Por eso, el que tiene este cargo ha de ser irreprensible debe ser apto para enseñar;no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. 1Timoteo3:2,6
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Los dones, Los energemas u operaciones del Padre
Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo. Y hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo. Y hay diversidad de operaciones, pero es el mismo Dios el que hace todas las cosas en todos. 1 Corintios 12:4-6
A través de las épocas Dios se ha manifestado a su pueblo y le ha dado regalos para bendecirlo, restaurarlo, liberarlo, utilizarlo y para alcanzar la estatura del Varón Perfecto. Hablando de estos regalos leemos en el Salmos 68:18 que indica “Subiste a lo alto, cautivaste la cautividad, tomaste dones para los hombres, y también para los rebeldes, para que habite entre ellos JAH Dios.”
En la época del Antiguo Testamento, que es la época del Padre, vemos que el Padre empezó a dar de sus dones a su pueblo, que son identificados como energemas u operaciones; y Él los sigue dando hasta nuestros días (1 Co. 12:6; Hch. 2:22). Luego en la época que abarcan los Evangelios, que es la época del Hijo, vemos que Jesús también dio de sus dones a la iglesia, que son las diakonías o los cinco ministerios y los seguirá dando hasta que lleguemos al estado del varón perfecto y la medida de la estatura de la plenitud de Cristo (1 Co. 12:5; Ef. 4:8-13). Asimismo, en la época iniciada desde el libro de Hechos hasta nuestros días, la época del Espíritu Santo, lo vemos a Él dando de sus dones o carismas a la Iglesia (1 Co. 12:7-11; Ro. 12:6-8) a palabra “operaciones” se traduce del griego “energema” que significa: Un efecto, operación, trabajando, cosa forjada, efectuar operación, actividad; el sufijo “ma” hace que sea el resultado o el efecto de “enérgeia”; es el resultado de la energía de Dios.
Asimismo “energema” se deriva de “energeo”que se usa para indicar ser activo y eficiente; literalmente significa trabajar en, estar activo, operante, hacer, (ser) eficaz (ferviente), ser poderoso en, trabajar (eficazmente en), presentar el poder.
En el libro de los Hechos 2:22 la Biblia nos indica que los dones, energemas u operaciones del Padre se
manifiestan a través de milagros, prodigios y señales; pues indica ”Varones israelitas, escuchad estas palabras: Jesús el Nazareno, varón confirmado por Dios entre vosotros con milagros, prodigios y señales que Dios hizo en medio vuestro a través de El, tal como vosotros mismos sabéis.” (LBLA)
Ahora bien, a lo largo de la Biblia vemos que los dones, energemas u operaciones del Padre actuaron a través de sus siervos para realizar obras poderosas, veamos:
1. Milagros, Hechos 2:22
La palabra “milagros” se traduce del griego “dumanis” que, entre otras cosas, significa: Fuerza, poder milagroso, capacidad, abundancia, es decir, poder, milagro, fuerza, fuerza de poder; se usa de obras de origen y carácter sobrenatural, que no podrían ser producidas por agentes y medios naturales.
En ese sentido, en Marcos 6:1 al 6 leemos que el Señor no hizo ningún milagro en Nazaret a causa de la incredulidad de la gente, sino solamente algunas sanidades; lo cual deja ver el énfasis de los milagros en beneficio del cuerpo.
Veamos algunos de ellos:
a. Para realizar sanidades
i. Naamán, 2 Reyes 5:1-14
Cuando Naamán llegó a Israel buscando la sanidad de su cuerpo, Eliseo lo envió a sumergirse siete veces en el río Jordán, y Dios milagrosamente lo sanó (Mt. 10:8).
En este ejemplo vemos que el energema estaba en Eliseo.
ii. La mujer del flujo de sangre, Marcos 5:25-34
Esta mujer gastó todo su dinero buscando su sanidad, pero hasta que tocó el borde del manto del Señor Jesús quedó sana (Mt. 10:8; Lc 5:17; 18:27). Acá vemos el energema actuando en el Señor Jesús.
iii. El cojo de la puerta del templo, Hechos 3:1-8
Este hombre era cojo de nacimiento y lo llevaban a la puerta del Templo a pedir limosna, pero cuando le pidió dinero a Pedro y a Juan, Pedro impulsado por el Espíritu Santo, lo sanó en el nombre de Jesús. Este relato nos muestra el energema actuando en Pedro para sanar al cojo.
b. Para levantar de los muertos
i. El hijo de la sunamita, 2 Reyes 4:32-35
El Señor uso al profeta Eliseo, para revivir al hijo de la sunamita; demostrando que su poder y autoridad ha está, incluso, sobre la muerte.
ii. Lázaro, Juan 11:41-44
Lázaro llevaba cuatro días de haber muerto y su cuerpo estaba en descomposición, pero el Señor Jesucristo lo levantó (Jn. 11:25, 12:1).
