre aquí: El Hijo de Dios; comp. 14:33 y 27:40.]
     B200 Ἵνα se usa para introducir una cláusula de complemento directo después del verbo de exhortación εἰπέ: ordena que.
4     R604 La preposición ἐπί tiene aquí la idea de fundamento: vivir de pan.
     B68 El verbo ζήσεται parece que se usa como un futuro de imperativo (volitivo, el hombre no vivirá).
5     R756 Τὸ πτερύγιον no debe traducirse: un pináculo. Todo lo que se quiere decir descansa en el artículo; el ala del templo desde donde se mira hacia el abismo.
7     R874 Ἐκπειράσεις se usa como un volitivo futuro: no tentarás.
     R895 El verbo en perfecto γέγραπται significa: se escribió (acción definida) y aún está escrito (acción duradera).
9     R705 Sin duda hay alguna diferencia entre ταῦτα πάντα (aquí) y πάντα ταῦτα (en 6:32). En la primera expresión, πάντα es una especificación más cercana de ταῦτα; en la segunda, πάντα se señala de una manera demostrativa por medio de ταῦτα.
11     R847 Los tiempos son interesantes en este versículo: ἀφίησιν se usa como un presente histórico; προσῆλθεν (aoristo) comienza la acción; mientras que διηκόνουν (imperfecto) la continúa: los ángeles vinieron y le servían.
14     R222 Ἵνα denota propósito (comp. 1:22).
15     R500 El genitivo θαλάσσης significa: por el mar (al mar —T247).
18     R1190 En este versículo, γάρ introduce una explicación por medio de un apéndice al hilo del pensamiento.
23     T51 El verbo compuesto περιάγω significa: ir por, recorrer.
     T211 Τῆς Βασιλείας se usa como un genitivo de complemento directo: acerca del reino.
Mateo 5
1     R756 Τὸ ὄρος se refiere a la montaña, no a una montaña (la gran colina que se erguía como un trono detrás del mar).
2     R885 En el verbo ἐδίδασκεν, el tiempo imperfecto se refiere al inicio de la acción y significa: comenzó a enseñar.
3     R443 Las bienaventuranzas (en los vv. 3–12) no tienen conectivos en absoluto, y se expresan de la manera más efectiva por causa del asíndeton (es decir, la falta de conjunciones).
     M46 ¿Qué significa οἱ πτωχοὶ τῷ πνεύματι? ¿Se refiere a un sentido espiritual; comp. Stg. 2:5 (τῳ πνεύματι se usa como un dativo de referencia —T221; un locativo —R523)? [Editor. En este versículo, πνεῦμα parece que se refiere a la vida interior del hombre (comp. Mar. 2:8 y Luc. 1:47). Parece que toda la frase significa: los que son pobres en lo que se refiere a su vida interior; esta actitud está en contraste directo con el orgullo farisaico basado en sus riquezas espirituales.]
7     R872 El verbo en futuro ἐλεηθήσονται tiene un sentido de ingreso: obtener misericordia.
8     T220 El dativo τῇ καρδίᾳ se usa como un dativo de referencia (locativo —R523). [Editor. Los significados resultantes: con referencia al corazón, y en la esfera del corazón, tienen connotaciones similares.]
10     T85 El tiempo perfecto se usa en οἱ δεδιωγμένοι por la tendencia a conectar una acción pasada con sus consecuencias en el presente: quienes son perseguidos.
12     M74 La preposición tiene un sentido de tiempo en τοὺς πρὸ ὑμῶν: los que fueron antes de ustedes.
13     R590 La preposición que aparece en ἐν τίνι tiene un sentido instrumental: ¿con qué?
     BD390(3) Aquí el infinitivo tiene la idea de propósito: ser echada afuera y hollada.
15     R757 En τὸν μόδιοντὴν λυχνίαν, el artículo distingue el almud y el candelero que están en el salón.
     R1183 Se puede agregar así después de la conjunción en καὶ λάμπει (καί tiene un sentido consecutivo: y así —BD442[2]).
16     T72 Λαμψάτω parece que se usa como un aoristo de ingreso: que la luz de ustedes comience a brillar.
17     R833 El verbo ἦλθον se usa como un simple aoristo que expresa como un sólo hecho una acción realizada durante un tiempo (sólo para indicar el aspecto definido); describe el propósito de la misión de Cristo.
     R857 Los infinitivos καταλῦσαι y πληρῶσαι se usan como aoristos efectivos (para destacar el fin de la acción): no vine para destruir, sino para cumplir.
     TGr32 La prohibición aquí, está en tiempo aoristo y significa: No piensen ni por un momento que he venido a destruir la ley.
18     R405 Aquí el verbo singular παρέλθῃ con el sujeto compuesto destaca la totalidad.
     BD474(sec. 1) Ἕν está aquí en una posición enfática; el énfasis está en el número, debido a la repetición.
19     T107 El tiempo aoristo de la cláusula relativa se refiere a una acción que antecede a la del verbo principal: será llamado pequeño, el que (para ese tiempo haya) suavisado.
20     R666 Note la elipsis en este versículo: que la de los escribas y fariseos (el uso de πλεῖον intensifica la comparación —BD246).
21     R844 El verbo en aoristo ἠκούσατε debe traducirse: Ustedes han oído (similar al perfecto: Ustedes han oído que se dijo a los antiguos; se refiere sin duda a las frecuentes ocasiones en las cuales ellos habían oído tales enseñanzas en la sinagoga —B52).
     R889 Οὐ φονεύσεις se usa como un futuro volitivo-duradero en los vv. 21, 27, 33 y 48: No matarás (una prohibición).
     MT186 El aoristo de subjuntivo φονεύσῃ tiene el sentido de un futuro perfecto: el hombre que ha cometido asesinato.
24     R428 La ausencia de una conjunción entre ὕπαγε y διαλλάγηθι da vida y movimiento a la expresión: vé, reconcíliate primero.
     TGr30 La última parte de este versículo debe traducirse: reconcíliate primero, una vez y por todas (aoristo) con tu hermano, y entonces ven y ofrece (presenta) tantas ofrendas como quieras (entonces puedes reanudar la acción —BD336[3])
25     B330 Ἕως ὅτου es en efecto una conjunción compuesta que tiene la misma fuerza de la conjunción simple ἓως (mientras —T110).
     BD353(1) Parece que el participio εὐνοῶν es perifrástico, pero en realidad es adjetival (es perifrástico —MT249). [Editor. Parece que hay poco apoyo para separar el participio del verbo, al tomar al participio como adjetival, ya que el participio depende del verbo y juntos significan: hacerse amigos.]
28     R1003 Πρὸς τό con el infinitivo puede expresar la idea de propósito o la de resultado (de propósito, a menos que sea un explicativo de βλέπων —R1075; simple acompañamiento, y —T144; con respecto a —BD402[5]; explica a βλέπων —MT218). [Editor. En este contexto, πρὸς τό con el infinitivo se refiere al resultado que surge de un conjunto de circunstancias, con el significado resultante: el que mira a una mujer de tal manera que se le despierte el deseo de tenerla (comp. el uso de πρός con el acusativo en 1 Cor. 14:26; Col. 2:23 y Juan 4:35). En esta interpretación es un explicativo de βλέπων.]
     T73 Ἐμοίχευσεν se usa como un aoristo gnómico, es decir, se refiere a un hecho bien conocido.
29     R992 Aquí la cláusula introducida por ἵνα se usa como el sujeto de συμθέρει (comp. B214): para ti es mejor que
     R1018 La condición expresada por εἰ σκανδαλίζει se considera como una realidad presente (comp. Mar. 9:43–47): puesto que.
     T32 Καὶ μή expresa la idea de comparación (comp. BD442[1]).
     T42 El pronombre personal simple aparece en la frase ἀπὸ σοῦ, en vez de un pronombre reflexivo: de ti mismo.
31     MT186 Ἀπολύσῃ no denota tanto poner en práctica, como la determinación de hacerlo.
32     M103 Πᾶς ὁαὐτοῦ significa: cualquiera que se divorcia de su esposa (comp. la cláusula relativa).
     T107 Parte de este versículo debe traducirse: el que se divorcia de su esposa la hace una adúltera (es decir, el que se ha divorciado); el participio de presente ἀπολύων se refiere a una acción anterior a la del verbo principal.
34     R1094 El infinitivo de aoristo, μὴ ἀμόσαι expresa un mandato indirecto: pero yo les digo que no juren en absoluto.
     TGr31 Jesús usa el tiempo aoristo para prohibir que se jure por el cielo, etc. Por alguna razón, sus oyentes probablemente ya habían renunciado al juramento (a través de la enseñanza de Juan el Bautista); el mandamiento de Jesús ordenaba que ellos nunca volvieran a esa práctica.
     BD445(1) La repetición de negativos en este contexto tiene el siguiente signficado: no juren en absoluto … (en particular) ni … ni … (es decir, aquí μήτε equivale a μηδέ).
35     R594 Después de ὀμόσαι, εἰς con el acusativo tiene el sentido de un dativo (por —T255).
37     M42 El genitivo en τὸ δὲ περισσὸν τούτων se usa para expresar comparación; significa: cualquier cosa que sea más que esto (es decir, en exceso).
38     R573 En ὀφθαλμὸν ἀντὶ ὀφθαλμοῦ hay una equivalencia exacta (ojo por ojo).
39     T77 El aoristo de imperativo στρέψον se usa como un precepto válido hasta la venida de Cristo (comp. BD337[2]; comp. también con los vv. 40 y 42).
42     R809 El aoristo de infinitivo δανίσασθαι significa: tener dinero que le ha sido prestado (es decir, tomar prestado).
43     R646 El adverbio πλησίον aparece con el artículo y se usa como un sustantivo, y significa: prójimo.
     R943 El futuro de indicativo ἀγαπήσεις y el presente de imperativo ἀγαπᾶτε (v. 44) parecen equivalentes (comp. BD362).
44     T86 Las citas del A.T. a menudo usan el futuro para expresar mandatos (comp. v. 43); pero los propios mandatos de Jesús emplean el imperativo.
45     R801 El verbo ἀνατέλλει es estrictamente causativo (hace que salga —T53; paralelo de hace que llueva —BD309[1]).
46     R1181 En καὶ οἱ τελῶναι, y καὶ οἱ ἐθνικοί, la conjunción καί tiene un sentido de ascenso: también.
     M122 La pregunta final de este versículo debe traducirse: ?No hacen lo mismo los …? ((es decir, la misma cosaαὐτό).
47     MT186 El aoristo de subjuntivo tiene el sentido de un futuro perfecto: si ustedes sólo han saludado (es interesante el cambio del aoristo al presente —R1019).
Mateo 6
1     R1003 Πρὸς τό con el infinitivo expresa aquí la idea de propósito (para ser vistos por ellos —M140).
     R1172 Μήγε es un intensivo compuesto negativo (γε aparece aquí simplemente para fortalecer las otras palabras —M164).
     H471 En los vv. 1 y sigs., δικαιοσύνην ποιεῖν significa: dar limosna (semítico).
2     R687 En este versículo se usa σοῦ en vez de un pronombre reflexivo (comp. T42): delante de ti.
     R853 La prohibición en aoristo μὴ σαλπίσῃς significa: no comiences a tocar (por ningún motivo toques una trompeta delante de ti cuando des limosna —TGr32).
     R866 En los vv. 2, 5 y 16, la combinación del presente con sentido de aoristo y el uso perfectivo de ἀπό (en ἀπέχουσι) hace muy viviente la descripción: los hipócritas.
     MT186 El tiempo presente en ὅταν ποιῇς ἐλεημοσύνην tiene un sentido duradero: cuando estés dando limosnas.
4     T334 Καί parece que significa: porque (comp. Dan. 10:17; un uso consecutivo, semítico —H422).
5     R552 Algunos gramáticos consideran que en φιλοῦσινπροσεύχεθαι, podemos traducir: orar alegremente. ¿Pero qué ventaja tiene esto sobre aman el orar, son aficionados a orar?
     R874 Ἔσεσθε se usa como un futuro volitivo (comp. 1:21): ustedes serán.
     R963 La oración causal con ὅτι es coordinada (y cuando tú oras, no seas como los hipócritas; porque ellos aman estar en pie y orar en las sinagogas y … [comp. el v. 16, donde en una oración similar, se usa γάρ en vez de ὅτι] —B231; comp. Luc. 11:32).
6     R1186 Note el constraste indicado por σὺ δέ.
     T77 El aoristo de imperativo εἴσελθε se usa como un precepto válido hasta la venida de Cristo, (comp. 5:39).
7     R589 La preposición ἐν aquí indica la causa (por [medio de] sus muchas palabras —M77; por causa de —T253). [Editor. Hay una línea muy fina entre el uso instrumental y el uso causal de ἐν, a menudo se funden en uno, como ocurre en este caso.]
9     R459 Note que el nominativo está aquí en aposición con el vocativo (comp. T35): Nuestro Padre, el que está en el cielo.
     BD277(1) Ὑμεῖς aparece aquí con el imperativo para dar algún grado de hincapié (en contraste con los gentiles).
10     R1181 Aquí καί significa: precisamente así (o así también).
     T75 El aoristo de imperativo ἐλθέτω significa: continúe viniendo (el reino ya está presente como un grano de semilla).
11     BD123(1) La mejor explicación de ἐπιούσιος consiste en suponer que hay una sustantivación de ἐπὶ τὴν οὖσαν (inserte ἡμέραν); con el siguiente significado: (determinado) para cada día.
     M135 Lucas usa el presente de imperativo δίδου (11:3), mientras que Mateo usa el aoristo δός porque agrega σήμερον: danos hoy.
12     T37 El pronombre ἡμεῖς tiene aquí un hincapié definido.
     BD453(2) Ὡς tiene un sentido causal (comp. R963): como, o porque.
13     R653 Τοῦ πονηροῦ no se refiere al mal en general, sino que aparentemente quiso decir διάβολος (es decir, el maligno).
16     B457 El participio νηστεύοντες se usa como el sujeto del verbo φανῶσιν (no sólo se los debe tener en cuenta a ellos, sino también su ayuno; comp. v. 18).
17     T37 El pronombre σύ aquí tiene énfasis.
18     R589 La frase prepositiva con ἐν tiene la idea de manera: quien ve secretamente.
     BD414(3) El participio νηστεύων se agrega al sujeto del verbo (comp. v. 17): Para que los hombres no vean que ayunas.
19     R853 El tiempo presente que se usa en la prohibición μὴ θησαυρίζετε indica que ellos ya estaban haciendo tesoro en la tierra.
22     R768 Cuando el artículo aparece con el sujeto y el predicado nominal, ambos son definidos, se tratan como idénticos, son intercambiables, como ocurre en este caso (el predicado nominal [ὀφθαλμός] tiene el artículo por cuanto es un ejemplo notable: Sólo el ojo es la luz del cuerpo —T183).
24     R573 El verbo compuesto ἀνθέξεται tiene un significado interesante: adherirse a, aferrarse a, agarrarse uno mismo de frente con.
25     R539 Τῇ ψυχῇ se usa como un dativo de ventaja: por la vida de ustedes.
     R853 La prohibición en presente μὴ μεριμνᾶτε implica que ellos ya estaban ansiosos.
26     R581 Realmente el verbo compuesto διαφέρω significa: estar aparte, diferir.
     BD246 El comparativo se intensifica por μᾶλλον: de más valor.
27     R1128 En el participio μεριμνῶν la idea de manera se desvanece en favor de la idea de instrumento: mediante la manifestación de la ansiedad (comp. B443: puede significar: por la preocupación, o aunque se preocupe [condicional] —MT230). [Editor. Parece que el participio está describiendo el medio por el cual no se logra ningún beneficio.]
28     T76 El aoristo de imperativo καταμάθετε se refiere a un mandato ahora, de una vez por todas: mirar los lirios, probablemente durante una caminata por los campos.
29     R807 Περιεβάλετο se usa aparentemente como un verbo en voz media directa: se vistió.
30     T115 La cláusula condicional con εἰ y el indicativo tiene aquí el significado siguiente: puesto que El la viste.
32     R403 Usualmente en el N.T. un sustantivo neutro plural que tenga un significado personal o colectivo tiene un verbo en plural (ἔθνη: los gentiles, comp. T313).
     R419 En πάντα ταῦτα, la primera palabra tiene el énfasis (comp. 4:9 y Luc. 12:30): todas estas.
