domingo, 23 de diciembre de 2012

5 Bosquejos homiléticos para toda ocasión: Para ministros y obreros itinerantes


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. biblias y miles de comentarios
 
1.    Una Renovación Auténtica    
       Isaías 40:29 – 31

Introducción:    
Leyendo  el  capítulo    40  de  Isaías  podemos entender  mejor  el  significado  de  estos  últimos  versos.  Este capítulo  le  muestra  al  pueblo  de  Dios  el  poder  sobrenatural  y  la
soberanía de él mismo sobre la creación. Nos habla del control de Dios  sobre  la  naturaleza  y  sobre  la  gente,  de  protección  divina:
Vr. 10 y de protección cuando nos encontremos afligidos Vr. 17.    
Hoy  estaremos  predicando  bajo  el  tema  “Una  Renovación Auténtica”.  Para  una  renovación  auténtica  se  necesita  un acercamiento  auténtico  y  genuino;  se  necesita  una  elevación espiritual. El Salmista David decía: (Salmo 121:1).  
La  montaña,  espiritualmente  la  podemos  nombrar  el  lugar  del encuentro:
 El  lugar  donde  llegamos  a  Cristo  hecho  pedazos  y  él  nos restaura.
 El lugar donde las heridas emocionales son sanadas.
 El lugar donde no hay nadie que nos señale.
 El lugar donde una vida  marginada  y decrecida encuentra un lugar de preeminencia.
I.  Moisés  subió  al  monte  para  tener  un  encuentro  con  Dios.   Vs. 8
1.  Posterior  a  este  encuentro,  Dios  le  había  dado  a  Moisés  los Diez mandamientos.
a.  Fue  un  encuentro  maravilloso  el  que  disfrutó  Moisés  con Dios.  Siempre  que  nos encontramos  con  Dios, experimentamos un encuentro maravilloso (Éxodo 19:17).
b.  Cuando Moisés bajó se encontró con un becerro de oro.
2.  Moisés  se  enfurece  ante  tan  grade  pecado  y  rompió  las tablas de piedra.
a.  Tenemos  que  tener  cuidado,  porque  aún  cuando  creemos que  estamos  defendiendo  a  Dios,  nuestros  hechos  pueden ser ofensivos para Dios.
b.  En el capítulo 34 versos 8 y 9 Moisés clama a Dios por él y él se hace responsable por su falta.
3.  El monte Sinaí se convirtió en el monte de la restauración.
a.  Moisés hizo tres cosas que movieron a Dios: 
1) Se apresuró,
2) Bajó la cabeza hasta el suelo, y 
3) adoró.
b.  Los  tres  elementos  más  importantes  en  la  restauración.
Reconocer  nuestro  estado  de  emergencia,  humillarnos  hasta el suelo, adorar al soberano Dios.
II.  Subamos al monte de nuestra renovación.
1.  Cada uno de nosotros tenemos que reclamar es monte que nos llevará a una renovación autentica    (Josué 14:10).
a. Caleb  pidió  su  monte.    No  se  lamentó  por  los  años  que tuvo que esperar.
b. No podemos vivir lamentándonos de los errores pasados.
c. Nuestro monte de la renovación nos provee optimismo.
d. Nuestro  monte  de  la  renovación  nos  dice  subiendo  aunque esto nos cueste alguna incomodidad.
2.  Aunque la bendición es la misma para todos los que suben, no todos suben de la misma forma.
a.  Algunos tienen que subir por el monte de la oración.
b.  Otros por el monte de la humillación.
c.  Otros  subieron  y  ni  cuenta  se  dieron.    Estaban  tan destrozados  que  no  se  dieron  cuenta  que  Dios  estaba subiendo el monte con ellos.
d.  Jesús  mismo  subió  al  monte  y  tuvo  una  experiencia  sobre natural (Marcos 9: 2-9).    
III.    Restaurando lo perdido.
1.  Pediría usted:
a.  Restaura mi unción.
b.  Restaura mi compasión.
c.  Restaura mi deseo de trabajar en la casa de Dios.
d.  Restaura mi fidelidad.
e.  Restaura mi efectividad.
f.  Restaura tu gloria en mi vida.
g.  Restaura mi gozo.
h.  Restaura mi optimismo.
i.  Restaura mi relación contigo y con los demás. 
Conclusión: Quiero concluir con los versículos 29-31