Este es un ejemplo del energema del Padre actuando en la época del Hijo.
iii. Eutico, Hechos 20:9-10
Eutico estaba escuchando al apóstol Pablo desde una ventana, pero se durmió, se cayó desde el tercer piso y murió; sin embargo, Pablo con el poder del energema del Padre, se tendió sobre él para volverlo a la vida.
En este ejemplo vemos el energema del Padre actuando en la época del Espíritu Santo.
2. Prodigios, Hechos 2:22
La palabra “prodigios” se traduce del griego “teras” que se refiere a algo extraño que hace que el observador se maraville y le provoque asombro; significa prodigio, presagio y maravilla.
Este tipo de operación se manifiesta para evidenciar el poder de Dios para anunciar futuros acontecimientos.
a. Deteniendo la lluvia, 1 Reyes 17:1; 18:1
El Señor dejó ver su poder sobre las condiciones atmosféricas del clima (Mr. 4:41); primero, para detener la lluvia y luego, para dejarla caer nuevamente por medio de la palabra que Elías, haciendo uso del don del Padre, declaró (Job 37:6)
b. Deteniendo el sol, Josué 10:12-14
Este prodigio afectó la actividad de todo el planeta tierra. Josué le ordenó al sol detenerse y a la luna, y el Señor respaldando esa orden los detuvo (Job 38:31-33; Jer. 31:35; 33:25)
Un evento similar ocurrió cuando el Señor hizo retroceder diez grados el sol, atendiendo a la oración de Isaías (2 R. 20:9-11)
c. El Señor camina sobre el agua, Mateo 14:24-25
El Señor Jesús caminó sobre el mar hacia los discípulos que estaban en la barca en medio del mar, mientras ésta era azotada por las olas.
3. Señales, Hechos 2:22
El término “señales” se traduce del griego “semeion” que indica algo sobrenatural y, entre otros, significa: Milagro, señal, símbolo, marca, prenda y signo; está relacionada con “semaino”: que significa: Dar una señal, y “sema” que es: signo; se deriva de ”semaino” que se utiliza para dar una signo público o señal; significa dar una señal, indicar y dar a entender.
El propósito de las señales es indicar y dar a entender el camino a seguir y en consecuencia conocer su final; por ello es necesario observarlas y discernirlas para conocer su procedencia, porque hay señales de parte de Dios y del enemigo (Jn. 2:11, 4:43-49; Dt. 13:1; 2 Ts. 2:1-9)
Hay tres períodos en el caminar del cristiano, en los que se manifiestan las señales, veamos:
a. Señales en Egipto, Éxodo 7:9-12; 20-21; 8:5-6; 8:16-17; 24; 9:2-6; 8-10; 18-25; 10:12-15; 21-23; 12:29-30
El Señor mostró su poder a través de las plagas que envió a Egipto con el propósito de que Faraón dejara libre a Israel para que le celebrara fiesta en el desierto.
Esto nos enseña que cuando no éramos cristianos, el Señor mostró sus señales con el propósito de sacarnos del mundo por medio del sacrificio de Jesucristo.
b. Señales en el desierto, Éxodo 13:21-22
El desierto es un período de prueba y de definición para los hijos de Dios, en donde debe ser liberado, restaurado y debe madurar para conquistar Canaán. Veamos:
i. La columna de fuego y la nube, Ex. 13:21-22
La columna y la nube representan la protección del Señor y la guianza del Espíritu Santo.
ii. La apertura del mar rojo, Ex. 14:21-27
Esto representa el bautismo en agua para el nuevo nacimiento del alma.
iii. La vara de Aarón que retoñó, Nm. 17:1-10
Nos habla de la obra de restauración que el Espíritu Santo hace en la vida del cristiano.
c. Señales en Canaán, Josué 3:14-17
En Canaán se disfruta de la abundancia de Dios (Dt. 8:8-10), veamos dos ejemplos:
i. Cruzan el río jordán, Jos. 3:14-17
Esto es figura del bautismo del Espíritu Santo que todo cristiano necesita para disfrutar de la vida en abundancia.
ii. Cesa el maná, Jos. 5:12
Concluye la provisión del maná, por lo que en adelante el pueblo debe trabajar para obtener el alimento sólido (1 Co. 3:1-2) es maravilloso saber y comprender que desde el Antiguo Testamento el Padre ha dado de sus dones, energemas u operaciones a su pueblo para mostrar su poder; éstos actuaron con propósitos como manifestar su respaldo a sus siervos, la protección y la provisión material a su pueblo, su poder sobrenatural, incluso sobre la muerte.
Las operaciones actuaron haciendo maravillas, señales y prodigios para glorificar el nombre del Señor,
manifestarse a su pueblo, bendecirlo y liberarlo.