34     TGr30 Jesús usa el tiempo aoristo en esta prohibición, porque lleva esta discusión particular a su final (comp. R853) y sus palabras se refieren al futuro. En este momento, su presencia y su discurso pudieran haber calmado los temores de ellos, y El les dice que no permitan que esto les vuelva a ocurrir. Nunca comiencen de nuevo a estar ansiosos. El mañana cuidará de sí mismo.
Mateo 7
1     R890 La prohibición en presente μὴ κρίνετε se usa para prohibir una acción que ya está ocurriendo: dejen de juzgar.
2     R590 La preposición ἐν tiene un sentido instrumental: con, o por.
3     R685 El pronombre posesivo (τῷ σῷ) aparece cuando pudo haberse usado un pronombre reflexivo (el adjetivo posesivo tiene un sentido reflexivo —T191): tu propio.
4     R931 En la primera persona singular, el N.T. siempre usa ἄφες, o δεῦρο con el subjuntivo exhortativo. (comp. Luc. 6:42: permíteme —MT176).
5     R1088 El infinitivo ἐκβαλεῖν tiene la idea de propósito: para sacar.
6     R1185 Μηδέ aparece aquí con un sentido de continuidad (continuando la negación): y no.
     TGr32 El tiempo aoristo se usa en una prohibición categórica: De ninguna manera den a los perros.
     BD111(3) El sustantivo κύνες se usa para designar hombres profanos.
11     R1053 En οἴδατε διδόναι, la construcción con el infinitivo significa: ustedes saben cómo dar.
     R1129 El contexto sugiere la idea adversativa (es decir es un participio concesivo) en πονηροί ὄντες (comp. T157): aun siendo malos.
12     R427 En este versículo, ὅσα ἐὰν θέλητε es una oración adjetival que describe a πάντα, lo cual da como significado: todas las cosas, las que ustedes deseen.
     T107 El tiempo presente es interesante en este versículo. El verbo principal significa: hagan así con ellos; y la cláusula relativa significa: lo que ustedes deseen que ellos les hagan (es decir, en el momento cuando ustedes estén haciéndoles esto a ellos).
13     B124 El participio de presente οἱ εἰσερχόμενοι tiene un sentido genérico y se refiere a una clase distinta de personas (comp. οἱ εὑρίσκοντες en el v. 14): los que están entrando por ésta.
14     BD299(4) Τί tiene un sentido adverbial: como (el mejor texto incluye ὅτι con un sentido causal —R730). [Editor. Parece que el texto que incluye τί cuenta con el mayor respaldo de los manuscritos. Parece que significa: ¡cuán estrecha es la puerta!]
15     R589 La preposición ἐν tiene la idea de acompañamiento: con.
17     M8 El tiempo presente se usa aquí con un sentido gnómico (para introducir una máxima o una generalización): Un buen árbol [siempre] da buen fruto (comp. B12).
20     R1148 La partícula ἄρα γε tiene aquí una fuerza de clímax (es claramente ilativa —R1190; comp. con 6:1): como resultado.
21     R752 Οὐ sólo niega aquí el significado de πᾶς. Jesús dijo que no todos entrarían (la dureza de οὐ πᾶς es mitigada por la cláusula positiva con ἀλλά que sigue, la cual contiene el significado principal de la oración —T196).
23     MT174 El verbo ἀποχωρεῖτε puede tener casi un sentido de ingreso aun en el tiempo presente: apártense.
     H469 En este caso parece que ὅτι significa: ciertamente.
24     R727 Πᾶςὅστις es indefinido: cualquiera que oye.
25     B202 En el verbo compuesto προσπίπτω, πρός tiene un sentido muy literal: caer ante.
26     T151 Πᾶς ὁ ἀκούων significa: cualquiera que oye.
27     R532 La preposición ἐπί tiene aquí un sentido causal: por, o a causa de esta enseñanza.
Mateo 8
2     R1018 El verbo presente en ἐὰν θέλῃς es de concepto futuro (un sentido viviente de necesidad presente —R1019; si tú deseas [pero con modestia lo dejo a tu disposición] —BD372).
     T65 El verbo imperfecto προσεκύνει significa petición.
4     R595 La preposición εἰς en este versículo tiene la idea de propósito: para.
     R854 El imperativo ὅρα se usa casi como una partícula que agrega fuerza a la declaración: Mira que no hables con nadie.
8     R653 El adjetivo neutro μόνον tiene aquí un uso adverbial y significa: sólo (contraste con μόνος en 14:23).
     R681 Note aquí la posición de μοῦ (comp. T189; los pronombres no enfáticos [enclíticos] tienden a ser colocados tan cerca del comienzo de la oración como sea posible —BD473[1]).
     M65 La preposición ὑπό se usa en este versículo con el acusativo para expresar un movimiento debajo: no soy digno de que entres bajo mi techo.
     BD442(2) Καί, en la última parte de este versículo, tiene un sentido consecutivo: entonces.
9     BD336(1) El aoristo de imperativo πορεύθητι significa: vé, mientras que el presente de imperativo ἔρχου puede significar: ven conmigo.
10     R844 Εὗρον debe traducirse: he encontrado (comp. 5:21).
11     R357 El verbo futuro en voz pasiva ἀνακλιθήσομαι no tiene sentido pasivo (es posible encontrar aquí un sentido pasivo —R819). [Editor. Generalmente en el N.T. la forma pasiva de este verbo sencillamente significa: yacer, o reclinarse para una comida, sin ninguna idea de voz pasiva. Aparentemente éste es el significado del verbo aquí (comp. 14:19 y Mar. 6:39)].
     T26 Los sustantivos que indican dirección generalmente aparecen en plural en el griego bíblico, como ocurre aquí con ἀνατολῶν y δυσμῶν: este y oeste.
12     T29 El adjetivo comparativo ἐξώτερος se usa en lugar de un verda dero superlativo: más lejanas.
     T173 En la última parte de este versículo, el artículo tiene la idea de: ese memorable, o el mayor de todos.
16     R533 Λόγῳ se usa como un dativo de medio: con una palabra.
     R653 Debe insertarse el sustantivo ὥρα con ὀψίας: la última hora.
17     R1428 El participio λέγοντος sencillamente significa: cuando dijo.
     T40 El pronombre αὐτός tiene la idea de énfasis: él mismo llevó.
19     R674 Εἷς se usa como artículo indefinido: un escriba (no debemos seguir la idea de Meyer [en el comentario respectivo], quien dice que εἷς nunca se usa en el N.T. con el sentido de τις; es peligroso introducir sutilidades exegéticas en el N.T., en contraste con la historia conocida del griego koiné —MT97; comp. M125).
20     R757 El artículo τοῦ, en ὁ υἱὸς τοῦ ἀνθρώπου, se usa con un sentido representativo de toda la clase; de modo que Jesús se llama a Sí mismo: el Hijo de la Humanidad.
21     T334 Καὶ tiene un sentido final (consecutivo —H422). [Editor. En algunas ocasiones, la mente judía no distinguía entre propósito y resultado (comp. Rom. 1:20). Καί con el infinitivo puede introducir la idea de resultado intencional, pero no resultado real.]
24     R679 Hay aquí un evidente énfasis fuerte en el pronombre αὐτός.
     R883 Note el imperfecto narrativo ἐκάθευδεν (El se mantuvo durmiendo hasta que finalmente ἤγειραν αὐτόν —T66).
25     R941 El imperativo σῶσον tiene más la idea de petición que la de mandato.
     MT114 El verbo compuesto ἀπολλύμεθα tiene el sentido de una perdición inevitable, según las condiciones visibles; aunque la historia subsiguiente indica que fue impedida.
27     T318 Ὅτι casi tiene aquí un sentido consecutivo: de tal manera que.
28     M141 Ὥστε con el infinitivo tiene un sentido consecutivo (que indica el resultado; puede ser potencial y no real).
     BD291(3) El pronombre ἐκείνης designa algo antes mencionado; en este caso se refiere a la morada de los endemoniados, pues el camino en sí aún no había sido mencionado.
29     M74 La frase temporal πρὸ καιροῦ significa: demasiado pronto.
     TGr43 El contexto exige que la pregunta de este versículo tenga el siguiente significado: ¿Por qué nos atormentas?
31     R948 El imperativo ἀπόστειλον tiene la idea de súplica (envíanos) y ὑπάγετε (v. 32) denota permiso (vayan).
     B256 La suposición general expresada con εἰ ἐκβάλλεις ἡμᾶς es de carácter futurista: Si nos echas fuera.
32     R570 Κατά se usa aquí con el genitivo ablativo: por un despeña dero (por —M60; la preposición tiene un sentido local: sobre y hacia abajo —BD225). [Editor. En realidad todas esas explicaciones son similares. Dentro del contexto, esta preposición se usa con un genitivo de lugar: ellos se apresuraron hacia abajo (desde) la orilla.]
34     R995 Ὅπως introduce una pregunta indirecta después del verbo παρεκάλεσαν: le rogaron que.
     M70 La preposición εἰς tiene aquí un sentido de consecuencia final: con miras a, o con el resultado de que (comp. 25:1).
Mateo 9
1     R691 Ἰδίαν se usa como un pronombre reflexivo: su propia ciudad (aquí hay un énfasis definido —R692; comp. MT90).
2     T64 El verbo presente ἀφίενται tiene un sentido definido: con esto tus pecados reciben perdón.
5     R1190 La partícula γάρ denota aquí un grado de desdén.
8     R409 En este versículo hay un doble sentido en δόντα, pues Jesús tenía la ἐξουσίαν de una manera en que no la tenían los ἀνθρώποις que recibían el beneficio de ella.
13     R1429 El primer οὐ de este versículo niega el significado del verbo θέλω, que está implícito: Deseo misericordia, y no sacrificio.
15     T208 Υἱός se usa de manera figurada con un sustantivo en el genitivo para expresar cierta cualidad: los amigos del novio.
17     R1025 Εἰ δὲ μήγε es una frase tan fija que aparece aun cuando la oración que precede es negativa; significa: de otra manera.
18     T330 Aquí, antes del mandato, ἀλλά debe traducirse como una interjección: bien (comp. Mar. 9:22).
20     B131 El participio de presente αἱμορροοῦσα se refiere a una acción pasada que aún está en progreso: una mujer que había estado sangrando durante doce años.
21     TGr33 Cuando Jesús habló a la víctima de la hemorragia sobre su salud real, usó el tiempo perfecto deliberadamente. El dijo, en efecto: Has recibido sanidad y ahora estás con perfecta salud. Tu fe ha logrado esto. Luego se usa el tiempo aoristo, cuando el evangelista vuelve a pensar en el evento y lo registra históricamente: En ese mismo momento la mujer recibió sanidad.
25     B53 El verbo en aoristo ἐξεβλήθη debe traducirse como un pluscuamperfecto (antecede a otro verbo en aoristo): cuando la multitud había sido echada fuera.
29     R609 La preposición κατά se usa para introducir una norma o regla de medida.
34     M77 Ἐν tiene aquf un sentido instrumental: Por medio del príncipe de los demonios (comp. BD219[sec. 1]).
35     BD150 El verbo compuesto περιάγω significa: recorrer por un área.
36     M62 y sig. Περί tiene un sentido metafórico en la cláusula ἐσπλαγχνίσθη περὶ αὐτῶν, y significa: se conmovió de compasión hacia ellos.
38     R995 Ὅπως introduce una pregunta indirecta después del verbo δεήθητε (comp. 8:34 y T106): oren que.
Mateo 10
1     R500 Ἐξουσίαν con el genitivo significa aquí: autoridad sobre.
     R809 El participio προσκαλεσάμενος presenta a Jesús como el que llama a los discípulos a Sí mismo.
     R1089 Ὥστε con el infinitivo tiene en este versículo la idea de propósito; significa: para que, no de tal manera que (comp. M140 y T136; denota tendencia o resultado intencional como tal: echarlos fuera —B371).
2     R657 Πρῶτος se usa aquí como un adjetivo, y se refiere al hecho de que el primero de la lista es Simón.
4     R859 El participio de aoristo con artículo ὁ παραδούς se refiere a un acto pasado con respecto al tiempo en que se escribe, aunque futuro con respecto a la acción del verbo principal (comp. B142: Judas, quien había de traicionarlo —T80).
5     R500 En ὁδὸν ἐθνῶν, el genitivo tiene un sentido objetivo: el camino de los gentiles.
6     R881 El participio de perfecto ἀπολωλότα se usa en el N.T. como un presente: la oveja perdida.
7     H469 En este contexto parece que ὅτι tiene la idea de afirmación: en verdad (comp. 7:25).
8     R488 Δωρεάν se usa como un acusativo adverbial: gratuitamente, o como un regalo.
9     R810 Κτήσησθε significa: provean para ustedes mismos.
     MT125 La prohibición en aoristo μὴ κτήσησθε sería respondida con las palabras: evitaremos hacer eso.
13     R948 La idea de permiso es aparente en este imperativo: la paz de ustedes repose sobre ella.
14     TGr89 El acusativo con ἀκούσῃ indica aquí que no es suficiente que los amos de casa sólo escuchen a los apóstoles, sino que tienen que prestar atención y entender.
18     R1185 Δὲ καί significa: y también.
19     BD368 El sujeto de δοθήσεται es saber.
21     R403 El sujeto plural neutro τέκνα tiene un verbo plural porque τέκνα tiene un sentido personal (comp. 6:32).
23     R776 Εἰς τὴν ἑτέραν significa: la próxima (forma incorrecta).
24     R632 En este versículo, la preposición ὑπέρ tiene el sentido metafórico de por encima, o sobre.
25     B214 Ἵνα introduce una cláusula que se usa como el sujeto del verbo impersonal ἀρκετόν: es suficiente … que.
26     T77 En este versículo esperaríamos el tiempo presente, ya que el contexto requiere la traducción: dejen de temer.
28     R473 Φοβεῖσθε ἀπό imita el idioma hebreo, que mejor se traduce: tengan temor de (comp. H460).
     BD44(3) Καὶ ψυχὴν καὶ σῶμα significa: aun el alma y el cuerpo.
29     R751 La expresión ἓνοὐ es claramente enfática: ni uno.
     M39 El genitivo ἀσσαρίου significa: por un cuarto.
     M82 Ἄνευ con el genitivo quizá signifique: sin el conocimiento o permiso de.
31     R853 La prohibición en presente μὴ φοβεῖσθε significa: dejen de temer.
32     R957 Ὅστις es indefinido en los vv. 32 y sigs. (derivado del sentido de τις): cualquiera.
     R588 El uso de ἐν después de ὁμολογέω se debe aparentemente a una traducción literal del arameo (comp. MT104; sencillamente significa: reconocer [a alguien] —M183).
35     R581 El verbo compuesto διχάξω significa: poner en desaveniencia (partir en dos).
     M143 y sig. El infinitivo que aparece en ἦλθον γὰρ διχάσαι es perfectamente representado por el simple infinitivo en español y es igualmente ambiguo. ¿Es una hipérbole desagradable que pareciera significar: yo vine (con el propósito) de … ? En cualquier caso, su signficado básico, literal, realmente tiene que ser consecutivo (es decir, expresa resultado).
37     R633 La preposición ὑπέρ tiene sentido comparativo: más que.
41     M79 La preposición εἰς tiene aquí un sentido causal: porque es un profeta (ὄνομα da a entender la idea de uno que tiene el nombre o carácter de profeta —R649).
T Turner, N., A Grammar of New Testament Greek. Tomo 3. Edimburgo: T. & T. Clark, 1963.
R Robertson, A.T., A Grammar of New Testament Greek. Nashville: Broadman Press, 1934.
M Moule, C.F.D., An Idiom Book of New Testament Greek. Nueva York: Cambridge University Press, 1959.
TGr Turner, N., Grammatical Insights into the New Testament.
BD Blass, F. y Debrunner, A Greek Grammar of the New Testament. Traducida del alemán y revisada por R. Funk. Chicago: The University of Chicago Press, 1961. A veces se uncuentra un número después de la referencia a esta obra entre paréntesis o entre corchetes, el cual indica la parte específica de la sección donde se encuentra el comentario. En los primeros casos se colocó la abreviatura “sec.” para orientar al estudiante o pastor.
B Burton, E.D., Moods and Tenses of New Testament Greek. Edimburgo: T. & T. Clark, 1928.
H Howard, W.F., A Grammar of New Testament Greek. Tomo 2. Edimburgo: T. & T. Clark, 1928.
MT Moulton J.H., A Grammar of New Testament Greek. Tomo 2. Edimburgo: T. & T. Clark, 1908.