2.    Recibiendo los beneficios de Dios 
       Salmo 103:1-5
Introducción:  En  este  Salmo  encontramos  al  salmista entablando  una  conversación  con  una  persona  muy  especial para  él.  Lo  encontramos  recordándose  a  sí  mismo  los beneficios  que  Dios  le  había  conferido.  Al  salmista  no  le interesaba el pasado  ni el futuro,  le interesaba el  hoy  que  él estaba  viviendo.  A  Dios  lo  que  le  interesa  es  nuestro  hoy  o nuestro  ahora.  Dios  siempre  actúa  en  nuestro  presente.  Sus beneficios son del presente.
En  este  salmo  encontramos  tres  beneficios  que  Dios  quiere darnos hoy.
I.  El  primer  beneficio  de  Dios  es  el  perdón  ―  “Él  es quien perdona todas tus iniquidades”.
1.  Por  medio  de  Jesucristo  el  cual  murió  por  nuestros pecados en la cruz.
2.  Por  medio  de  una  cancelación  de  deuda.  No  somos perdonados  por  nuestra  propia  justicia,  no  teníamos ninguna. (Romanos 5:1).
3.  El pecado nos hizo hijos ilegítimos. La redención nos ha hecho hijos reconocidos. (Deuteronomio 23:2a).
4.  Nos  da  libre  entrada  a  los  propósitos  de  la  redención a través de Cristo. (Romanos 8:1-2)
II. El segundo beneficio de Dios es Sanidad: “el que sana todas tus dolencias”.
1.  Dios  no  nos  quiere  ver  con  dolores.  El  ha  ofrecido sanidad para el ser humano (Isaías 53:4).
2.  El dolor es un síntoma no es la enfermedad en sí, si no una  manifestación  de  la  misma.  La  sanidad  divina  es tanto para la causa como el síntoma.
3.  Hay  dolores  físicos,  pero  también  hay  dolores  del alma.  Depresiones  emocionales,  heridas  psicológicas y  culpas  emocionales.  El  alma  humana  necesita sanidad y Dios se la da.
a.  Muchas personas están acudiendo al ministerio de la  sanidad  interna.  En  esta  noche  acuda  al ministerio de Sanidad de Cristo Jesús.
b.  Cicatrices  de  su  niñez,  no  pueden  tomar  parte  de su  vivir  diario.  Cuando  llegamos  a  Cristo  él  nos sana.
II.  El  tercer  beneficio  es  el  rescate:  “el  que  rescata  del hoyo tu vida”.
1.  La  soledad  es  un  hoyo.  La  peor  de  todas  las soledades es estar sin Dios.
a.  Cuando  llegas  a  tu  hogar  no  tienes  a  nadie  con quien compartir tus inquietudes.
b.  Deseas hablar con alguien y no tienes a nadie. Eso es lo que produce la vida sin Cristo, soledad.
2.  El fracaso  es un hoyo. El  que fracasa se siente solo, abandonado,  sin  nadie,  aunque  esté  rodeado  por muchos.  En  Jesucristo  hay  rescate  de  ese  hoyo profundo de la soledad.
a.  Cuantas  veces  has  fracasado  en  la  vida  y  todavía sientes que naciste para fracasar.
b.  Las  personas  que  más  admirabas  te  dejaron cuando  fracasaste.  Dios  nunca  te  deja  solo.  El  no te dejara ni te desamparara.
3.    La desesperación es un hoyo. La desesperación habla de la falta de esperanza que hay en nosotros. 
Conclusión:  Los  beneficios  de  Dios  son  para  todos  los  que confían en Dios.