Tipo de Archivo: PDF | Tamaño: MBytes | Idioma: Spanish | Categoría: Capacitación Ministerial
Los dones, Los energemas u operaciones del Padre
Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo. Y hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo. Y hay diversidad de operaciones, pero es el mismo Dios el que hace todas las cosas en todos. 1 Corintios 12:4-6
A través de las épocas Dios se ha manifestado a su pueblo y le ha dado regalos para bendecirlo, restaurarlo, liberarlo, utilizarlo y para alcanzar la estatura del Varón Perfecto. Hablando de estos regalos leemos en el Salmos 68:18 que indica “Subiste a lo alto, cautivaste la cautividad, tomaste dones para los hombres, y también para los rebeldes, para que habite entre ellos JAH Dios.”
En la época del Antiguo Testamento, que es la época del Padre, vemos que el Padre empezó a dar de sus dones a su pueblo, que son identificados como energemas u operaciones; y Él los sigue dando hasta nuestros días (1 Co. 12:6; Hch. 2:22). Luego en la época que abarcan los Evangelios, que es la época del Hijo, vemos que Jesús también dio de sus dones a la iglesia, que son las diakonías o los cinco ministerios y los seguirá dando hasta que lleguemos al estado del varón perfecto y la medida de la estatura de la plenitud de Cristo (1 Co. 12:5; Ef. 4:8-13). Asimismo, en la época iniciada desde el libro de Hechos hasta nuestros días, la época del Espíritu Santo, lo vemos a Él dando de sus dones o carismas a la Iglesia (1 Co. 12:7-11; Ro. 12:6-8) a palabra “operaciones” se traduce del griego “energema” que significa: Un efecto, operación, trabajando, cosa forjada, efectuar operación, actividad; el sufijo “ma” hace que sea el resultado o el efecto de “enérgeia”; es el resultado de la energía de Dios.
Asimismo “energema” se deriva de “energeo”que se usa para indicar ser activo y eficiente; literalmente significa trabajar en, estar activo, operante, hacer, (ser) eficaz (ferviente), ser poderoso en, trabajar (eficazmente en), presentar el poder.
En el libro de los Hechos 2:22 la Biblia nos indica que los dones, energemas u operaciones del Padre se
manifiestan a través de milagros, prodigios y señales; pues indica ”Varones israelitas, escuchad estas palabras: Jesús el Nazareno, varón confirmado por Dios entre vosotros con milagros, prodigios y señales que Dios hizo en medio vuestro a través de El, tal como vosotros mismos sabéis.” (LBLA)
Ahora bien, a lo largo de la Biblia vemos que los dones, energemas u operaciones del Padre actuaron a través de sus siervos para realizar obras poderosas, veamos:
1. Milagros, Hechos 2:22
La palabra “milagros” se traduce del griego “dumanis” que, entre otras cosas, significa: Fuerza, poder milagroso, capacidad, abundancia, es decir, poder, milagro, fuerza, fuerza de poder; se usa de obras de origen y carácter sobrenatural, que no podrían ser producidas por agentes y medios naturales.
En ese sentido, en Marcos 6:1 al 6 leemos que el Señor no hizo ningún milagro en Nazaret a causa de la incredulidad de la gente, sino solamente algunas sanidades; lo cual deja ver el énfasis de los milagros en beneficio del cuerpo.
Veamos algunos de ellos:
a. Para realizar sanidades
i. Naamán, 2 Reyes 5:1-14
Cuando Naamán llegó a Israel buscando la sanidad de su cuerpo, Eliseo lo envió a sumergirse siete veces en el río Jordán, y Dios milagrosamente lo sanó (Mt. 10:8).
En este ejemplo vemos que el energema estaba en Eliseo.
ii. La mujer del flujo de sangre, Marcos 5:25-34
Esta mujer gastó todo su dinero buscando su sanidad, pero hasta que tocó el borde del manto del Señor Jesús quedó sana (Mt. 10:8; Lc 5:17; 18:27). Acá vemos el energema actuando en el Señor Jesús.
iii. El cojo de la puerta del templo, Hechos 3:1-8
Este hombre era cojo de nacimiento y lo llevaban a la puerta del Templo a pedir limosna, pero cuando le pidió dinero a Pedro y a Juan, Pedro impulsado por el Espíritu Santo, lo sanó en el nombre de Jesús. Este relato nos muestra el energema actuando en Pedro para sanar al cojo.
b. Para levantar de los muertos
i. El hijo de la sunamita, 2 Reyes 4:32-35
El Señor uso al profeta Eliseo, para revivir al hijo de la sunamita; demostrando que su poder y autoridad ha está, incluso, sobre la muerte.
ii. Lázaro, Juan 11:41-44
Lázaro llevaba cuatro días de haber muerto y su cuerpo estaba en descomposición, pero el Señor Jesucristo lo levantó (Jn. 11:25, 12:1).