sábado, 26 de octubre de 2013

La apostasía personal: Peligro que debe evitarse

Por eso, el que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6


 
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Sinopsis
     Es posible para individuos alejarse de la fe o volverse en contra de Jesucristo. Las Escrituras identifican este peligro y advierten contra sus consecuencias negativas.
Apostasía personal descrita
     He 6.4–8
     Ver también Mt 13.20–21 ; Mt 24.10–12 ; Gl 1.6 ; Gl 5.4 ; 2 Tes 2.3 ; 2 Ti 4.3–4 ; 1 Ti 4.1 ; 1 Jn 2.19 ; 1 Jn 5.16
Advertencias contra apostasía personal
     He 10.26–31
     Ver también Mt 10.33 ; Jn 15.6 ; 2 Ti 2.12 ; He 3.12 ; 2 P 3.17
Ejemplos de apostasía personal en el AT
               Dt 13.1–11 un profeta falso
Rey Saúl:
               1 Sm 15.11; 1 Sm 15.28; 1 Sm 16.14; 2 Sm 7.15
               2 Cr 26.16–21 Rey Uzías; 2 Cr 28.19–27 Rey Acaz
Ejemplos de apostasía en el NT
     Mt 26.14–16 Judas; Lc 13.26–27; Jn 6.66; Hch 5.1–11 Ananías y Safira; 1 Ti 1.19–20 Himeneo y Alejandro; Tit 1.16; 2 Ti 4.10 Demas; 2 P 2.1–3; 2 P 2.10–15; 2 P 2.20–22; Jud 4; Jud 8–16; Ap 2.20–22 Jezabel

La gracia generosa de nuestro Señor Jesucristo nos hace ricos: Ayuda ministerial

Por eso, el que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6


 
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 EL AMOR DE JESUCRISTO
Sinopsis
     La entrega total de Jesucristo, demostrada en su obediencia y muerte en la cruz, revelan el amor asombroso de Dios hacia los pecadores. Esto sigue motivando a los cristianos hoy en día.
La calidad suprema del amor de Jesucristo
          Ef 3.17–19
          Ver también Ro 8.35 ; Ro 8.38–39
     Lo obligó a dejar su gloria eterna
          2 Co 8.9
          Ver también Flp 2.6–8
     Lo llevó a dar su vida por otros
          1 Jn 3.16
          Ver también Jn 10.11 ; Jn 10.14–15 ; Jn 15.13 ; Ef 5.2 ; Ap 1.5
     Ama a los pecadores
          Lc 23.34
          Ver también Lc 13.34 ; Lc 23.43
     Ama a cada creyente
          2 Tes 2.13
Ejemplos del amor de Jesucristo
     Su compasión para los necesitados
          Mt 9.36; Mt 14.14; Mt 15.32; Lc 7.13
     Su amor hacia los niños
          Mt 19.13–15
     Su amor hacia su madre
          Jn 19.26–27
     Su amor por sus seguidores
               Jn 13.1
          Lázaro:
               Jn 11.1–7; Jn 11.17–22; Jn 11.32–44
          El “discípulo al cual Jesús amaba” se cree que era Juan, el autor del evangelio:
               Jn 13.23; Jn 20.2; Jn 21.7; Jn 21.20
El amor de Jesucristo proviene del Padre
     Recibe el amor del Padre
          Jn 3.35
          Ver también Mt 17.5 ; Mr 1.11 ; Jn 5.20 ; Jn 14.31
Su amor revela el amor del Padre
          Ro 5.8
          Ver también Jn 3.16 ; Ef 2.4–5 ; 1 Jn 4.9–10
El amor de Jesucristo motiva a la iglesia
     Su amor mora dentro de los creyentes
          Jn 17.26
          Ver también Jn 15.9–10 ; Gl 2.20 ; 1 Ti 1.14 ; 1 Jn 4.12
     Su amor reprende a los creyentes
          Ap 3.19
          Ver también He 12.5–6 ; Pr 3.11–12 ; Ap 3.9
     Su amor inspira actitudes cristianas verdaderas
          Jn 13.34–35
          Ver también Lv 19.18 ; Dt 6.5 ; Mt 5.43–44 ; Mt 22.35–39 ; Lc 6.27 ; Jn 15.12 ; 1 Jn 3.10
     Su amor inspira un matrimonio cristiano
          Ef 5.25
          Ver también Ef 5.28–30
     Su amor inspira un deseo por los dones espirituales
          1 Co 14.1
     Su amor motiva a los creyentes a vivir para Dios
          2 Co 5.14–15
          Ver también Ro 8.37 ; 1 Co 16.14 ; Col 2.2 ; 1 Tes 1.3 ; He 10.24

Limpiémonos de todo lo que nos pueda contaminar

Por eso, el que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6


 
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viernes, 25 de octubre de 2013

Capacitación Ministerial: ¡Base para un abuso espiritual?

Por eso, el que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6


 
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          Formar sin deformar: Capacitando siervos de Dios

El autoritarismo que manipula y controla a los educandos los deforma. Sus causas incluyen el orgullo, un carácter dominante, el miedo al cambio, experiencias de ser abusado y la cultura. Algunos de sus indicadores son la concentración del poder, reglas tácitas, conocimiento y lenguaje esotéricos, una jerarquía apuntalada por experiencias místicas, paranoia y exigencias de conformismo y lealtad ciega. La educación teológica más bien debe apuntar a y ser conducida por líderes-siervos que son humildes, enfocados en los otros y amorosos. Entre sus altos valores deben estar sumisión y respeto mutuos, gracia, integridad, transparencia y equilibrio. Sus estructuras pueden variar, pero no deben aislar la formación de la comunidad cristiana.