3.   No Te Turbes
    Juan 14:1–14
Introducción:  Hoy  la  gente  se  pasa  buscando  de  esquina  a esquina  una  salida  para  un  problema  que  muchas  veces  en realidad  no  existe.   Por  tal  razón  Jesús  nos  aconseja  a  que meditemos  en  el  fundamento  que  ha  puesto  para  que  nosotros podamos obtener la victoria.    Este no es nuestro fundamento, no es  el  fundamento  de  un  apóstol,  obispo,  papa,  Gandhi  o Mohamed;  es  el  fundamento  que  Cristo  dejó  para  nosotros.  
Fundamento que desde los tiempos del Antiguo Testamento se fue poniendo  en  su  lugar.      Ese  es  el  fundamento  que  identifica  a Jesús con el  gran “YO SOY” del  Antiguo  Testamento. (Éxodo 3:13,  14).    Ese  es  el  fundamento  que  nos  satisface  cuando  nos encontramos espiritualmente hambrientos, 4:26. Es el fundamento que  nos  dice  que  él  es  pan  6:35.  Es  luz  8:12.  Es  puerta  10:7.  Es pastor 10:11. Es vida 11:25. Es Maestro y Señor 13:13.
Como  a  Jacob,  el  cielo  que  el  pecado  nos  cerró,  ahora  sería abierto.
Jesús ya había prometido que aquel cielo se abriría. (Juan 1:51).
I.  Cristo le anima a confiar sin dudar.
1.  Se  acercaba  el  fin  del  ministerio  terrenal  de  Cristo  y  era importante un fundamento sólido.
a.  Si creían en Dios sin haberle visto, debían creer mejor en Jesús a quien veían (v. 1).
b.  Creer  implica  aceptar  sin  dudar:    “Tener  por  cierto algo  que  el  entendimiento  no  alcanza  o  que  no  está comprobado o demostrado” (rae.es)
2.  Camino,  verdad  y  vida,  hablan  del  templo,  del  atrio,  del lugar santo y del lugar santísimo.
3.  En el atrio estaban el altar y el lavatorio. Habla de la cruz, de la sangre. El camino.
4.  En el lugar Santo estaban la mesa y el candelero. Habla de alimento luz. La verdad.
5.  En el lugar santísimo, sólo la presencia de Dios habla de la vida.     (Colosenses 1:15).
II.  Jesús es el camino al padre
1.  Camino  es  relación  de  lugar  ya  que  por  él  vamos  de  unsitio a otro.
a.  Cuando  viajamos  por  el  Camino  nuestras  relaciones cambia.
b.  Relacionarnos  con  nuestro  prójimo  deja  de  ser  un problema mientras estamos en el Camino.
2.  Jesús es el camino de las tinieblas a la luz.
a.  Nos lleva del camino del fracaso al camino del éxito.
b.  Nos lleva del camino duda por el camino de la fe.
c.  Estábamos perdidos, él es el camino de reconciliación. (Colosenses 1:20, 21).
d.  Estábamos  confundidos,  él  es  el  camino  de  la salvación. (Hechos 4:12).
III. Jesús es la verdad del padre
1.  Para  algunas  personas  la  verdad  de  Cristo  es  algo.  
Verdad:  Propiedad  que  tiene  una  cosa  de  mantenerse siempre la misma sin mutación alguna.
2.  Los discípulos querían saber algo más del Padre Dios. (8, 9).
a.  Lo único que vale la pena en este mundo es conocer la verdad.
b.  Lo  falso  y  erróneo  está  destinado  a  desaparecer.  La verdad es permanente.
c.  Es  realidad  y  ésta  siempre  sobrevive.  Él  es  la  verdad. (1:17).
a.  En  Jesús  tenemos  la  plenitud  de  la  revelación  de Dios.     (Hebreos 1:1-3).
Conclusión:
1.  Jesús es el originador y dador de la vida. (1:4; 11:25).
2.  Espiritualmente  muertos,  Jesús  viene  a  darnos  vida. (10:10).
3.  Sin  Camino  no  podemos  ir,  sin  Verdad  no  podemos saber.
4.  Sin  Vida  no  podemos  existir,  él  es  la  resurrección  y  la vida.
5.  Sigamos el Camino, sepamos la Verdad, disfrutemos de su VIDA.