Este es un ejemplo del energema del Padre actuando en la época del Hijo.
iii. Eutico, Hechos 20:9-10
Eutico estaba escuchando al apóstol Pablo desde una ventana, pero se durmió, se cayó desde el tercer piso y murió; sin embargo, Pablo con el poder del energema del Padre, se tendió sobre él para volverlo a la vida.
En este ejemplo vemos el energema del Padre actuando en la época del Espíritu Santo.
2. Prodigios, Hechos 2:22
La palabra “prodigios” se traduce del griego “teras” que se refiere a algo extraño que hace que el observador se maraville y le provoque asombro; significa prodigio, presagio y maravilla.
Este tipo de operación se manifiesta para evidenciar el poder de Dios para anunciar futuros acontecimientos.
a. Deteniendo la lluvia, 1 Reyes 17:1; 18:1
El Señor dejó ver su poder sobre las condiciones atmosféricas del clima (Mr. 4:41); primero, para detener la lluvia y luego, para dejarla caer nuevamente por medio de la palabra que Elías, haciendo uso del don del Padre, declaró (Job 37:6)
b. Deteniendo el sol, Josué 10:12-14
Este prodigio afectó la actividad de todo el planeta tierra. Josué le ordenó al sol detenerse y a la luna, y el Señor respaldando esa orden los detuvo (Job 38:31-33; Jer. 31:35; 33:25)
Un evento similar ocurrió cuando el Señor hizo retroceder diez grados el sol, atendiendo a la oración de Isaías (2 R. 20:9-11)
c. El Señor camina sobre el agua, Mateo 14:24-25
El Señor Jesús caminó sobre el mar hacia los discípulos que estaban en la barca en medio del mar, mientras ésta era azotada por las olas.
3. Señales, Hechos 2:22
El término “señales” se traduce del griego “semeion” que indica algo sobrenatural y, entre otros, significa: Milagro, señal, símbolo, marca, prenda y signo; está relacionada con “semaino”: que significa: Dar una señal, y “sema” que es: signo; se deriva de ”semaino” que se utiliza para dar una signo público o señal; significa dar una señal, indicar y dar a entender.
El propósito de las señales es indicar y dar a entender el camino a seguir y en consecuencia conocer su final; por ello es necesario observarlas y discernirlas para conocer su procedencia, porque hay señales de parte de Dios y del enemigo (Jn. 2:11, 4:43-49; Dt. 13:1; 2 Ts. 2:1-9)
Hay tres períodos en el caminar del cristiano, en los que se manifiestan las señales, veamos:
a. Señales en Egipto, Éxodo 7:9-12; 20-21; 8:5-6; 8:16-17; 24; 9:2-6; 8-10; 18-25; 10:12-15; 21-23; 12:29-30
El Señor mostró su poder a través de las plagas que envió a Egipto con el propósito de que Faraón dejara libre a Israel para que le celebrara fiesta en el desierto.
Esto nos enseña que cuando no éramos cristianos, el Señor mostró sus señales con el propósito de sacarnos del mundo por medio del sacrificio de Jesucristo.
b. Señales en el desierto, Éxodo 13:21-22
El desierto es un período de prueba y de definición para los hijos de Dios, en donde debe ser liberado, restaurado y debe madurar para conquistar Canaán. Veamos:
i. La columna de fuego y la nube, Ex. 13:21-22
La columna y la nube representan la protección del Señor y la guianza del Espíritu Santo.
ii. La apertura del mar rojo, Ex. 14:21-27
Esto representa el bautismo en agua para el nuevo nacimiento del alma.
iii. La vara de Aarón que retoñó, Nm. 17:1-10
Nos habla de la obra de restauración que el Espíritu Santo hace en la vida del cristiano.
c. Señales en Canaán, Josué 3:14-17
En Canaán se disfruta de la abundancia de Dios (Dt. 8:8-10), veamos dos ejemplos:
i. Cruzan el río jordán, Jos. 3:14-17
Esto es figura del bautismo del Espíritu Santo que todo cristiano necesita para disfrutar de la vida en abundancia.
ii. Cesa el maná, Jos. 5:12
Concluye la provisión del maná, por lo que en adelante el pueblo debe trabajar para obtener el alimento sólido (1 Co. 3:1-2) es maravilloso saber y comprender que desde el Antiguo Testamento el Padre ha dado de sus dones, energemas u operaciones a su pueblo para mostrar su poder; éstos actuaron con propósitos como manifestar su respaldo a sus siervos, la protección y la provisión material a su pueblo, su poder sobrenatural, incluso sobre la muerte.
Las operaciones actuaron haciendo maravillas, señales y prodigios para glorificar el nombre del Señor,
manifestarse a su pueblo, bendecirlo y liberarlo.