INTRODUCCIÓN

A pesar de la popularidad de la metáfora del barro y alfarero para ilustrar el desarrollo de la vida cristiana, la vid provee un ejemplo mucho más cercano al crecimiento hacia la madurez espiritual. Como Cristo mismo señaló, la vid es un organismo vivo cuyo crecimiento y producción de fruto depende del cuidado del labrador (Jn. 15:1–8). Uno de los trabajos principales es la dirección inicial dada al atar la cepa al lado del puntal a fin de guiar el crecimiento de la planta hacia arriba. Hasta que llega a la madurez, la vid es sumamente flexible y se arrastra por el suelo si no es atada o apuntalada para que los racimos se mantengan en el aire, protegidos del moho, tierra y animales. Esta flexibilidad se presta a múltiples formas de conducción con la finalidad de brindar sombra o fruto, según el caso. En una ocasión el presente autor observó una vid guiada estrechamente por los contornos de una casa, cuyos brotes y ramas doblaban las esquinas en ángulos rectos, de modo que la vid quedaba con una forma poco natural.
De la misma manera, la formación espiritual brindada en el discipulado o en la educación teológica puede ayudar al creyente a crecer impulsado por la vida del Espíritu (Jn. 15:5), o puede traer una deformación de la cual la recuperación será difícil, requiriendo una poda mayor de parte del Labrador Celestial (Jn. 15:2). Coe correctamente arguye que todos los aspectos de la educación teológica, sea lo realizado en el aula, las tareas asignadas o el intercambio relacional entre profesores y alumnos, deben enfocarse hacia la meta de promover la madurez espiritual. El apóstol Pablo expresa el mismo sentir en Colosenses 1:28: “a fin de presentar perfecto (τέλειον) en Cristo Jesús a todo hombre”. No obstante, existe para el educador el sutil peligro de usurpar el rol del Espíritu Santo en la vida del educando de modo que la formación llega a ser un abuso espiritual que resulta en desilusión, dependencia y la mala adaptación de cristianos mediocres, aun entre los que poseen títulos de posgrado.
El propósito del presente artículo es delinear aspectos de la deformación del educando a través del abuso espiritual, definir la meta de formación para el liderazgo espiritual y luego sugerir pautas para la correcta formación espiritual de liderazgo en la educación teológica.

DEFORMACIÓN EN LA FORMACIÓN TEOLÓGICA: ABUSO ESPIRITUAL

Autoritarismo en la Biblia

El autoritarismo en el pueblo de Dios no es una novedad, sino un problema de siempre. Los ejemplos bíblicos abundan. A pesar de su victoria sobre los filisteos, el liderazgo de Saúl fue abusivo, reconocido incluso por su hijo Jonatan (1 S. 14:24–35). David abusó de su autoridad para cometer adulterio y homicidio (2 S. 11:1–27). Jeremías denunció la corrupción de los profetas y sacerdotes (Jer. 5:26–31; 6:13–15). Cristo enfrentó a los fariseos por desviar al pueblo con su legalismo (Mt. 23:1–33). Pablo respondió enérgicamente a los gálatas, quienes habían sido alejados de su libertad en Cristo por falsos maestros (Gá. 1:6–9; 2:4–5). Juan advirtió a su amigo Gayo de los abusos de Diótrefes (3 Jn. 9–11). Es una táctica predilecta de Satanás desviar al líder a través de su propio ego (Gn. 3:1–5; Mt. 4:8–11; 1 Jn. 2:15–17), lo que lleva con facilidad al abuso de la autoridad.

Causas del autoritarismo

Las causas del autoritarismo pueden ser varias y complejas, así como es de variado y complejo la misma personalidad del ser humano. Veamos algunas de las causas.

Orgullo y soberbia. Aunque el reconocimiento de las propias habilidades y dones es un paso necesario para desempeñar con plenitud el rol que uno debe ocupar en el cuerpo de Cristo, la persona en autoridad puede llegar a sobreestimarse y dominar a otros (Ro. 12:3–8; 1 Co. 12:12–31). Es fácil caer en una mentalidad de “Yo sé mejor que ellos”, para luego pasar al síndrome de “nosotros contra ellos”, lo cual puede conducir al abuso de “ellos”.

Carácter fuerte, rígido y dominante. La tendencia nata hacia la dominación que algunos tienen, así como todo temperamento, debe dejarse controlar por el Espíritu Santo. El que está al frente de la obra del Señor debe recordar siempre que está al servicio, no al mando, de la grey (Mr. 10:42–45; 1 P. 5:1–3). Pérez Millos conjetura que esto haya sido el aguijón en la carne que sufrió el apóstol Pablo.

Emociones negativas. El miedo al cambio puede provocar una reacción defensiva. Así el líder puede pensar que lo diferente es peligroso. Mecanismos legalistas en los esquemas religiosos pueden ser diseñados para proteger a las personas de la “emergencia” o peligro percibido. Por otra parte, el enojo e ira por una injusticia sufrida puede provocar reacciones similares.

Trasfondo familiar. Un trasfondo familiar de abuso, sea físico, sexual, emocional o espiritual, puede llevar a la persona a controlar o dominar a otros por varios motivos, muchos de los cuales parecen legítimos a la persona autoritaria en su forma de ver el mundo.

Trasfondo cultural. La distancia de poder aceptada en la cultura puede facilitar una tendencia hacia la dominación. La preferencia para la autoridad autocrática o participativa queda bien marcada en la vida de las personas desde una temprana edad.9 La tendencia hacia el caudillismo en la cultura latinoamericano es bien reconocida. Culturas institucionales pueden manifestar la misma tendencia. Algunos grupos fundamentalistas11 o neopentecostales, por su énfasis en la obediencia absoluta a la autoridad eclesiástica o al profeta o apóstol, se exponen a una disposición hacia el autoritarismo y su consecuente abuso espiritual. Los que se crían en estas culturas repiten el cuadro simplemente porque no saben comportarse de otra manera.
Estas causas y móviles pueden entretejerse de tal modo que los comportamientos autoritarios son justificados, promovidos y transferidos dentro de una institución de educación teológica y técnicas de manipulación y abuso se incorporan al sistema.


¿Qué es abuso espiritual?

Expresado escuetamente, el abuso espiritual es el uso indebido de la autoridad (el autoritarismo) por personas que ejercen influencia espiritual. Johnson y Van Vonderen, posiblemente quienes acuñaron la frase “abuso espiritual”, lo definen de la siguiente manera:

  El abuso espiritual consiste, precisamente, en maltratar a una persona que necesita ayuda, apoyo o mayor crecimiento espiritual, lo cual debilita, sabotea o disminuye el desarrollo espiritual de esa persona.

Burdick, por su parte, también ofrece una definición breve, pero luego la amplía:

  El abuso de las Escrituras para manipular, controlar o demandar sumisión. La autoridad se puede abusar para justificar comportamiento inapropiado o para vedar a otro el derecho de ir a la iglesia o alabar a Dios. El “legalismo”, o sea, normas no bíblicas que exigen el cumplimiento de determinadas acciones para conseguir un estatus social en la iglesia, no es bíblico y, además, imparte a la gente un sentido falso de justicia propia.

  El abuso espiritual también incluye juzgar la fe de personas heridas por el abuso, en vez de aceptarlas con cariño y sentir su dolor. Así que, menospreciar el dolor de la persona herida, obligándola a orar más, o leer más la Biblia, es una forma de abusar a esa persona de nuevo. El abuso espiritual también incluye negarse a castigar a quienes tratan de destrozar ministerios dirigidos a los que han sido heridos por el abuso.

A fin de evitar malentendidos, Johnson y Van Vonderen agregan definiciones de lo que el abuso espiritual no es:

  No es abuso que un líder espiritual responsable de tomar decisiones definitivas use su mejor juicio, optando por ir en contra de la opinión de usted. Sin embargo, es abuso si se devalúa la espiritualidad de una persona por sostener un punto de vista contrario.
  No es abuso si un cristiano, líder o no, confronta a otro cristiano debido al pecado, malas obras o equivocación sincera que debe ser co-rregida …
  No es abuso pedir a una persona que desempeña un ministerio o una posición de liderazgo que haga abandono del oficio o cargo debido a problemas espirituales, mentales, físicos o emocionales …
  No es abuso espiritual, ni es inadecuado, disentir en materia de doctrinas u otros asuntos, aunque se manifieste en público …
  No es abuso sostener ciertas normas de conducta en grupos (como estilo de vestir), pero esto se vuelve abuso si se degrada o se avergüenza espiritualmente a las personas por no sostener las mismas convicciones.

No cabe la menor duda que la autoridad y el poder deben ser ejercitados con sumo cuidado, especialmente en materia de la fe, ya que se trata de la persona en su más íntima relación: la que tiene con Dios. Considerando el daño que puede producir el abuso, todo educador teológico debe estar atento al peligro, especialmente los que están involucrados en programas de formación espiritual.

Indicadores de abuso espiritual

A fin de evitar o corregir el abuso en la formación espiritual es necesario identificar las características de este cuadro disfuncional. Johnson y Van Vonderen señalan siete, las cuales comentaremos a continuación.

Concentración del poder. Los líderes abusivos recalcan su propio poder y autoridad espiritual basada en su posición de jerarquía o llamamiento especial de parte de Dios. Suelen recordárselo a los que les siguen, creando una relación de dependencia. La competencia por el poder se basa en el egoísmo20 y suele provocar la supresión de crítica y la eliminación de rivales. Henry y Richard Blackaby tienen razón: la dictadura espiritual suele ser la forma más opresiva de tiranía.22

Preocupación por el desempeño externo. El sistema religioso enfatiza el desempeño o comportamiento meramente externo de parte de los fieles. Aunque el mensaje de salvación puede inicialmente incluir la gracia, mantener la aceptación delante de Dios suele requerir el cumplimiento de una lista larga de mandamientos extrabíblicos o basados en una hermenéutica particular. El enfoque legalista se mantiene rígidamente.24 Sin embargo, a menudo los líderes no se ven obligados a cumplir con las mismas normas que los demás, debido a su posición privilegiada en la jerarquía (cp. Mt. 23:1–22).

Reglas tácitas. Como extensión de la pauta anterior, suele haber ciertas reglas no expresadas, que todos saben, cuyo incumplimiento, aun cuando no sea intencional, trae una de dos consecuencias: una marginación, o una disciplina legalista dura y tajante.

Desequilibrio. La falta de equilibrio en la vida cristiana en el cuadro abusivo se ve de dos maneras: en un objetivismo extremo que enfatiza conocimiento esotérico y lenguaje especial, así creando una élite de los que “saben” en virtud de su superior capacitación académica, o en un subjetivismo extremo que basa la vida cristiana sobre experiencias místicas en menosprecio de claras enseñanzas bíblicas. De alguna manera, hay una pretensión a un rasgo distintivo como base de una supuesta relación más íntima con Dios.28

Paranoia. La pretensión a la exclusividad trae consigo una paranoia para con los de afuera y una desconfianza hacia los que están adentro del grupo, provocando una mentalidad “de trinchera”. La resistencia se tilda de persecución, y abandonar las filas se considera como una traición personal al líder. Como los líderes se preocupan especialmente por la imagen (y no la esencia), es permitido revelar solamente lo que los dirigentes quieren.30 Los que no acatan esta norma son duramente disciplinados.

Lealtad ciega. Con la tendencia de depender en el legalismo para asegurar conductas que fortalecen su autoridad, el líder proyecta la idea de que “solo nosotros tenemos la razón”. Las preguntas no se hacen; las explicaciones no se dan. Se utilizan las amenazas, la manipulación o la humillación pública para mantener orden dentro de las filas. Hay un esfuerzo para crear una dependencia total de la voluntad del líder, tanto en lo personal y privado como en lo público.32

Secretos. Implícito es el compromiso de no hablar sobre lo que ocurre dentro del sistema. Se mantiene a la gente en estado de inmadurez a fin de controlarla mejor.
Al describir el problema de la tiranía en la iglesia, Ward señala cinco características que coinciden notablemente con las que ya hemos mencionado: pasividad de los laicos, sistema jerárquico, meritocracia intelectual, orgullo y estatus, y tácticas manipuladoras. Observa que estas tendencias se alimentan mutuamente, creando un sistema social que es difícil de romper. Además, acota que reflejan lo que se ve en nuestra sociedad occidental en general.35 De manera que la iglesia disfuncional procede de la sociedad en el mismo estado de descomposición y queda con la imperante necesidad de una redención por completo. Seguramente, hay otro camino para quienes deseen dar o recibir una formación espiritual sana y equilibrada.