4.   ¿Por qué Estar Muerto Cuando Hay Vida En Jesús?
    Juan 11:21  
Introducción:    Hoy  estaremos  hablando  acerca  de  la  muerte. La  muerte  es  la  separación  del  alma-espíritu  y  la  carne.    Es  el momento cuando Dios nos dice que nuestra  estadía en esta tierra ha terminado.    Pero no quiero que hablemos tanto de esa muerte, quiero  que  hablemos  de  otra  muerte.    La  muerte  espiritual,  la muerte  donde  se  separa  el  espíritu  del  hombre  del  espíritu  de Dios.    Esta  muerte  es  muy  diferente  a  la    física.      La  muerte física puede llegar de la noche a la mañana y puede llegar después de  un  proceso.  La  muerte  espiritual  nunca  llega  de  la  noche  a  la mañana.    La muerte espiritual es similar a cualquier enfermedad mortal, se comienza a desarrollar poco a poco, a veces sin que los que  le  rodean  se  dé  cuenta  de  tal  enfermedad.    La  muerte  de
Lázaro no se estaba esperando como se espera la muerte de alguna persona que ha sido diagnosticada con alguna enfermedad mortal.  
El estaba enfermo, pero nadie esperaba que muriera.
I.  La enfermedad y muerte de Lázaro
1.  María  y  Marta  le  mandan  a  Jesús  un  mensaje  urgente
“Señor, he aquí el que amas está enfermo” ¡Lázaro estaba al punto de la muerte!
a.  Jesús se acerca a Betania, después de cuatro días.
b.  Marta  le  reclama  a  Jesús.  V21,  si  hubieses  estado aquí, mi hermano no habría muerto.
2.  María y Marta estaban desilusionadas con el maestro. El no llegó a tiempo.
a.  Hay  momentos  en  la  vida  cristiana  donde  no  vemos  a Dios actuar como nosotros esperábamos.
b.  ¿Cuántas veces ha estado desilusionado con Dios?  
c.  No  podemos  dejar  que  las  decepciones  de  la  vida,  nos quiten la vida.
III.  Hombres decepcionados en la Biblia.
1.  Moisés estuvo tan decepcionado con el pueblo que en vez de  hablarle  a  la  peña,  le  dio  un  cantazo.    Esto  mató  sus posibilidades  de  ver  la  tierra  prometida.    Pero,  no  sus posibilidades de salvación.
2.  Jonás  estuvo  tan  decepcionado  con  Dios,  que  se  fue  a correr.    Pero  reconoció  su falla, aunque le tomó estar en medio de gases mortales antes de reconocerlo.
3.  Pedro  estuvo  tan  decepcionado  con  su  propia  conducta que  después  de  negar  a  Jesús  se  fue  a  llorar  como  un niño.
IV.  ¿Por qué estar muerto cuando hay vida en Jesús?    
1.  La muerte siempre trae amargura.    
a. Cuando  morimos  físicamente la  vida  terrenal  ya  terminó, si  estamos  en  Cristo  vamos  a  estar  con  el  Señor,  si  no servimos a Cristo ya usted sabe.
b. Cuando la muerte es espiritual la agonía es más difícil
c. Cuando  nuestro  espíritu  muere,  nuestro  cuerpo  sigue viviendo el dolor de la muerte.    
d. La  muerte  espiritual  nos  convierte  en  cadáveres ambulantes.
2.  Jesús dijo:      Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente.
a.  Al  decir  tu  hermano  resucitará,  Jesús  quería  que  ella entendiera  que  el  tenía  el  poder  para  glorificarse  en  su problema.
b.  NO  hay  necesidad  de  echarse  a  morir,  de  dejar  que  la decepción nos destruya, de estar muerto cuando hay  vida en Jesús.
3.  Aquí  hay  personas  que  están  muertas,  en  salón  de emergencia o agonizando.
a. Servía a Dios y hoy está alejado del Él, usted está muerto.
b. Sirve a Dios y esta alejándose poco a poco de Dios, usted está agonizando.
c. Poco  a  poco  está  dejando  que  los  problemas  le descontrolen su paz, está en sala de emergencia.
4.  ¿Cuántas cosas muertas hay en tu vida? – un divorcio, hijos perdidos  en  drogas,  finanzas  en  banca  rota,  negocios perdidos,  ministerios  perdidos,  sueños  que  nunca  se realizaron. ¿Donde mataron tus sueños?
Conclusión:

