sábado, 21 de agosto de 2010

Preparación Ministerial: El Arte de aconsejar



Preparación Ministerial: El Arte de aconsejar
Tipo de Archivo: PDF | Tamaño: 2 MBytes | Idioma:Spanish | Categoría: Consejería pastoral



Ampliando nuestra visión 
La  mayoría  de  la  gente  tiene  problemas.  Hay  personas  que  no  se  llevan  bien  con  sus 
maridos o con sus esposas; otras están abrumadas por problemas de dinero o de educación de los 
hijos; otras sufren depresión nerviosa; otras  sienten una especie de vacío  interior que  les  impide 
realizarse; hay en fin otras esclavizadas por el alcohol o por el sexo. 
No hay suficientes consejeros 
profesionales  para  dar  abasto  con  tantos  problemas.  Y  aunque  los hubiera,  son  relativamente 
pocas  las personas con dinero y paciencia suficientes para aguantar  las caras y lentas series de 
sesiones que a menudo exigen los tradicionales métodos de esta clase de psicoterapiaprofesional. 




Además,  es  preciso admitir que el porcentaje de éxitos por parte de psicólogos  y psiquiatras no 
justifica la conclusión de que una terapia profesional que esté al alcance de todos los bolsillos, sea 
la respuesta deseada. 




El aumento de problemas personales y una creciente desilusión en los esfuerzos profesionales por 
resolverlos, han dado paso al  intento de buscar nuevas vías de solución. Ha  llegado el momento 
preciso  para  que  los  creyentes  que  tomen  a  Dios  en  serio,  desarrollen  un  método  bíblico  de 
aconsejar  que  afirme  la  autoridad  de  la  Escritura  y  la  necesidad  y  suficiencia  de  Cristo.  La 
amargura, la culpabilidad, la preocupación, el resentimiento, el mal genio, el egoísmo quejumbroso, 
la  envidia  y  la  lascivia  están  consumiendo  a  nivel  psíquico,  espiritual  (y,  a  menudo,  a  nivel 
fisiológico) las vidas de los hombres. Al menos en nuestro subconsciente, se ha encastillado la idea 
de que, para nosotros los creyentes, la entrega a Cristo y la dependencia del poder y de la guía del 
Espíritu  Santo,  nos  exigen  someternos  a  lo  que  el  médico  prescriba.

  



Pero  el  caso  es  que  la 
psicología y  la psiquiatría profanas se han empeñado en meternos en  la cabeza  la noción de que 
los  problemas  emocionales  son  efecto  de  un  desequilibrio  psíquico  y  dentro  de  esos  límites  se 
mueve  todo  el  diagnóstico,  así  como  la  terapia,  del  especialista  en  psicología.  Un  renombrado 
psicólogo,  O.  Hobart  Nowrer,  ha  recriminado  a  la  Iglesia  el  haber  vendido  su  espiritual 

primogenitura en cuanto al derecho a enseñar a la gente el modo de vivir con eficacia, a su colega 
el  psiquiatra,  no  pocas  veces  su  antagonista,  a  cambio  de  un  plato  de  lentejas  en  forma  de 
propaganda. 


Opción 1.- DOWNLOAD HERE>>>

Opción 2.- DOWNLOAD HERE>>>
 

   


No hay comentarios:

https://story.ad/site/file_download/smartpublicity1467919561neTNIrOs.html