EL PROPÓSITO DE LA FORMACIÓN TEOLÓGICA: CAPACITAR SIERVOS DE DIOS

Como ya hemos señalado, el apóstol Pablo expresó claramente el propósito de la educación teológica en Colosenses 1:28: “a quien [Cristo] anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre …”. La palabra traducida “perfecto” aquí no habla de una perfección absoluta, sino de la madurez de un adulto. Más tarde Pablo enumera las características de esta madurez en 1 Timoteo 3:1–13 y Tito 1:5–9. Mientras que todo ministerio evangélico debe apuntar a la madurez cristiana, la educación teológica suele restringir su objetivo a la preparación de aquellas personas que lideran el ministerio.
No sin razón algunos objetan al uso de la palabra “líder” en este contexto, dado los matices de dominación que se le suele atribuir. Cristo mismo marcó la pauta:

  Sabéis que los que son tenidos por gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y sus grandes ejercen sobre ellas potestad. Pero no será así entre vosotros, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, y el que de vosotros quiera ser el primero, será siervo de todos. Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos. (Mr. 10:42–45)

Es aparente que el liderazgo que Jesús plantea no incluye coerción, manipulación o dominación. Estas prácticas pueden producir resultados a corto plazo, pero dañan la relación interpersonal y resultan a la larga contraproducentes en cuanto al bien común. Aunque el término “líder-siervo” encierra cierta paradoja,40 Malphurs define el concepto con claridad: “Los líderes cristianos son siervos con credibilidad y capacidad, quienes pueden influenciar a las personas en un contexto determinado para perseguir su rumbo dado por Dios”. A la hora de transferir este concepto a la educación teológica valen las palabras de Lawrence:

  Nuestra visión al cumplir la responsabilidad del desarrollo personal y el desarrollo de liderazgo es tirar hacia el blanco de producir líderes con dos manos y el corazón. Tales líderes poseen el conocimiento de la Palabra de Dios, en una mano, y la pericia, en la otra, mientras en su corazón ellos crecen en la integridad de la voluntad de Cristo. Los pastores y maestros son llamados a desarrollar líderes para el cuerpo de Cristo, líderes que se definen por su impacto en las vidas de otros.

Varios rasgos de esta clase de liderazgo se han señalado. Ante todo, se destaca la humildad. Es sabio el consejo: “Deshágase de su ego en la puerta”. Solo así se va a poder ver las necesidades de la gente matizadas por la visión de la voluntad de Dios. Kouzes y Posner indican que esta humildad incluye la disposición a aprender, particularmente de subalternos.44 Collins, aunque señala la importancia de humildad, indica que los líderes empresariales de “Nivel Cinco”, los que gozan de mayor éxito, combinan la humildad con una firme voluntad para lograr su objetivo. Aunque él distingue entre esta clase de liderazgo y el liderazgo de servicio (Nivel Cuatro),46 el presente autor no ve la necesidad de hacerlo. Tanto Cristo (Jn. 5:30) como el apóstol Pablo (Fil. 3:13–14) dan ejemplos claros de humildad combinado con la voluntad férrea de cumplir con la misión encomendada por Dios.
El servicio también marca este tipo de liderazgo. Malphurs observa que Cristo utilizó dos palabras para ilustrar el concepto, διάκονος y δοῦλος. Combinadas, indican una obligación voluntaria a servir. No se trata de hacer el ministerio por otros, ni tampoco dejar que otros dominen, sino facilitar el servicio de otros que comparten la misma visión.48 El líder-siervo, entonces, faculta a otros, inspirándoles a cumplir el rol a que Dios les ha llamado.
En tercer lugar, el enfoque no está en el líder mismo (lo que sería orgullo), sino en otros. Esto es lo que Cristo señaló al decir: “El de vosotros que quiera ser el primero será siervo de todos” (Mr. 10:44). No se trata de ser pasivo ni ignorar necesidades propias, sino de utilizar la fuerza y talentos que uno posee para el bien común.

  El liderazgo es el uso de poder. Pero el poder, para ser ético, no debe ser abusado. Para asegurar eso, una regla jamás debe ser quebrantada: el poder ha de ser usado sólo para el beneficio de otros, nunca para uno mismo. Eso es la generosidad esencial y autosacrificio del líder.

El cuarto rasgo es el amor. Hunter destaca el concepto bíblico de agape al describir la motivación de liderazgo a través del servicio. Malphurs observa esta motivación en Cristo cuando lavó los pies de los discípulos.53 Este amor, proveniente de Dios (1 Jn. 4:7–10), fluyendo hacia otros, es el móvil adecuado para el líder que sirve.


FORMACIÓN DE SIERVOS DE DIOS: PAUTAS PARA DESARROLLAR EL CARÁCTER CRISTIANO

El liderazgo a través de servicio no solamente constituye una meta para el programa de formación espiritual, sino también debe marcar el medio para llevarlo a cabo, saturando a las personas, los contenidos y los métodos en todo momento. Veamos algunas pautas para la preparación y ejecución de una formación teológica de este tipo.


Bases preliminares

Ciertas presuposiciones subyacen en la formación espiritual evangélica. Partiendo de la autoridad e inerrancia de las Escrituras, el educador evangélico puede reconocer la importancia de una integración de la verdad que une aportes provenientes de la revelación natural con los de la revelación especial.55 Eso le dará una amplia base epistemológica para realizar su labor.
Tomando en cuenta que Dios tiene como propósito transformar por completo al creyente (Ro. 8:28–30; 1 Ts. 5:23; 1 Jn. 3:1–3), ningún programa de formación espiritual puede aspirar a lograr más que un segmento en el proceso de crecimiento hacia la madurez, un proceso que Dios el Espíritu Santo está dirigiendo (Gá. 5:16–25). Según Banks, a lo largo de la historia de la Iglesia hasta la Edad Media la educación teológica fue “holística”, es decir, aplicada a todos los aspectos de la vida a través de un discipulado en que el maestro no solo instruía, sino encarnaba la enseñanza. En este sentido era una educación como la que Cristo impartió a los apóstoles, un modelo a que debemos regresar, ya que la verdad se aprende mejor en relación con otros.58

Valores clave

Dada la trascendencia de la tarea de formación espiritual y el peligro del abuso espiritual, es preciso afirmar algunos valores clave que deben guiar el proceso, protegiendo a todos los involucrados de las sutiles trampas de la deformación. Estos valores más caros pueden ser definidos como “aquellas creencias constantes, apasionantes y sagradas, que empujan el proceso y programa de formación espiritual”.

Sumisión mutua. Si el objetivo es formar siervos de Dios, entonces la sumisión tiene que ser un alto valor. Sin embargo, no se trata de una sumisión a la autoridad exclusivamente, sino también de una rendición de cuentas mutua entre educadores, y entre estos y los educandos. Así, debe reflejar el espíritu de Cristo.

  Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo; no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros. Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús … (Fil. 2:4–5)

  Someteos unos a otros en el temor de Dios. (Ef. 5:21)

El ejercicio de este valor disminuirá, sin duda, la distancia de poder, y promoverá, en cambio, otros valores cristianos como la integridad, la sinceridad y el aliento mutuo (Heb. 10:24; 1 P. 5:1–5).

Gracia. En vez de una preocupación por el desempeño en un sistema religioso legalista a través de controles férreos, un énfasis en extender la gracia debe saturar la teología y trato interpersonal en la formación espiritual. La gracia se comprende no solo como el medio para recibir la salvación, sino también como eficaz y vital para la santificación. Las disciplinas espirituales, tales como la oración, la lectura bíblica y el ayuno, no se conciben como mecanismos de superación personal, sino como medios de aplicar la gracia a la vida interior (Gá. 5:1–16; Col. 2:20–23).

Integridad. Este valor no es solo la base sino también la meta de la formación espiritual (Fil. 3:4–15). La integridad tiene que ver con “ser completo y coherente … rectitud, un sentido de salud moral”. Es una cualidad vital para la credibilidad en el liderazgo.63 Kouzes y Posner destacan las tres cualidades de ser honesto, ser inspirador y ser competente como ingredientes indispensables para la credibilidad. La capacidad de motivar a otros fluye de lo que uno es, una persona íntegra (1 Ts. 2:1–12).

Transparencia. La integridad y la sumisión mutua resultarán en un trato transparente en las relaciones interpersonales (2 Co. 5:6–11). La sinceridad brindará aliento mutuo para el ejercicio de las disciplinas espirituales, sin manipulación o control. La vida del educador debe ser un “libro abierto” a fin de mostrar una verdadera imitación de Cristo (1 Co. 11:1). La rendición de cuentas no debe invadir la privacidad del educando, sino limitarse a pedir aquello con que él se siente cómodo. Los grupos pequeños también pueden ser medios eficaces para fomentar la transparencia, permitiendo a la vez una notable diversidad en vez de una uniformidad regimentada.67

Equilibrio. Este valor debe figurar varios planos. Lawrence menciona el equilibrio entre el conocimiento y las habilidades ministeriales. La concentración excesiva en cuestiones menores de doctrina o práctica debe evitarse a todo costo (Mt. 23:13–24); se buscarán en cambio, las prioridades divinas (Lc. 10:25–34).

Respeto a las personas. El respeto debe manifestarse a todas las personas, no solo a las que pertenecen a la línea teológica “aceptada”. La solicitud en guardar la unidad del Espíritu (Ef. 4:3) es, a menudo, ignorada para levantar los fantasmas de “ecumenismo” y separación de “yugos desiguales”. Mientras estos peligros son reales, el énfasis desmedido, en desmedro de la unidad verdadera del cuerpo de Cristo, produce la paranoia de actitudes sectarias. En cambio, es necesario reconocer cómo Dios está obrando en otros (Lc. 9:49–50) y aprender a amarlos, brindándoles gracia aun en medio del desacuerdo. A su vez, esos otros hermanos en la fe nos darán aliento conforme nos apoyamos en la búsqueda de la unidad y el crecimiento en el cuerpo de Cristo (Ef. 4:13–16).

Estructura facilitadora

La estructura que incorpora estos valores puede tomar varias formas. Sin duda otros criterios teológicos y contextuales ejercerán su influencia. Con todo, un par de sugerencias al respecto podrían ser útiles.
Primero, la formación teológica cabal no puede realizarse en aislamiento del resto del cuerpo de Cristo—debe ocurrir en comunidad. Coe observa que la evaluación y la retroalimentación son elementos cruciales para tallar el carácter, y eso requiere roce con otros.73 Si bien las experiencias de la “torre de marfil” son provechosas, el educando debe tener contacto también con la comunidad en general a fin de no divorciar su fe de la vida real.
Hay motivos para ser optimista en cuanto a la formación formal en el aula. Banks la ve como un mecanismo de integración social. Para Deininger y Herring, el aula puede ser un ambiente propicio para el modeling. Coe ofrece sugerencias específicas que pueden ser aplicadas a toda materia.77 De todos modos, el modelo formal heredado del escolasticismo medieval no tiene que ser descartado del todo a pesar de sus manifiestas limitaciones. Hasta que surja otro mejor, el presente modelo va a tener que ser modificado, ajustado y refinado para lograr el objetivo de la formación espiritual cabal.

CONCLUSIONES

Hemos señalado los peligros de la deformación espiritual que resultan de mecanismos y actitudes de abuso de autoridad en la tarea pastoral y docente. Para los que estamos involucrados en el ministerio educativo sería recomendable un auto-análisis a fin de diagnosticar aquellos aspectos que podrían perjudicar a los que están bajo nuestro cuidado. La seriedad de nuestra responsabilidad ministerial nos debe impulsar a un examen de conciencia delante del Señor para que no salgamos descalificados en el día de presentarnos ante él (1 Co. 3:12–15; 2 Co. 5:6–10).
Por otra parte, es necesario cobrar una nueva perspectiva del rumbo que el ministerio de formación debe tomar. Hace unos años un viejo experto de la viña indicó al presente autor que al podar la vid es necesario tener en cuenta hacia dónde se quiere que crezca. La formación espiritual es un proceso análogo. Hemos de tener en vista constantemente hacia dónde se dirige la formación de siervos de Dios, manteniendo en alto los valores clave ya señalados, los cuales fomentan el crecimiento sano, tanto el nuestro, como el de los que están bajo nuestro cuidado.




Las Artimañas de satanás: Alerta máxima!!!

Por eso, el que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6


 
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Si usted es un verdadero creyente, Satanás lo odia. Lo odia porque usted es la imagen de Cristo, porque usted es la singular obra de Dios creado en Cristo Jesús para buenas obras, y porque fue arrebatado de su poder.

Usted es un desertor de Satanás y huyó de su territorio. Por gracia, reconoció a Cristo como su Señor y Maestro. Usted testifica con Pedro: “Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente” (Mateo 16:16). Satanás lo odia porque Dios está con usted y porque ama a Cristo.

Satanás lo quiere de vuelta. Y como Jesús les dijo a sus discípulos: “He aquí, Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo” (Lucas 22:31), así que Satanás quiere zarandearlo como a trigo. No sobreestime ni subestime a Satanás. No es una deidad caída; no es Dios. Solamente es un ángel caído. No es omnipotente. Sin embargo, Satanás es un poderoso enemigo. John Blanchard escribió: “Se nos opone un enemigo viviente, inteligente, pleno de recursos y astuto, que puede sobrevivir a los cristianos más viejos, trabajar más que los más ocupados, pelear más que los más fuertes y burlar a los más sabios”.