5.   Camino A La Victoria
Efesios 2:1–10

INTRODUCCION:  Uno  de  los  retos  principales  que enfrentamos  nosotros  como  cristianos,  es  no  desviarnos  del camino  cuando  hemos  luchado  tanto.  Nuestro  enemigo  está siempre buscando la manera para desviarnos, a fin de que dejemos de  depender  de Dios  y  dependamos  un  poco  más  de  nosotros mismos.    Mantener principios inmovibles no es fácil; no es fácil cuando Satanás está constantemente tratando de presentarnos otro
modelo  de  conducta  que  puede  verse  más  sencillo  y  mejor  para seguir.    No es fácil cuando el enemigo nos dice que necesitamos modernizarnos para poder estar al día.    No es fácil cuando vemos nuestras  familias  en  riesgo  y  no  podemos  hacer  nada  para ayudarlos.    No  es  fácil  cuando  el  odio,  la  envidia  y  las contiendas nos continúan siguiendo.  
I.  Camino de obediencia (v. 2)
1.  Para  poder  responder  a  obediencia,  tenemos  que entender lo que dicha palabra significa:    
2.  La  obediencia  era  el  único  requisito  en  el  Edén:  no habló de amor ni de fe.
3.  Al acabar la Biblia dice: “el que guarda” (Apocalipsis 1:3; 22:7); no interpreta.
4.  Entre el principio y el fin, está la cruz. (Romanos 5:19; Filipenses 2:8).
5.  Algunos hablan como ángeles, pero en sus hechos son demonios.
II.  Camino de buenas obras (v. 10)
1.  Este  pasaje  aclara  la  relación  de  la  gracia,  fe  y  obras. (vv. 8-10).
2.  Nosotros  somos  la  obra  de  Dios,  creados  en  Cristo Jesús, por fe.
3.  Dios  mismo  tuvo  cuidado  de  trazar  el  camino.  (10;  1 Juan 2:6).
III. Camino de unidad (Efesios 4:1-6)
1.  No  es  unidad  del  espíritu  humano,  sino  del  Espíritu divino.
2.  No  dice  que  debemos  formar  la  unidad,  sino GUARDARLA. (v. 3-5).
3.  Cuerpo  perfecto  no  significa  que  cada  miembro  sea igual al otro.
IV.  Camino de rectitud (Efesios 4:17, 18)
1.  No conducirnos más como los incrédulos, “vanidad de su sentido”.
2.  El  hombre  nuevo  no  es  judío  ni  gentil,  es  una  nueva criatura.
3.  Somos  deudores  a  Dios,  a  la  iglesia  y  al  mundo; seamos rectos.
V.  Camino de amor (Efesios 5:2)
1.  El  sacrificio  de  Cristo  fue  doble:  1.  A  Dios  fiel obediencia. 2.  Al  mundo  “salvar  a  su  pueblo  de  sus pecados”. ¡Cuánto amor!
2.  Ese  es  nuestro  camino  real.  ¿Estamos  nosotros pasándolo? (Juan 4:7, 8).
VI.  Camino de luz (Efesios 5:8)
1.  Nuestro Señor es luz. (Juan 1:4; 8:12). Nosotros somos luz. (Mateo 5:14-16).
2.  Antes éramos ciegos que arrastrábamos a otros ciegos. Seamos luz.
3.  Una  simple  gota  de  rocío  matinal  basta  para embellecer la luz.
VII. Camino del sentido común (Efesios 5:15, 16)
Aquí se nos indican tres medios para andar en este camino.
1.  Canto  sagrado.  (v.  19).  Con  él  afirmamos  la  fe  y echamos al diablo.
2.  Dando gracias en todo. (v. 20) Agradamos a Dios y afirmamos la fe.
3.  Sujetarnos  unos  a  otros.  (v.  21)  Necesitamos estímulo. Tiempo es vida.
 Conclusión:  Siguiendo  estos  siete  pasos  obtendremos  una Victoria garantizada.
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