Cada verdadero creyente está comprometido con lo que la Biblia describe como la guerra espiritual (Génesis 3:15; Apocalipsis 12:7). Juan Bunyan lo llamó una guerra santa. Esta guerra espiritual o guerra santa implica una batalla perpetua contra tres grandes enemigos: el diablo, el mundo y la carne.


Una batalla feroz

La batalla contra Satanás y sus demonios es feroz. La vida y la muerte están en juego, involucrando fuerzas de luz y oscuridad. Los principados y poderes de la oscuridad están bajo el dominio de Satanás y sujetos a sus órdenes. Los lugartenientes de Satanás son demonios que se deleitan en cumplir con sus órdenes. El ejército de Satanás es agresivo, maligno y cruel, y su poder se encuentra en lugares altos sobre nosotros y a nuestro alrededor. Este ejército es muy poderoso para que nosotros luchemos con nuestras propias fuerzas, sin embargo, no podemos transigir con Satanás ni rendirnos a él. En vez de ello, debemos resistir al diablo (Santiago 4:7) siguiendo conscientemente las instrucciones de la Biblia para tener la victoria sobre Satanás.

Una batalla espiritual

La batalla contra Satanás y sus demonios es espiritual. No peleamos contra este enemigo con pistolas, tanques o armas atómicas. Tampoco peleamos simplemente contra carne y sangre. Como Pablo les escribió a los Efesios: “Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes” (Efesios 6:12). Esta batalla no es por el poder mundial, por posesiones u honor, dice Pablo. El objetivo es más alto, en la realidad espiritual de la verdad, la justicia y la gloria del Dios viviente y su Hijo. Detrás de nuestros enemigos visibles de carne y hueso se encuentra un ejército de adversarios espirituales, invisibles. La guerra espiritual es una batalla contra enemigos invisibles con armamento invisible que se oponen a la causa y al reino de Jesucristo.

Luchamos contra el poderoso, innumerable, invisible ejército de Satanás. La lucha es un cercano conflicto espiritual. Es intensa y extenuante. En la lucha, los oponentes no mantienen distancia los unos de los otros; se quedan asidos uno del otro. Ya sea como el príncipe de las tinieblas o como un ángel de luz, Satanás nos compromete mano-con-mano y mano-a-mano en una guerra espiritual de vida o muerte.

Una batalla necesaria

La batalla contra Satanás y sus demonios es necesaria. Así como el mundo actual no puede escapar a la guerra contra el terrorismo, nosotros tampoco podemos escapar de la guerra contra Satanás. Nos guste o no, estamos en guerra. No podemos pedir amnistía ni consideraciones médicas, ni tampoco podemos evitar las balas y las bombas. Estar en medio de la guerra y no darse cuenta de ello es aún más peligroso. Si ignoramos al enemigo, nos colocamos como un blanco a derrotar. Pablo nos ordena: “Vestíos de toda la armadura de Dios para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo” (Efesios 6:11).

Muchos cristianos hoy en día prestan muy poca atención al mandato de Pablo. Muchas iglesias hablan más sobre el desarme que sobre el armamento. Y muchos predicadores promueven una amplia “fraternidad universal” ecuménica que incluye una variedad de religiones en lugar de exponer la antítesis entre dos reinos que se oponen en este mundo.

Por desagradable que sea el tema de Satanás, necesitamos estudiarlo. El puritano Thomas Brooks escribió: “Cristo, la Escritura, su propio corazón, y las estratagemas de Satanás, son las cuatro cosas primordiales que usted debe estudiar y buscar entender en primer lugar y con mayor determinación” (Remedios Preciosos Contra las Artimañas del Diablo, p.3). Si tenemos ideas pobres sobre los objetivos de Satanás, sus fuerzas y limitaciones, nos volvemos descuidados. Subestimamos el poder del enemigo.

En este estudio, veremos a Satanás y sus artimañas. Confío en que lo que aprenderemos nos asistirá para pelear intensamente, pelear bien y seguir en la lucha hasta obtener una victoria total sobre el enemigo (cf. Catecismo de Heidelberg, Q. 127). Que Dios nos ayude en la batalla.


jueves, 24 de octubre de 2013

Causas de Conflictos Familiares: Ayuda Ministerial

Por eso, el que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6


 
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POR QUÉ PELEAN LAS FAMILIAS
¿Por qué escribió Pablo a los cristianos romanos: “Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres.” (Rom. 12:18)? Porque sabía que tenían conflictos interpersonales. Otras referencias en la epístola apuntan a lo mismo. “Así que, sigamos lo que contribuye a la paz y a la mutua edificación.” (Rom. 14:19). “Recibid al débil en la fe, pero no para contender sobre opiniones.” (Rom. 14:1). Pablo estaba diciendo, “Hermanos, yo sé que ustedes tienen conflictos y diferencias de opiniones pero no dejen que sus diferencias abran una brecha entre ustedes.”
Este tema es recurrente en la primera carta de Pablo a los corintios. Después de una introducción breve, el primer asunto que aborda Pablo es el problema de los conflictos y divisiones: “Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer.” (1 Cor. 1:10). Vemos la razón para esta petición en el siguiente versículo: “Porque he sido informado acerca de vosotros, hermanos míos, por los de Cloé, que hay entre vosotros contiendas.” (1 Cor. 1:11). Las relaciones entre los miembros de la iglesia habían llegado a ser demasiado tirantes. Estaban echando a perder su testimonio frente a todo mundo. Estas personas necesitaban, con desesperación, ayuda para aprender a resolver sus conflictos.
Otras cartas del Nuevo Testamento contienen peticiones similares e indican que el tema “solución de conflictos” es de inmensa relevancia. Pablo escribe a los gálatas: “Pero si os mordéis y os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a otros.” (Gal. 5:15). Santiago declara a los creyentes esparcidos entre las naciones: “Y el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos que hacen la paz. ¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros? Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís.”(Sant. 3:18–4:2) El punto de vista de Santiago no es sólo académico; ya que los conflictos eran muy comunes entre la gente a quien Santiago escribió.
Desafortunadamente la situación es casi igual hoy en día; todavía vemos a cristianos morderse y consumirse unos a otros en el hogar y en la iglesia cuando luchan y riñen continuamente. En muchas familias, aun las cristianas, la discordia es algo normal.
¿Qué de ti y tu familia? ¿Batallas algunas veces con otros miembros de tu familia? ¿Has contendido con tu patrón, tus compañeros de trabajo, tus vecinos, tus compañeros en la iglesia? Estoy seguro de que no hay nadie que esté leyendo este libro que nunca haya tenido un conflicto con alguien. Algunos tienen más que otros. Si somos honestos admitiremos que sí hemos tenido conflictos con otros, incluso con los miembros de nuestra familia.

  Los Desacuerdos Son Inevitables

Ocasionalmente me dice la gente: “Tenemos diferencias en casi todo. No podemos ponernos de acuerdo. Ciertamente, eso es prueba de que nuestro matrimonio no era la voluntad de Dios.” Mi respuesta es: “Adán y Eva fueron hechos uno para el otro, la pareja perfecta, especialmente por Dios. Aun así se decepcionaron uno del otro. Adán culpó a Eva por haberle dado a comer la fruta prohibida. Eva echó la culpa a la serpiente. Inclusive culparon a Dios.
Rebeca e Isaac fueron juntados especialmente por Dios. Dios guió al siervo de Abraham hasta Rebeca para que sea la esposa de Isaac (Gen. 24). Pero el libro de Génesis revela que ellos también tenían sus desacuerdos. Esto no significaba que Dios se hubiera equivocado. Sólo que necesitaban aprender a congeniar.
Al contrario de los pensamientos de muchos, la diferencia entre un hogar feliz y uno infeliz no es la presencia o ausencia de diferentes puntos de vista. La diferencia básica es que en el primer hogar la gente enfrenta y resuelve sus conflictos, mientras que en el otro no saben cómo hacerlo. Un consejero explica:
“Vamos a reaccionar ante la idea tonta de que la casualidad lleva a los hombres a imaginar que podremos casarnos con una esposa que es una perla, de la misma forma que uno puede ganar la lotería. Además, sería muy difícil estar casado con una perla si crees que no estás a la misma altura que ella. Lo que realmente cuenta es que los dos trabajen juntos para conseguir la felicidad matrimonial. Es una meta por lograr, no un privilegio concedido no más porque sí… La “incompatibilidad emocional” es un mito inventado por abogados faltos de argumentos para pedir divorcios; también es una excusa común que usa la gente para esconder sus propias faltas. Simplemente no creo que existen las incompatibilidades emocionales. Hay malentendidos y fracasos que, sin embargo, pueden ser corregidos cuando y donde hay voluntad para hacerlo”.
Aquí Paul Tournier expone verdadera y bíblicamente varias verdades sobre la felicidad matrimonial y familiar. Los miembros de la familia van a tener algunas luchas para entenderse. Es parte del proceso. Aunque la felicidad familiar no llega de manera automática pero puede ser alcanzada por medio del trabajo duro.

  “Nunca Hemos Tenido un Conflicto”

Algunos aseguran y están de acuerdo con esta declaración, diciendo, “Nunca hemos tenido conflictos en nuestro matrimonio o familia.” Tal aseveración sugiere una de dos posibilidades:
1) Tienen desacuerdos pero temen decírselo uno al otro. Recuerdo un caso relacionado con este tema. Una pareja, por cierto ya grande, vino en busca de consejo porque la esposa estaba experimentando una depresión profunda. Ya no quería vivir; muchas veces sólo se sentaba a llorar.
Decidí explorar su relación matrimonial. Cuando le pedí que me dijera algo de su matrimonio, ella veía a su esposo y respondió, “Mi esposo y yo nunca hemos tenido un conflicto.” Su esposo asintió con la cabeza.
“¿Quieres decir que han estado casados por 45 años, y nunca has tenido una diferencia de opinión con tu esposo? ¿Han estado de acuerdo, absolutamente, en todo?”
“Pues, he tenido diferencias con él, pero nunca hemos peleado.”
“¿Cómo explicas esto?”
Ella dio un vistazo avergonzado a su esposo otra vez y dijo con mansedumbre, “No tenemos pleitos porque guardo mis opiniones para mí misma. Muy al principio de nuestro matrimonio, cuando mostré mi desacuerdo con él sobre algo, él dijo, “¡No peleemos! No me gusta pelear.” Así que, aprendí que nos llevamos mejor si me guardo mis ideas para mí.”
Aunque esta mujer aseguraba que nunca había tenido un conflicto con su esposo, en realidad nunca habían tenido un conflicto externo. Y es que ella había suprimido sus ideas para mantener la paz en la familia. Por 45 años había vivido una tormenta silenciosa. Aunque tenía inteligencia para juzgar independientemente y sacar conclusiones diferentes, no sentía la libertad de compartir sus pensamientos con su esposo. Su supuesta falta de discordia en su matrimonio era más mito que realidad.
2) La otra posibilidad es que cuando la gente dice que nunca ha tenido conflictos, si puede ser cierto. Puede ser que tengan desacuerdos pero los resuelven antes de que sean conflictos. Un desacuerdo es una diferencia de opinión, principalmente en el nivel cognitivo, intelectual. Un conflicto es una diferencia de opinión que nos afecta severamente en los niveles emocional y de relación. Algunas personas han aprendido a prevenir los conflictos manejando sus desacuerdos bíblicamente. No es que estas personas sean copias de otras; sino que tienen sus propias opiniones y las comparten. Y responden a los desacuerdos de tal manera que pocas veces llegan a ser conflictos.

  El Dolor de la Discordia

Los datos bíblicos, registros históricos y experiencia personal indican que en las relaciones interpersonales los desacuerdos son inevitables. Tu felicidad personal es afectada gracias a la forma en que manejas los desacuerdos que surgen. La Escritura declara que “¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía!” (Sal. 133:1). Lo opuesto también es verdad; ya que la mayoría de la gente dice que no hay mayor desánimo que el resultante de una discordia familiar sin resolver.
Una amiga mía atravesó un periodo de dolor intenso e incertidumbre con los colores flotantes. Se mantuvo emocionalmente estable cuando casi pierde la vida, cuando su independencia estuvo amenazada, cuando tuvo que padecer la muerte de algunos miembros de la familia y cuando ciertos miembros de la familia estaban teniendo problemas severos; sin embargo, al tener un desacuerdo con su esposo que no puedo superar le invadió una depresión muy profunda. Ese desacuerdo afectó su felicidad personal más que lo anteriormente padecido.
La manera en que respondes a los desacuerdos afectará tu rendimiento en el trabajo. Muchas personas con talentos, con alta escolaridad tropiezan en su carrera debido a su incapacidad de relacionarse con otros. Una conocida mía tuvo 19 trabajos en 19 años. Tomaba un trabajo pensando que iba a ser feliz, pero pronto ella y su patrón u otro empleado veían las cosas de diferente manera. Al poco tiempo se sentía insatisfecha y empezaba a buscar otro trabajo. Al llegar a la edad de 40 años experimentó una depresión severa porque al repasar su vida, se dio cuenta que casi nada había alcanzado. Aunque era una mujer de muchas habilidades, su incapacidad de manejar los conflictos limitó seriamente sus logros ocupacionales.
Saber cómo manejar los conflictos es también un asunto crítico en el servicio cristiano. Cuando conocí a Beto y María González (seudónimos), Beto había sido pastor por 20 años. Pastoreó 6 congregaciones en ese tiempo, y María había experimentado 5 colapsos nerviosos. Me vinieron a ver porque María estaba al borde de otro colapso.
Al recabar datos, me di cuenta que cada colapso de María coincidía con sendos conflictos surgidos en las congregaciones. En la mayoría de los casos un grupo de personas de la iglesia estaba infeliz por algo que el pastor o su esposa o su familia habían hecho. María no sabía cómo responder a estas dificultades. Mientras meditaba en lo que pasaba, se sentía herida, ansiosa, intimidada y frustrada por dentro. Por fuera pretendía que nada estaba mal y trataba de, simplemente, evitar a estas personas que actuaban sin razón y sin apreciación. Gradualmente, la presión interna llegaba a ser tan intensa que se volvía loca.
La manera en que Beto respondía a los conflictos era totalmente diferente. María era una “internalizadora”, una “suprimidora”. Beto era un “confrontador”. Al surgir conflictos, se decidía y explicaba una y otra vez el porqué su posición estaba bien y las otras posiciones estaban mal. Finalmente, la gente hacía una de tres cosas: capitulaban, se confabulaban contra de Beto o salían de la iglesia. Y al final de la controversia, si eran muchas las personas que adoptaban una de las dos últimas formas, los Gonzáles se cambiaban a otra congregación.
La felicidad de Beto y María estaba siendo destruida por su manera inadecuada de manejar los desacuerdos. Además su eficacia para servir a Cristo declinó de manera considerable. Eran personas talentosas, que podrían haber contribuido grandemente a la edificación de otros cristianos. Desgraciadamente su labor como pareja ministerial era deteriorada severamente debido a su manera de manejar los conflictos.

  La Bendición de la Paz

Las escrituras declaran que “el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos que hacen la paz” (Sant. 3:18). ¿Quieres tener una cosecha de justicia en tu familia? Santiago dice que no debes esperar que esto ocurra en un hogar marcado por riñas y pleitos. Ocurrirá en familias donde los pacificadores están sembrando paz continuamente. Van a tener una cosecha de justicia.
El salmo 133 enfatiza el mismo pensamiento. Compara la unidad en la familia con el aceite de ungir que era vertido sobre Aarón cuando lo apartaron para su ministerio sacerdotal (Ex. 29:7; 30:25). De esa manera fue consagrado para el uso del Señor. El salmista parece estar diciendo que cuando mantenemos la unidad (previniendo o resolviendo conflictos), nosotros como Aarón, somos apartados especialmente para el servicio del Señor. En una atmósfera de paz y unidad, Dios nos bendice y usa de una manera especial.
Otra frase en este salmo expande más el concepto. El salmista compara la paz y la unidad entre hermanos al “rocío de Hermón, Que desciende sobre los montes de Sion; Porque allí envía Jehová bendición, Y vida eterna.” (Sal. 133:3) Entre las lluvias de temprano en la primavera y muy tarde en el verano, poca precipitación cae en Palestina. Para que crezca las plantas, necesita más humedad. Afortunadamente, a menos que ocurre condiciones severas, muchas áreas de Palestina se bendice con rocío pesado. En ningún lugar, sin embargo, era tan pesado como alrededor del Monte Hermón. Como resultado, los campos en este área usualmente producía cosecha abundante.
De manera similar, el salmista indica que la bendición de Dios cae abundantemente sobre la gente (individuos, familias, iglesias) que aman a la unidad. Condiciones de sequía pueden prevalecer todo alrededor de tales personas, y fuerzas de maldad pueden oponerse a la obra de Dios en sus vidas, Pero en sus relaciones adentro y fuera del hogar, la bendición de Dios produce una cosecha de justicia.

  Las Tres Fases del Matrimonio

Alguien ha dicho que la mayoría de los matrimonios pasa por tres fases. La fase 1 es el éxtasis o el encantamiento. Este ocurre durante el noviazgo y los primeros días del matrimonio, cuando reina el romance. Todo es maravilloso, y el cónyuge no puede hacer nada mal. Cualesquiera faltas menores o diferencias, cree la pareja, no interferirá con su relación.
La fase 2 es la realidad o el conflicto, la fase donde la pareja reconoce que los dos no siempre ven todo igual. Gradualmente empiezan a reconocer que no se casaron con quien creían que se casaron. Empiezan a ver que la otra persona tiene faltas reales y que tienen diferencias fuertes sobre ciertos asuntos. Poco a poco (o en algunos casos, rápidamente) empiezan los conflictos entre ellos.
De esta fase de realidad o conflicto, las parejas pasan a otra de tres direcciones. Algunas parejas deciden que no pueden manejar sus diferencias y escogen el divorcio. Otras proceden a adoptar un statu quo infeliz, donde sólo co-existen. Un tercer grupo aprende a manejar sus desacuerdos y a prevenir y/o resolver sus conflictos. Como resultado, avanzan a una relación de maduración o crecimiento y desarrollo. Para estas parejas, los desacuerdos matrimoniales o familiares les proveen el ambiente propicio para progresar y entrenarse en la marcha para aplicar los principios bíblicos. Consiguen una cosecha de justicia porque han aprendido la habilidad importante de resolver conflictos.
Pero la pregunta es, ¿cómo lograr ser pacificador(a) en vez de guerrero(a)? ¿Qué es menester hacer para prevenir y resolver los conflictos bíblicamente? Entender el porqué los desacuerdos son inevitables y la razón para que surjan los conflictos es un factor importante. Tener una respuesta clara a la pregunta, “¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros?” (Sant. 4:1) es el primer paso.

  Fuentes de Conflicto

Miembros de la misma familia pueden diferir en personalidad, perspectiva, valores, dones y habilidades, intereses, gustos, disgustos, nivel de educación, inteligencia y adiestramiento. Estas disparidades proveen frecuentemente la ocasión para desacuerdos y malentendidos que pueden producir contención. Así que, el ser diferente es un contribuyente mayor de conflictos familiares.
Por los dones y talentos disimilares que Dios nos ha dado (Rom. 12:4–6), podemos tener un interés más profundo de ciertas cosas que tienen otros miembros de la familia. Es fácil pensar que todos deben ser tan devotos a un asunto particular como somos nosotros. Si no, podemos convertirnos en tratar de forzarlos, y comunicarles que debe ser algo mal con ellos por su falta de entrega.
Estilos de hacer decisiones contrastantes pueden llevar la familia a riñas. Algunas personas hacen las decisiones muy rápidamente, otros muy lentamente. Un grupo estudia rápidamente la situación y llega a una pronta conclusión, para no dilatar. El otro grupo analiza y reanaliza, esperando y cosechando más data antes de decidir, para no actuar precipitadamente. Mientras el primer grupo se desespera con el segundo, el segundo puede sentir presión del primero, y la tensión se convierte en contención.
Estilos de vida diferentes pueden igualmente causar problemas en la casa. Una pareja de 65 años habían estado riñendo por años. Era evidente que eran opuestos en muchas maneras, pero especialmente en el ritmo de sus vidas. A los 65, ella todavía estaba viviendo en el carril rápido. Apurándose dondequiera que fuera, trabajaba de tiempo completo como enfermera y no tenía pensado retirarse. Su esposo no era así y nunca había sido. Era lento, muy, muy lento. Cuando movía, era casi. Parecía que lo único que hacía rápido era cansarse. Desde hace mucho tiempo había jubilado de empleo de tiempo completo.
Cuando salía su esposa en las mañanas, ella pedía que él hiciera ciertas cosas en la casa, y él respondía con un “mmmm”. Al regresar, encontraba ella muchas cosas sin hacer. Cada vez que pasaba, se fastidiaba más. El prometió cambiar, pero nunca a su satisfacción de ella. Al fin, su coraje se intensificó a tal punto que en varias ocasiones ¡hasta sacaba el cuchillo y lo correteaba alrededor de la casa!
La puntualidad es otro área en donde difieren las personas. Para algunas personas, estar a tiempo o antes de tiempo es una prioridad muy alta. Se deben cumplir los horarios a pesar de lo que ocurre. Para otras, la puntualidad no es crucial. Si llegan cerca del tiempo designado o por lo menos antes del final del evento, está bien. La flexibilidad y sensibilidad a las necesidades son más significantes a ellos que la puntualidad.
Aun el asunto de cómo se prepara la comida puede ser un catalizador para discordia familiar. Un médico y su esposa experimentaba desgarro familiar severo. Aunque había desarrollado conflictos acerca de muchas cosas, uno de los más calientes tenía que ver con la preparación de la comida. Por su preocupación con colesterol, el pensaba que ella debía cocinar todo con agua. Ella mantenía que cocinar con el aceite correcta estaba satisfactoria. Además, ella consideraba la cocina como su propio reino, y no le gustaba que él le dijera qué hacer en su reino.
Diferencias de edad, adiestramiento, prioridades, valores o experiencia pueden explicar muchas variaciones de perspectiva entre padres e hijos. Al relacionarse con sus hijos, los padres deben tomar en cuenta las diferencias de edad y experiencia. Deben acordarse de las palabras de Pablo, “Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; mas cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño.” (1 Cor. 13:11). Los padres deben recordar que hay una manera infantil de ver las cosas igual que una manera adulta.
Las áreas en los cuales miembros de la familia pueden diferir son casi innumerables. He ilustrado algunos arriba. La lista que sigue cubre algunos de los asuntos más comunes en donde los miembros de la familia pueden tener opiniones diferentes:
  1.      Los conceptos de matrimonio y relaciones familiares.
  2.      El papel del esposo y la esposa y sus responsabilidades.
  3.      Objetivos ocupacionales y profesionales.
  4.      Límites entre miembros de la familia (compartiendo, privacidad, libertad, individualidad, unidad, etc.) y con gente fuera de la familia.
  5.      Finanzas.
  6.      Preferencias en recreación y tiempo libre.
  7.      Asistencia a la iglesia y envolvimiento, convicciones espirituales.
  8.      Esperanzas acerca del número de hijos, espaciamiento de hijos, relaciones con los hijos, razones por tener hijos, el entrenamiento y disciplina de los hijos, si los hijos tienen prioridad sobre el cónyuge de uno.
  9.      Cómo demostrar el afecto y en cuáles maneras.
  10.      Relaciones sociales, amistades.
  11.      Asuntos sexuales.
  12.      Lo que constituye comportamiento apropiado, etiqueta, costumbres.
  13.      Filosofía de la vida.
  14.      Relaciones con los padres o los suegros.
  15.      Valores y metas.
  16.      Cómo hacer decisiones mayores, y aun a veces menores.
  17.      Tareas de la casa; lo que constituye una casa limpia, y quien es responsable.
  18.      La cantidad de tiempo que pasan juntos.
  19.      Devociones familiares, oraciones, estudio de la Biblia (¿Si? ¿Qué? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Cuánto?).
  20.      La casa: comprar o rentar; manutención y muebles.

Aun en los mejores familias hay diferentes perspectivas. Es un dado. Esperar que ocurre y no desequilibrarse. Reconocer que no todo es asunto de lo correcto o incorrecto, malo o bueno; algunas cosas simplemente son diferentes. Pero aguas, porque las diferencias que no se manejan apropiadamente con facilidad se pueden cambiar un hogar armonioso en una zona de guerra.

  Buscando las Raíces de los Conflictos

Pero ¿por qué se conviertan tan fácilmente las perspectivas diferentes en conflictos? Las Escritura declara que tenemos conflictos por nuestros deseos que luchan adentro de nosotros; porque queremos algo que no podemos tener (Sant. 4:1–3). En otras palabras, las diferencias muchas veces se tornan a conflictos porque somos egoístas. Queremos que los miembros de la familia vean las cosas como nosotros las veamos, que creen lo que nosotros creemos, que actúan como queremos que actúan, o que hagan lo que queremos que se haga. Y cuando no cooperan, nos frustramos. Luego, por nuestro egoísmo, respondemos en una variedad de maneras pecaminosas. Puede que tratamos de forzar los miembros de la familia a sumisión por sermonearlos, gritarles, o argüir incansablemente. Tal vez desenfrenamos y los castigamos verbalmente o aun físicamente. O puede ser que usamos maneras más sutiles para presionarlos a someter o lastimarlos por no estar de acuerdo con nosotros. Hacemos pucheros, retiramos, lloramos, o fruncimos el entrecejo, o somos silenciosos, no cooperativos, o pródigos. Porque nuestros deseos se bloquean, nuestros esfuerzos a controlar la situación producen conflictos.
Piensa en sus propias experiencias. Puede que sientes que no recibes suficiente sostén emocional, respeto, aprobación, afirmación, o afecto de otros miembros de la familia. Puede que estás buscando más ayuda física en el hogar y sientes que los demás te toman ventaja. O tal vez quieres algo espiritual, como que estén de acuerdo con tu interpretación de la Escritura, conformidad a tus normas de lo correcto y lo incorrecto, o mejoría en el caminar con el Señor de algún miembro de la familia. ¿Cómo reaccionas cuando los demás no cumplen tus deseos? ¿Y por qué reaccionas de esta manera?
Santiago nos desviste de todo nuestros pretensiones piadosos y llega al raíz de muchos de nuestros conflictos interpersonales. Con gran valentía y claridad, explica que si tus deseos te llevan a conflictos en el hogar, el verdadero problema es tu deseo consumidor de satisfacerte a ti mismo. Santiago dice, en efecto, “Tu peleas y riñas porque eres egoísta. Tienes motivos equivocados. En verdad no tienes cuidado de la gloria de Dios o el bien de los demás. Mayormente tienes cuidado de ti mismo, tu reputación, tu propio placer. Para conseguir lo suyo, aun tratas de manipular a Dios y otros miembros de la familia.” (Sant. 4:1–3)

  Conflicto por la Causa de la Justicia

A veces la discordia se levanta por una razón radicalmente diferente. La Escritura nos recuerda que a veces la gente nos van a oponer porque representamos la justicia. “Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo.” (Mat. 5:10–11).
Los creyentes pueden esperar oposición en la sociedad. Pero Jesús también nos advierte de discordia similar adentro del círculo familiar. “Porque he venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra; y los enemigos del hombre serán los de su casa.” (Mat. 10:35–36). En ocasión, la discordia familia se presenta porque alguien (una esposa, un esposo, un padre, o un hijo) representa la justicia y otros se oponen a aquella justicia.
La rectitud de Abel trajo la ira de su hermano Caín (Gen. 4). Asimismo, los hermanos de José lo odiaban (Gen. 37). Y así, aun en el hogar del creyente hay veces que los miembros de la familia se van a perturbar por sus convicciones de él o ella. En ocasiones, aun tú puedes ser el que se perturbe por alguna convicción justo o acción de otro miembro de la familia. Desafortunadamente, en este lado del cielo todos somos capaces de oponer la voluntad de Dios y disgustarnos con aquellos que buscan obedecerlo.
Mi esposa, por ejemplo, puede querer alcanzar una persona con necesidad después del culto dominical. Carol siente que esta persona está herida, y desea ayudar a sostener la carga de aquella persona y dar ánimo. Ella lo ve como una acción de justicia, y ¡tiene razón! Cuando me pregunta si está bien, afuera le asiento, pero internamente no estoy de acuerdo. No estoy pensando en lo que Jesús quiere o lo que necesita la otra persona. Todo lo que pienso yo es que quiero llegar a casa. Tengo hambre. He tenido una semana ocupada. Quiero vestirme en fachas y relajarme.
Cuando al fin llega al carro (después de 15 minutos), le comunico de una manera u otra que me opongo a lo que hizo. ¿Qué pasa aquí? Estamos en conflicto porque Carol quería alcanzar a alguien en el nombre de Jesús, pero yo me irrité por su acción de justicia.
Si, la discordia ocasionalmente se da en la familia porque un miembro se preocupa por la justicia y otros miembros de la familia, por lo menos temporalmente, no están preocupados. Me gustaría pensar que cada vez que he tenido conflicto con otro miembro de la familia, es porque he estado representando a Cristo. Pero en muchas ocasiones, la razón de nuestros conflictos es porque he reaccionado con egoísmo a nuestros diferencias o a la justicia de la otra persona. Demasiados veces, he sido culpable de lo que condena Santiago. He deseado algo y no lo he conseguido. Ah, podría dar todas las razones espirituales en el mundo porque mis deseos eran correctos y por eso justificarme por estar enfadado. Pero la verdad es que estaba sufriendo más por la causa de mi ego que por la justicia.
Y lo que es verdad de mí es muchas veces verdad de los demás. Por la naturaleza de mi ministerio, constantemente estoy involucrado en tratar de ayudar a personas que enfrenten conflictos en sus hogares. Algunas que llegan para consejería están sufriendo verdaderamente por la justicia. Necesitan ánimo, sostén, afirmación, oración, aceptación, y compasión. En otros casos, encuentro que la discordia se asocia con egoísmo, esperanzas no razonables, una actitud pedante, un deseo de controlar, celos, ambición excesiva, insensibilidad, motivos no piadosos, buscar el placer, idolatría de sí mismo (yo-ismo), y una vida orientada a sensaciones.
Estas personas no necesitan ánimo para continuar tales actitudes. Necesitan un llamado bondadoso a arrepentimiento y confesión del pecado. Necesitan que les urgen buscar a Jesucristo para el perdón y el poder de cambiar la orientación de sus vidas. Actitudes y acciones pecaminosas se deben despojar y actitudes y acciones bíblicos (Centradas en Cristo) se deben desarrollar por el poder del Espíritu Santo que mora adentro.

  Cómo Prevenir Conflictos Familiares
¿Cómo previenes y resuelves los conflictos familiares? El primer paso es estar consciente que en cualquier relación terrenal muy cercana, los desacuerdos fácilmente se pueden convertir en conflictos. Lo más cercano la relación, lo más potencial hay para contención y discordia. Para prevenir eso de ocurrir en tu familia, reconozca las maneras específicas en lo cual están similares y en cuales están disimilares. No echas tus disparidades debajo del tapete. Sáquelos y discútalos cabalmente.
Luego busca discernir la razón porque estos diferencias tiendan a escalar en conflictos. Sea honesto delante de Dios. Pregúntate: Me molestan tanto estas diferencias y desacuerdos porque soy egoísta? ¿Es porque quiero mi manera y la otra persona no está cooperando con mis demandas? ¿Tengo envidia? ¿Tengo motivos no piadosos? Diagnostica lo que pasa en tu vida y tus relaciones por usar la Escritura como norma. Dondequiera que encuentras tus actitudes, pensamientos, emociones y acciones siendo no-bíblicos, toma la responsabilidad entera de ellos. ¡No buscas echar la culpa a otro o racionalizarte! Al contrario, reconozca tus pecados y mira a Jesús por su perdón. Fija tus ojos en él, y confía en él para ayudarte a responder a tus diferencias y desacuerdos en una manera más piadosa y más constructiva. Por su poder, la discordia familiar se puede cambiar en concordia familiar.

TAREAS PARA ESTUDIO Y APLICACIÓN
Haz las tareas individualmente, y luego comenta tus respuestas con tu cónyuge o tu grupo de estudio.

  1.      Describe tu reacción(es) usual a los desacuerdos o conflictos. Analiza las actitudes detrás de las reacciones.
 
  2.      ¿Que indica la Escritura acerca de la facilidad o dificultad de llevarse bien con otras personas? Sostener tu respuesta con la Escritura.
 
  3.      ¿Estás de acuerdo con la declaración de Paul Tournier sobre incompatibilidad emocional? ¿Por qué o porque no? Sostener tu respuesta bíblicamente.
 
  4.      ¿Estas de acuerdo que los desacuerdos son inevitables? ¿Por qué son inevitables?
 
  5.      Cuando la gente que viven juntos dicen que nunca tienen ningunos desacuerdos o conflictos, ¿qué puede estar ocurriendo?
 
  6.      Este capítulo menciona varias razones por que es importante la resolución de conflicto. ¿Cuáles son? Identificar Escritura que lo sostiene. Añadir tus propios perspectivas acerca de por que resolver conflictos es importante. Ilustrar de la Biblia, historia, literatura, o su propia experiencia los efectos debilitantes de conflictos sin resolución.
 
  7.      Identificar y describir varios desacuerdos y conflictos que has tenido con otros miembros de la familia. Usando la información en este capítulo, analiza las razones por los desacuerdos, y por que llegaron a ser conflictos.
 
  8.      Completar la Gráfica de Inventario de Personalidad (vea abajo). Evaluar cada miembro de su familia inmediata. ¿Con cuál miembro de la familia tienes más similitud? ¿Menos similitud? ¿Con cuál miembro de la familia encuentras más fácil llevarse bien? ´¿Más difícil? Notar cómo sus similitudes y disimilitudes han afectado sus relaciones personales y familiares.
 
  9.      Llenar la Forma de Análisis de Conflicto (después de la Gráfica de Inventario de Personalidad). Notar con cuales miembros de la familia tienes tendencia de tener más desacuerdos. ¿Por qué crees que es así? ¿Cómo ten ha afectado estos desacuerdos tu relación con estas personas? ¿Cómo han afectado a toda la familia tus desacuerdos?
 
GRÁFICA DE INVENTARIO DE PERSONALIDAD
En una escala de 0–4, califícate a ti mismo y a cada miembro de tu familia en las siguientes cualidades. Cuatro es el más alto, y 0 el más bajo. Por ejemplo, en el número 1, si eres muy paciente, califícate con un 4. Si no tienes nada de paciencia, date un 0. Si estás en medio, califícate de 1 al 3. (H. = hijo). Haz un círculo en cualquier área donde tu y tus miembros de la familia difieren en más de un punto. Discutir cómo las diferencias o similaridades afectan tus relaciones familiares.

  CUALIDADES:CALIFICACIONES: Tu/ cónyuge/ H.1/H.2/H.3/H.4
  1.      Paciente

  2.      Aceptar a otros

  3.      Terco

  4.      Fácil de fastidiar

  5.      Lleno de resentimiento

  6.      Perdonador

  7.      Dominador

  8.      Ego-céntrico

  9.      Bondadoso

  10.      Mandón

  11.      Buen escuchador

  12.      Razonable

  13.      Considerado, piensa en los demás

  14.      Ensimismado

  15.      Deprimente

  16.      Abierto

  17.      Expresivo

  18.      Práctico

  19.      Eficiente

  20.      Limpio, organizado

  21.      Extravagante

  22.      Responsable

  23.      Afectivo

  24.      Atlético

  25.      Ambicioso

  26.      Tiene una voz placentero

  27.      Musicalidad

  28.      De buen vestir

  29.      Olvidadizo

  30.      Perezoso

  31.      Extrovertido

  32.      Impulsivo

  33.      Artístico

  34.      Calmado

  35.      Convencional

  36.      Le gusta la naturaleza, acampar, etc.

  37.      Gastalón

  38.      Iniciador

  39.      Seguro, confiado

  40.      Generoso

  41.      Agresivo

  42.      Puntual

  43.      Flexible

  44.      Aventado

  45.      Decisivo

  46.      Sentimental

  47.      Dilatador


FORMA DE ANÁLISIS DE CONFLICTOS

Abajo indica la medida aproximada de acuerdo o desacuerdo entre tu y otros miembros de tu familia en cada detalle de la lista. Usa esta escala (H =hijo):

  1= Siempre están de acuerdo
  2= Frecuentemente de acuerdo
  3= A veces en desacuerdo
  4= Frecuentemente en desacuerdo
  5= Casi siempre en desacuerdo
  6= Siempre en desacuerdo
  7= No aplica

Después de completar la calificación, haz un círculo en los números de los detalles que proveen la potencial más alto de conflicto.
Tu: y Cónyuges/ y H.1/ y H.2/ y H.3/ y H.4

      1.      Uso de Dinero

      2.      Asuntos recreacionales

      3.      Asuntos espirituales

      4.      Amistades (Vida social)

      5.      Demostraciones de afecto

      6.      Comportamiento correcto o apropiado

      7.      Filosofía de la vida, metas

      8.      Tiempo que pasan juntos

      9.      Hacer decisiones mayores

      10.      Actividades de tiempo libre

      11.      Decisiones de carrera

      12.      Orar y Estudiar la Biblia juntos

      13.      Donde vivir

      14.      Tipo de casa para vivir

      15.      Maneras de tratar a abuelos, padres, y suegros

      16.      El uso de alcohol o drogas

      17.      Como resolver desacuerdos

      18.      Asuntos sexuales

      19.      Asuntos de vida familiar: entrenamiento y disciplina, diversiones, etc.

      20.      Asistencia a la iglesia y involucramiento

      21.      Expectativas matrimoniales y familiares

      22.      Asuntos ocupacionales, escolásticos, y profesionales

      23.      Tareas y responsabilidades en familia

      24.      Papeles del Esposo/de la Esposa y sus responsabilidades

En una escala de 0–10 (0=más bajo; 10= más alto) indica tu nivel de satisfacción en general con su relación ahora con cada miembro de la familia.
 


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